Dos técnicos de Repsol imputados por un vertido aceptan una multa para evitar el juicio

Dos técnicos de Repsol imputados por un vertido en el río Francolí que causó la muerte de más de mil peces en el año 2008 llegaron ayer a un acuerdo con la Fiscalía para evitar el juicio por el caso. El acuerdo contempla imponer a los dos técnicos penas de multa de cuatro meses y dos meses y un día respectivamente, que suman un importe de 1.810 euros, además de una inhabilitación de tres meses y un día para realizar trabajos directamente relacionados con el medio ambiente, informó este miércoles Repsol. El acuerdo también supone abonar la cuantía de 120.344 euros por la responsabilidad civil, ...

Dos técnicos de Repsol imputados por un vertido en el río Francolí que causó la muerte de más de mil peces en el año 2008 llegaron ayer a un acuerdo con la Fiscalía para evitar el juicio por el caso. El acuerdo contempla imponer a los dos técnicos penas de multa de cuatro meses y dos meses y un día respectivamente, que suman un importe de 1.810 euros, además de una inhabilitación de tres meses y un día para realizar trabajos directamente relacionados con el medio ambiente, informó este miércoles Repsol. El acuerdo también supone abonar la cuantía de 120.344 euros por la responsabilidad civil, dinero que la empresa ya presentó al inicio del proceso penal.

El vertido ocurrió en el complejo Repsol Química en febrero de 2008 durante una operación de trasvase de aguas de lavado al producirse un derrame. Falló una de las juntas de la manguera de conducción por un defecto de fabricación, según certificó el Instituto Químico de Sarrià. Una parte de las aguas vertidas se filtró a la canalización subterránea del torrente Manyer, que atraviesa las instalaciones de Repsol, y fue a desembocar al río Francolí. La supervisión establecida en un punto concreto del recorrido de la manga no fue suficiente para detectar la fuga de producto, admite la empresa. La Fiscalía remarca la inexistencia de peligro para la población durante el episodio.