Condenados exfuncionarios salvadoreños por pactar fraude electoral con pandillas
Dos exministros, un exalcalde de San Salvador y un periodista fueron condenados por entregar 350.000 dólares a las maras a cambio de favorecer a sus partidos en las elecciones de 2014
Tres exfuncionarios, un exempleado de una ONG y un periodista fueron condenados este martes por pactar con las pandillas un fraude en las elecciones presidenciales en El Salvador de 2014. Los condenados por los delitos de agrupaciones ilícitas y fraude electoral son el exministro de Justicia Benito Lara, el de Gobernación Arístides Valencia, el exalcalde de San Salvador Ernesto Muyshondt, el empleado de la ONG Equipo Nahual, Wilson Alvarado y el periodista alemán-salvadoreño Arn Richard Lüers, conocido como Paolo Lüers.
La Fiscalía señaló que los acusados entregaron un total de 350.000 dólares a la MS-13 y a las dos facciones del Barrio 18, Revolucionarios y Sureños, a cambio de favorecer a sus partidos en las presidenciales de 2014. Según la acusación fiscal, Lüers y Muyshondt entregaron 100.000 dólares a cambio de respaldo para Arena, mientras que funcionarios del gobierno del FMLN entregaron 250.000 para asegurar continuidad de su partido en el poder. Tras dos rondas de votación, finalmente terminó electo Salvador Sánchez Cerén por el partido de izquierda FMLN. En la actualidad, el expresidente, de 81 años, está acusado de corrupción y vive exiliado en Nicaragua.
Las condenas dictadas este martes fueron de 28 años para los exministros, 18 para el exalcalde y 18 también para el periodista y asesor político. De los condenados, los únicos que guardan prisión son el exministro Lara y el exalcalde Ernesto Muyshondt. Valencia, Alvarado y Lüers están prófugos de la justicia.
EL PAÍS logró contactarse con Lüers, quien aseguró que las acusaciones en su contra son falsas. “Yo lo que hice fue exactamente lo contrario de lo que se me acusa: moví mis contactos para evitar que ese tipo de negociaciones se dieran”, dijo. “Llamé [a los líderes pandilleros] y les eché una gran puteada. Les dije: “Ustedes no deberían hacer pactos con partidos, ni mucho menos pactos electorales, ni mucho menos usar su control en las comunidades sobre cómo votar”, le dijo a este periódico.
Por este caso también estaban acusados el exalcalde del municipio de Ilopango, Salvador Ruano, de Arena, y el excomandante guerrillero Raúl Mijango, pero ambos fallecieron durante el proceso. Al final del juicio, Lara se declaró preso político y aseguró que apelaría al resultado. Además, señaló que su condena se basa únicamente en el dicho de un pandillero. Por su parte, el exalcalde Muyshondt dijo estar siendo víctima de tortura y padecer de un tumor y no estar recibiendo atención médica.
La condena, por otra parte, genera una serie de dudas sobre qué pasará con los funcionarios del actual Gobierno de Nayib Bukele que también han sido señalados de negociar con las pandillas. En diciembre de 2021, el Departamento de Estado de Estados Unidos sancionó a dos altos funcionarios por negociar reducciones de homicidios a cambio de beneficios carcelarios, entre ellos el actual gerente de las prisiones salvadoreñas, Osiris Luna, y el director de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín. Estos dos funcionarios han sido defendidos por el presidente y mantienen sus cargos hasta la fecha.
En 2023, la Fiscalía estadounidense también señaló en una acusación ante una corte federal de Nueva York a esos dos funcionarios de haber negociado con la pandilla una reducción de homicidios a cambio de beneficios entre los años 2019 a 2021. La acusación dice, además, que las pandillas habrían ofrecido ejercer su influencia en sus miembros, familiares y habitantes de las comunidades controladas para garantizar el triunfo del partido del presidente Bukele, Nuevas Ideas, en las elecciones de alcaldes y diputados realizadas en febrero de 2021.
Entregas de dinero
Las condenas de este martes son el culmen de un caso judicial en el que dos exlíderes pandilleros, uno de la MS-13 y uno del Barrio 18, lanzaron sendas confesiones revelando detalles sobre supuestas reuniones que sostuvieron con políticos de ambos partidos previo a las elecciones de 2014.
De acuerdo con el testigo Carlos Eduardo Burgos Nulia, alias Nalo de Palmas, exlíder del Barrio 18, las presuntas negociaciones para el fraude con el Gobierno del FMLN empezaron en 2013. A esos encuentros, según su testimonio, asistieron representantes de las tres pandillas y los entonces diputados Lara y Valencia. Estas reuniones eran coordinadas por Alvarado y Mijango. Según narra el testigo, después de varios encuentros, Lara y Valencia les ofrecieron 100.000 dólares a las tres pandillas a cambio de un respaldo que ellos estimaban en 60.000 votos, la misma cantidad de personas que las autoridades vinculaban a las pandillas en todo el país en aquel momento. Sin embargo, las maras no aceptaron y pidieron elevar la cifra al menos a 150.000 dólares, algo que supuestamente los funcionarios aceptaron.
Tras las elecciones celebradas el 2 de febrero de 2014, el margen entre los contendientes Salvador Sánchez Cerén y Norman Quijano fue muy cerrado, por lo que la ley exigía una segunda vuelta. Previo a la segunda votación, los funcionarios del FMLN supuestamente volvieron a acercarse a las pandillas para entregar 100.000 dólares más.
Con el partido Arena, los acercamientos empezaron justo después del empate técnico. Según el testigo, tras la segunda ronda, Mijango, quien también había organizado las reuniones con el FMLN, le dijo a los líderes de las tres pandillas que Arena estaba buscando lo mismo: su apoyo en las elecciones. Cuatro días después de su reunión con Mijango fueron citados a un rancho de playa donde se encontraban Ernesto Muyshondt, para entonces vicepresidente de ideología del partido y el alcalde de Ilopango, Salvador Ruano.
En la reunión, los pandilleros pidieron 150.000 dólares a cambio de su respaldo, tal como lo habían hecho con el FMLN. El testigo dice que ambos políticos le pidieron tiempo para pensarlo.
Según el testigo, días después de aquella reunión, Mijango citó “de emergencia” a los líderes de las tres pandillas. Al llegar a su oficina, se encontraron con Paolo Lüers. Lüers, según publicaciones del periódico El Faro, ha sido asesor de Arena y también participó públicamente del proceso conocido como “La tregua” entre las pandillas y el Gobierno del expresidente Funes para reducir los homicidios a cambio de beneficios carcelarios. El testigo asegura que en aquella reunión Lüers les dijo que estaba en representación del partido Arena y, tras preguntarles si estaban dispuestos a apoyar, salió de la oficina y regresó con una maleta con 100.000 dólares.
“Yo sí estuve en esa reunión, pero pasó lo contrario a lo que dice el testigo. Yo la convoqué para intentar convencerlos [a los pandilleros] de que dejaran esa babosada. Piwa [un exlíder de la MS-13] estaba súperenojado conmigo. Mi interés iba en la lógica de la mediación, de la tregua en que yo estaba metido. Ellos ya no se debían meter con los partidos políticos”, dijo Lüers.
Según Lüers, las pandillas terminaron beneficiando al FMLN. “Fue evidente. Ellos buscaban negociar de verdad con el FMLN para hacerlo ganar y negociar de mentira con Arena solo para sacarle dinero”, dijo Lüers a EL PAÍS. Añadió que apelará a la resolución dada este martes por el juzgado. “Esta condena para mí es nula”, añadió.