El Galaxy S24 Ultra, a prueba: así usa la inteligencia artificial el móvil estrella de Samsung
La compañía surcoreana incorpora la traducción simultánea de llamadas o mensajes en su nueva serie de teléfonos, que también aplica la IA generativa para reconocer objetos, resumir textos o retocar fotos
Cuando Samsung presentó su nueva serie Galaxy S24 todas las miradas se dirigieron hacia su gran novedad: Galaxy AI. Es el primer caso de una inteligencia artificial generativa incorporada de manera transversal a un smartphone. EL PAÍS ha probado durante unos días el Galaxy S24 Ultra con la idea de exprimir esas nuev...
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Cuando Samsung presentó su nueva serie Galaxy S24 todas las miradas se dirigieron hacia su gran novedad: Galaxy AI. Es el primer caso de una inteligencia artificial generativa incorporada de manera transversal a un smartphone. EL PAÍS ha probado durante unos días el Galaxy S24 Ultra con la idea de exprimir esas nuevas funciones inteligentes.
El Galaxy S24 Ultra es el teléfono más sofisticado —y también más caro, cuesta entre 1.459 y 1.819 euros— de la serie lanzada por Samsung. Es un dispositivo de dimensiones considerables (de alto mide 16,2 centímetros, de ancho tiene 7,9 y su grosor es de 8,6 milímetros), que alojan en un lateral su ya tradicional lápiz óptico, denominado S Pen. En total, pesa 232 gramos. Todo en la línea de anteriores versiones del terminal. Su pantalla, de 6,8 pulgadas y con tecnología QHD+, se aprovecha al máximo, sin apenas márgenes. La primera sensación es la fluidez en el funcionamiento, habitual en este tipo de móviles de gama alta.
Sin embargo, más que nunca, lo más llamativo de este smartphone está en el interior. Hasta ahora, los asistentes personales, tipo Siri o Google Assistant, permitían sobre todo hacer consultas y llamar a otras aplicaciones. Galaxy AI va más allá y se integra en diferentes apps, modificando el contenido que aparece en las mismas.
Una de las funciones más destacadas, desarrollada en conjunto con Google, es Rodea para buscar. Al mantener pulsado el botón central del menú inferior, la pantalla se congela y el usuario puede hacer un círculo sobre un objeto o una persona. Da igual que esté viendo una foto, un vídeo o leyendo un artículo en Internet. La IA reconoce el objeto mediante una búsqueda por imágenes en el buscador de Google.
La herramienta reconoce animales, plantas e incluso hongos. Y también lugares, aunque no sean muy conocidos. Eso sí, previamente alguien tiene que haberlos fotografiado y subido a Internet. En un vídeo que muestra el paso de un tren y donde se adivinan puestos de mercadillo adyacentes, la IA acierta que se trata del Mercado Mae Klong, en Tailandia. También es capaz de encontrar la marca y el modelo de una plancha de pelo o de unas zapatillas después de fotografiarlas. Aunque si buscas una persona poco conocida, es posible que falle. En este caso, la IA se fija en otros patrones para buscar. En vez encontrar la cara, de la cual no tiene muchas referencias, muestra gente con la ropa o el pelo parecidos.
IA para leer, resumir y tomar notas
Galaxy AI también actúa en el navegador. Si das con un artículo escrito en un idioma que no conoces, la IA lo traduce directamente sobre la página web. Aunque lo más destacado es su capacidad para resumir el texto. Ofrece dos versiones, una más detallada y otra más esquemática. El resumen, que suele contener lo principal, a veces se conforma con frases literales del texto. ¿Su utilidad? El ahorro de tiempo puede ser especialmente valioso si alguien se quiere leer la política de privacidad de una red social o de cualquier servicio de Internet. Aunque hay que tener en cuenta que la inteligencia artificial puede dejar fuera matices, así que conviene revisar los puntos más delicados.
En la aplicación de Samsung Notes, la IA ayuda a pasar notas manuscritas, tomadas con el S Pen, a texto digital. Era algo que el terminal ya hacía antes, pero ahora también extrae resúmenes de cualquier archivo de esa aplicación. Al igual que con un artículo en el navegador, el usuario solo tiene que buscar el botón con estrellitas que llama a la inteligencia artificial. Se sitúa en la parte inferior y sirve para traducir, resumir o incluso darle un formato esquemático a la información. Así, la herramienta muestra de forma presentable lo que al principio eran las notas deslavazadas de una reunión.
Otra de las novedades llamativas de la IA del Galaxy S24 Ultra es la traducción simultánea de las llamadas telefónicas. Una vez activada, el teléfono traduce en texto y con una voz sintética lo que dice el interlocutor en otro idioma. En EL PAÍS hemos probado esta función para una conversación español-inglés y para otra, español-hindi. Resulta efectiva con frases cortas y cuando la conversación es clara y sin titubeos, mientras que la confusión aumenta cuanto más complejo y entrecortado es el discurso. Evidentemente, la traducción desde el hindi fue más accidentada, aunque podría servir para un entendimiento básico.
La IA también se integra en otras aplicaciones. En WhatsApp y en el correo electrónico permite traducir los mensajes que se reciben y se envían. En la grabadora ofrece la posibilidad de transcribir los audios. Capta bastante bien la conversación y diferencia con eficacia cuándo habla cada una de las personas. De nuevo, los titubeos empañan la transcripción, cuya puntuación siempre merecerá un repaso, al igual que la gramática de algunas frases.
Esta es la primera versión de Galaxy AI, así que con tiempo (y entrenamiento) es previsible que los resultados cada vez sean mejores. En este sentido, hay que destacar que Samsung asegura que su IA no se entrenará con los datos de los usuarios.
Retoque fotográfico inteligente
Hasta ahora la inteligencia artificial actuaba sobre la ejecución de la fotografía, es decir, en la aplicación de cámara. Esta podía mejorar la imagen de diferentes formas, al iluminar una zona con poca luz, aumentar la nitidez, ajustar los colores o reducir el ruido de las fotos. Todo ello se hacía de manera automática. Pero con el Galaxy S24, la IA entra de lleno en todo lo relacionado con el apartado gráfico.
La edición de fotografías mediante inteligencia artificial, hasta ahora explotada sobre todo por apps especializadas de pago, salta al primer plano con el nuevo móvil de Samsung, que ya viene equipado de serie con estas funciones. Una vez tomada la foto, al deslizar hacia arriba con el dedo aparecerán sugerencias básicas, como añadir un efecto retrato o mejorar el contraste. Estas opciones pueden usarse después de haber disparado con la cámara trasera del S24 Ultra, que se compone de cuatro sensores y tiene una lente principal de 200 megapíxeles.
Pero donde más se notan las novedades de Galaxy AI es cuando el usuario se propone modificar una imagen que ya tiene en su galería de fotos. Es posible borrar un objeto, hacerlo más grande o cambiarlo por otro. La inteligencia artificial rellenará el vacío mediante una generación calculada de píxeles. También se puede enderezar un edificio para que coincida con la línea vertical de los márgenes, pues la IA completará el fondo sin dificultades. Samsung incorpora una marca de agua automáticamente a las imágenes modificadas con su IA, aunque se puede eliminar con un proceso de edición bastante sencillo.
En el corazón del hardware que sustenta todas estas prestaciones está el procesador Qualcomm Snapdragon 8 Gen 3 y 12 gigas de RAM. El almacenamiento varía entre las versiones de 256 gigas, 512 gigas y 1 tera, mientras que la batería, que aguanta sobradamente una jornada de uso intenso, es de 5.000 miliamperios-hora.
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