Las críticas de teatro de la semana: tres comedias en clave de periodismo, drama familiar y filosofía

Silvia, una comedia con tintes de drama escrita y dirigida por Nelson Valente puede interpretarse como el epítome del teatro contemporáneo argentino: no es tan importante la historia, sino cómo se cuenta. Silvia (Lide Uranga) viaja a Málaga con su hijo Jorgito (Julián Ponce) a ver a su otra hija Mónica (Mayra Homar) que vive con su novio (Gabriel Beck). La tensión familiar se desata, resurgen los secretos del pasado y estallan las sorpresas del presente. El reducido espacio de la sala Flyhard permite una inmersión total al espec...

Silvia, una comedia con tintes de drama escrita y dirigida por Nelson Valente puede interpretarse como el epítome del teatro contemporáneo argentino: no es tan importante la historia, sino cómo se cuenta. Silvia (Lide Uranga) viaja a Málaga con su hijo Jorgito (Julián Ponce) a ver a su otra hija Mónica (Mayra Homar) que vive con su novio (Gabriel Beck). La tensión familiar se desata, resurgen los secretos del pasado y estallan las sorpresas del presente. El reducido espacio de la sala Flyhard permite una inmersión total al espectador, que respira la obra en primer plano.

Los límites del periodismo, el peso de la precisión informativa sobre el estilo y el declive de la verificación de la información son algunos de los temas que se plantean en Hechos y faltas. La pieza, dirigida por Bernabé Rico, está inspirada en el libro The lifespan of a fact que cuenta, en tono de comedia, un episodio sucedido en la revista estadounidense The Believer en 2003. El pundonoroso Jim Fingal (interpretado por Juan Grandinetti) es contratado por la editora Emily (Ángeles Martín) para que revise un texto de 15 páginas sobre la alta tasa de suicidios en el estado de Nevada. Fingal se encontrará con alteraciones de los hechos y mil licencias poéticas. Ambos personajes defienden sendas maneras antagónicas de entender la realidad y de afrontar su trabajo.

En Ortega, Ernesto Caballero y Karina Garantivá continúan con su labor de llevar la filosofía al teatro. Una pareja decide deshacerse de su colección de libros del célebre Ortega y Gasset, pero cada vez que intentan hacerlo se encuentran con un obstáculo que devuelve las obras a casa. Los diálogos de los actores (Ana Ruiz, Álex Gadea y Alberto Fonseca) están revestidos de frases del pensador madrileño.

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