Arizona y Montana decidirán en las urnas la protección al aborto
Los dos Estados se suman a otras siete regiones que podrían llevar el derecho a la interrupción del embarazo a sus constituciones locales tras la derogación de ‘Roe contra Wade’ en 2022
Arizona y Montana se han sumado a los Estados que podrán defender en las urnas el derecho de las mujeres a interrumpir su embarazo. Ambos han superado este martes obstáculos legales y llegarán a las boletas de las elecciones generales del 5 de noviembre. El debate sobre el aborto ha sido una de las principales líneas narrativas de la campaña electoral en Estados Unidos. Los demócratas han prometido aprobar mayores protecciones, mientras que los republicanos prefieren que cada Estado se posicione sobre el tema.
En Arizona, una de las siete entidades que definirán la elección de otoño, el Supremo desechó el martes un esfuerzo de los grupos antiderechos para evitar que la pregunta llegara a las boletas. La organización Arizona Right to Life había recurrido la decisión de un tribunal inferior que avaló la pregunta, formulada en 200 palabras, sobre la que los votantes deberán posicionarse en noviembre. La llamada Proposition 139 permite interrumpir el embarazo hasta el punto de la viabilidad del feto, tradicionalmente entre las semanas 23 o 24, pero también incluye excepciones como riesgos de muerte o para la salud mental de la madre.
Arizona cuenta actualmente con una de las leyes más restrictivas, pues solo permite abortar antes de las 15 semanas. Las excepciones son solo para casos de emergencia médica. La derogación de Roe contra Wade en 2022 dejó a la entidad con una legislación draconiana escrita a finales del siglo XIX que no contemplaba excepciones para casos de incesto o violación. Pero los congresistas locales la sustituyeron en abril, de forma temporal, con la que está vigente ahora.
Kamala Harris ha puesto este tema al centro de su candidatura. Incluso antes de convertirse en la abanderada del Partido Demócrata, la aspirante visitó Phoenix, la principal ciudad del Estado, justo cuando se cumplieron los dos años de la caída del emblemático fallo que legalizaba el aborto. En un mitin, la entonces vicepresidenta afirmó que Donald Trump y la supermayoría conservadora que creó en el Supremo eran los responsables de este “caos”.
La coalición Arizona for Abortion Access, liderada por Planned Parenthood y conformada por varias organizaciones, reunieron en un año más de medio millón de firmas para llevar el derecho al aborto a la Constitución. Hace una semana, la Secretaría de Estado validó 577.000 signaturas, el mayor número para una propuesta ciudadana en la historia de Arizona.
“Este es un triunfo mayúsculo para los votantes de Arizona y para la democracia”, aseguró Arizona for Abortion Access en un comunicado la noche del martes. La organización podrá enfocarse ahora en que los habitantes de la región aprueben la propuesta, que convierte al aborto en “un derecho fundamental” y prohíbe la persecución de los profesionales de la salud que realizan estas intervenciones.
Otros ocho Estados decidirán en las urnas el futuro del aborto en sus constituciones locales: Colorado, Florida, Maryland, Missouri, Nueva York, Nevada, Dakota del Norte y Montana. Este último se ha sumado a la lista el martes, después de que Christi Jacobsen, la secretaria de Estado, afirmara que la propuesta cumple con todos los requisitos para llegar a las urnas este 5 de noviembre.
Esta iniciativa pretende elevar un fallo del Supremo estatal de 1999 que determinó que las pacientes que buscan abortar están protegidas por el derecho a la privacidad de la Constitución federal. Los legisladores republicanos han tratado de atacar esta decisión con una reforma a la ley aprobada en 2023. Esta, sin embargo, se encuentra todavía a la espera de que los tribunales locales se pronuncien sobre su legalidad. Antes llegará la voz de los votantes de la entidad.