Panamá albergará un foro de alto nivel sobre las claves del crecimiento económico de América Latina y el Caribe
CAF detalla la agenda del Foro Económico Internacional de América Latina y el Caribe, un evento organizado con el grupo Prisa para plantear alternativas a la escasa inversión y productividad en la región
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“A América Latina y el Caribe le hace falta una reflexión anual sobre cómo integrar el sector público y privado para producir las decisiones del desarrollo en nuestra región”. Así ha arrancado Sergio Díaz-Granados, presidente de CAF-banco de desarrollo de América Latina y el Caribe, una reunión con medios en Panamá en la que detalló la agenda y la coyuntura del Foro Económico Internacional América Latina y el Caribe 2025, organizado con el grupo Prisa. Para el colombiano, este evento —que se celebrará en Panamá el 29 y 30 de enero— debe convertirse en un encuentro de reflexión anual de alto nivel, una cita que, a su juicio, requiere el continente para acercarse a un crecimiento dinámico, inclusivo y resiliente.
Grandes autoridades gubernamentales, voces de la vanguardia económica y las firmas más comprometidas con el crecimiento sostenible tienen una cita obligada en Panamá a finales de mes para encontrar las respuestas a la misma pregunta: ¿Cómo retomar la senda del crecimiento? “Este foro busca ser un espacio para que líderes de toda la región diseñen juntos soluciones innovadoras y realistas que permitan construir un futuro más próspero e inclusivo para nuestra gente”, añadió el presidente de CAF.
El crecimiento económico es una preocupación global que resuena con más fuerza aquí, en la región más desigual del mundo y una de las que más lentamente crece y se digitaliza. En América Latina y el Caribe, el promedio del crecimiento anual ronda el 1,6%, a pesar de los innumerables recursos humanos y naturales y las ventajas competitivas de la región. Es por ello que CAF, en alianza con el Grupo Prisa y World in Progress (WIP), organiza esta conferencia; para discutir sobre la baja inversión, la desigualdad y los efectos del cambio climático, así como el papel clave del sector privado para impulsar el desarrollo sostenible y la innovación.
Para que la conversación sea lo más enriquecedora y plural, ha confirmado asistencia un panel del más alto nivel en el que destacan Rebeca Grynspan, secretaria general de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo; Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para la región de América Latina y el Caribe; el sociólogo y economista Jeremy Rifkin, José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL); Joseph Oughourlian, presidente del Grupo Prisa; Gustavo Santos, director para las Américas de ONU Turismo; Susan Segal, presidenta del Council of the Americas, Núria Vilanova, presidenta del Consejo Empresarial Alianza por Iberoamérica (CEAPI), y Rebecca Bill Chavez, directora de Diálogo Interamericano, entre muchos otros.
Durante los dos días del evento, se llevarán a cabo paneles de discusión, conferencias magistrales y talleres interactivos, muchos de ellos retransmitidos en directo o abiertos al público que decida inscribirse. Las sesiones abordarán temáticas prioritarias como la coyuntura económica del 2025, la economía circular en la región, el emprendimiento como motor de desarrollo, o la inclusión financiera mediante tecnología.
Díaz Granados reconoce que son muchos los desafíos de la región. Desde el estancamiento de la clase media (que se mantiene sobre el 40%), las altísimas tasas de informalidad, que afectan a casi uno de cada dos trabajadores, las crecientes tasas de pobreza, que pasó del 9% en 2010, al 11% en 2023, hasta el débil esfuerzo en digitalizar el continente. Esta es la región que menos invierte per cápita en ello. “La foto de la desigualdad nos tiene que preocupar”, zanjó. El presidente de CAF alertó además que la brecha de desigualdad en el continente se sigue ensanchando más en las zonas donde habitan pueblos indígenas y afrodescendientes. “Una persona negra del Pacífico colombiano o en otra parte puede pasar hasta 11 generaciones hasta poder ver una mejora en su condición de ingreso laboral”, lamentó.
El banco de desarrollo decidió a conciencia Panamá como sede del primero y los próximos foros por ser el país que acoge el directorio de CAF. El presidente añadió que el país es, además, sede de más de 120 expertos y expertas del banco multilateral y que, si bien empezó invirtiendo 5 millones de dólares en 1998, ya cuenta con una cartera de 2.000 millones actualmente. “El 78% de la cartera actual de CAF en Panamá tiene un impacto positivo en materia de sostenibilidad”, añadió.
Para el colombiano, Panamá es ejemplo de grandes apuestas por el desarrollo sostenible. En este primer abrebocas, habló de la minería responsable (ya que el continente cuenta con níquel, litio y cobre, elementos básicos para la transición limpia), la transición energética y el impulso de los agronegocios, para un continente poco tecnificado que alimenta a más de 1.500 millones de personas en el mundo. “América Latina y el Caribe tiene el potencial de convertirse en una región de soluciones globales ante los grandes retos del desarrollo, pero en paralelo debe lograr un crecimiento sostenido e inclusivo y abordar sus problemas estructurales, como las desigualdades, la baja productividad o la reducción de la pobreza. Este foro será un paso clave hacia estos objetivos”, zanjó.