Nuevas imágenes revelan la presencia de madereros en territorio de un pueblo aislado de la Amazonia
Las fotografías muestran a más de 50 indígenas mashco piro a orillas del río Las Piedras, en el sureste de Perú, cerca de concesiones madereras. Activistas piden revocar las licencias de tala que amenazan a estas comunidades
EL PAÍS ofrece en abierto la sección América Futura por su aporte informativo diario y global sobre desarrollo sostenible. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscríbete aquí.
Nuevas imágenes de los mashco piro, una de las comunidades indígenas en aislamiento voluntario más grandes del mundo, fueron publicadas este martes por la organización sin fines de lucro Survival International. Las fotografías muestran a decenas de miembros de este pueblo en las orillas del río Las Piedras, en la región de Madre de Dios, al sureste de Perú, cerca de concesiones de diversas empresas madereras, entre ellas Canales Tahuamanu.
Más de 50 mashco piro aparecieron cerca del pueblo Yine de Monte Salvado, mientras que otro grupo de 17 fue visto cerca de Puerto Nuevo. En sus declaraciones a la agencia Reuters, la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes acotó que la tribu, estimada en 750 personas, ha sido vista con mayor frecuencia en las últimas semanas, aparentemente en busca de alimentos y alejándose de la creciente presencia de madereros.
Este pueblo nómada se desplaza entre los departamentos amazónicos de Ucayali y Madre de Dios, siguiendo los cambios en el nivel del agua. Durante el auge del caucho a inicios del siglo XIX, los mashco piro se refugiaron en las áreas más inaccesibles de la selva para escapar de la esclavitud y la explotación. En las décadas siguientes, la comunidad continuó desplazándose en respuesta a la presencia de narcotraficantes y madereros ilegales en su territorio.
A raíz de esta situación, el Gobierno peruano creó una serie de reservas naturales, incluyendo la Reserva Indígena Mashco Piro en 1997 y la Reserva Territorial Madre de Dios en 2002. Aquel mismo año, el Gobierno entregó una concesión de 50.000 hectáreas a la empresa maderera Canales Tahuamanu en el territorio adyacente a la reserva dedicada a los mashco piro.
Sin embargo, como reportó The Washington Post, a lo largo de los últimos 20 años se hizo evidente que los mashco piro estaban presentes más allá de los límites de la reserva. Un panel del Ministerio de Cultura sugirió, en 2016, recategorizar y expandir la Reserva Territorial Madre de Dios y excluir e indemnizar a los concesionarios. Como se refleja en el mismo reportaje, hasta ahora estas medidas no se han puesto en práctica.
La presencia de trabajadores de Canales Tahuamanu representa una amenaza continua para la supervivencia del pueblo mashco piro, pues la intrusión de los madereros no solo pone en peligro su territorio, sino que también puede introducir enfermedades y generar conflictos violentos. Sin embargo, el Gobierno peruano no ha tomado acción directa frente a las exhortaciones de los grupos de activistas.
Las tensiones escalaron en 2022, cuando dos trabajadores de Canales Tahuamanu fueron atacados con flechas por parte de esta comunidad, lo que provocó la muerte de uno de ellos. El mismo año, un relator especial de la ONU pidió a la empresa detener sus operaciones y responder a las acusaciones de posible “contacto forzado” con los mashco piro.
En este contexto, las nuevas imágenes demuestran que un gran número de mashco piro no contactados viven a escasos kilómetros de las operaciones madereras, como declaró Alfredo Vargas Pio, presidente de la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes, a Survival International. “El Gobierno no solo está fallando en la protección de su territorio, sino que lo ha entregado a empresas madereras”, dijo Vargas Pio.
Pese a estar certificada hasta el 2025 por el Consejo de Administración Forestal por sus operaciones sostenibles, Canales Tahuamanu ha sido denunciada repetidamente por violar leyes nacionales e internacionales que protegen a los pueblos indígenas. A la luz de los nuevos descubrimientos, diversos grupos activistas están buscando que se retire la certificación a la empresa.
Como declaró la presidenta de Survival International, Caroline Pearce, las acciones de la compañía constituyen “un desastre humanitario en curso”. La presidenta cree que no solo es necesario que los madereros sean expulsados del territorio mashco piro, sino que el Consejo de Administración Forestal (FSC) —una organización no gubernamental alemana que promueve la acreditación del manejo sostenible de bosques— también cancele la certificación a Canales Tahuamanu. “De lo contrario, demostrarán que su sistema de certificación es una farsa”.