Videorreportaje | El senegalés que llegó en patera y ahora es el maestro arrocero de un chiringuito de éxito en Mazarrón
Elhadji Diouf vivía en la misma calle que el hombre asesinado al grito de “moro de mierda”. El cocinero visitó a su esposa en Marruecos antes de la pandemia, se quedó embarazada y él no conoce a su bebé
Elhadji Diouf remata el último de los arroces del día. Un poquito de alioli y flores para decorar. Más conocido como Ali entre sus compañeros —por su buen hacer con la salsa casera—, este senegalés de 36 años se ha convertido en el maestro arrocero de uno de los restaurantes de éxito de Mazarrón, en Murcia. Pescador en su Senegal natal, Diouf cuenta al resto del equipo del restaurante Bangalore su historia: desde cómo llegó en patera a Melilla en 2012 hasta cómo se convirtió en el responsable de los arroces de este local, que fue distinguido con un sol de la guía Repsol el pasado 29 de junio. Una historia que puede conocer en el vídeo El maestro arrocero que llegó de Senegal, sobre este párrafo. El cocinero visitó a su mujer en Marruecos justo antes de la pandemia, volvió a España sin saber que ella estaba embarazada y no ha podido conocer aún a su bebé debido a las restricciones de la covid. Ahora ha empezado el proceso para la reagrupación familiar.
En la Región de Murcia se han registrado varios episodios xenófobos en las últimas semanas, en un ambiente marcado por el discurso intolerante y discriminatorio del partido más votado en las últimas elecciones generales en esta comunidad, Vox. Uno de esos ataques ocurrió precisamente en Mazarrón, donde reside Diouf, el pasado 13 de junio, cuando el marroquí Younes Bilal fue asesinado por un exmilitar retirado al grito de “moro de mierda”. El chef senegalés y la víctima vivían en la misma calle y se conocían “muy bien”, relata Diouf.
El maestro arrocero llegó a Melilla en una patera junto a una decena de personas. En 2020, la llegada de senegaleses aumentó con la reapertura de la ruta canaria debido a la falta de pescado, explotado por grandes flotas nacionales e internacionales, y al zarpazo de la pandemia tanto al turismo como a la economía informal. Un incremento que situó a los senegaleses como la segunda nacionalidad por número de llegadas al archipiélago, después de los marroquíes. Y se espera que la crisis migratoria repunte este verano. Desde el pasado 15 de junio y hasta final del mes pasado arribaron a las costas canarias más de 1.100 personas, según los datos registrados por Cruz Roja.