Una gripe adelantada y con mutaciones: siete claves de una temporada atípica que pone en alerta a las autoridades
La época de contagios llega más pronto y lo hace con un virus cambiado, lo que hace temer una oleada más grave de la enfermedad este invierno
España y toda Europa se enfrentan a una temporada de gripe atípica que ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias. El virus ha llegado antes de lo habitual y los análisis genéticos revelan que es distinto al que circuló en inviernos anteriores, por lo que encontrará una población menos inmunizada.
Todo esto hace temer que la oleada de este año pueda ser más importante que las previas. El Centro Europeo para el Control de Enfermedades (ECDC, la agencia de salud pública de la UE) ha instado a los países a acelerar las campañas de vacunación y preparar los sistemas sanitarios para un posible aumento de las hospitalizaciones.
La epidemia de la gripe del pasado invierno fue de “menor gravedad” que la previa, sostiene un informe del Ministerio de Sanidad. A pesar de ello, provocó 1.825 muertes y más de 33.000 hospitalizaciones, según un estudio de investigadores españoles publicado en la revista Influenza and Other Respiratory Viruses.
Las que siguen son las siete claves de una temporada que ya ha empezado a golpear a la mayor parte de España.
Un virus madrugador
“Las detecciones de gripe han aumentado de forma inusualmente temprana en los países de la Unión Europea […]. El adelanto es de tres a cuatro semanas”. Así empieza un informe de riesgo publicado por el ECDC que alerta de algo que ya pudo verse en Japón. El país asiático detectó en agosto un incremento de casos y declaró el inicio oficial de la temporada de gripe en septiembre, el segundo más temprano en dos décadas.
“La gripe en el hemisferio norte suele empezar en Asia y se extiende hacia Europa, así que tratamos de anticiparnos. Adelantamos, por ejemplo, la vacunación de los niños [un grupo con un papel relevante en la propagación del virus] a la tercera semana de septiembre en lugar de a mediados de octubre”, explica el secretario de Salud Pública de la Generalitat de Cataluña, Esteve Fernández.
Entre otras comunidades, el País Vasco también trató de adaptarse a la nueva situación e instaló en octubre un vacunódromo en Bilbao para acelerar la campaña tras detectar un incremento de hospitalizaciones en Bizkaia.
Un virus diferente
Dos subtipos de virus de la gripe A han estado detrás de las oleadas de los últimos años, el H1N1 y el H3N2. Las letras hacen referencia a dos proteínas de la superficie del patógeno y los números a sus variantes. “Los cambios este año son dos. El primero es que llevábamos un par de temporadas con una menor presencia del H3N2 y ahora es el dominante. El segundo es que, además, este virus ha desarrollado varias mutaciones hasta configurar un nuevo subclado, el K”, detalla el microbiólogo Diego García Martínez de Artola, portavoz de Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC).
Según el informe de riesgo del ECDC, prácticamente la mitad de las pruebas genéticas del virus de la gripe volcados desde Europa en GISAID —una gigantesca base de datos con los resultados de secuenciaciones— es del subclado K. No hay datos publicados sobre su presencia en España.
¿Es la nueva forma del virus más grave?
Es algo que se está investigando y sobre lo que no hay conclusiones claras. Pero aunque no lo fuera y el riesgo individual de desarrollar un cuadro grave no sea mayor, la irrupción de un virus distinto sí suele provocar oleadas más grandes —con más infectados, aunque sean leves— e intensas, y también puede explicar por qué ha llegado antes.
“Si el virus H3N2 ha circulado menos en los últimos años, la población ha tenido menos contacto con él y, por tanto, ha perdido inmunidad natural. Si, además, ha sufrido mutaciones, los anticuerpos lo reconocerán peor”, destaca Gregorio Montes Salas, secretario general de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria (SEMPSPGS).
El ECDC ha alertado de que “aunque el riesgo individual de enfermedad grave pueda ser similar al de años anteriores, una epidemia más grande, impulsada por una menor inmunidad frente a la infección, puede causar un mayor número absoluto de hospitalizaciones”.
¿Escapa a las vacunas?
Al igual que con la inmunidad natural, la lograda con las vacunas será previsiblemente algo menos efectiva ante una nueva forma del virus. Así lo han apuntado las primeras investigaciones hechas en hurones avanzadas por el ECDC. En este punto, hay que tener en cuenta que las vacunas que se administran hoy han sido producidas basándose en los virus circulantes hace unos meses en el hemisferio sur, antes de la irrupción del subclado K.
Los expertos, sin embargo, insisten en que las vacunas siguen protegiendo en lo más importante. “Si tenemos una mayor inmunidad, evitaremos más contagios. Pero, incluso si esta es algo menor, desarrollaremos menos casos graves, y habrá menos hospitalizaciones y muertes. Puede haber más casos, pero en general serán más leves”, sostiene García Martínez de Artola.
¿Cuándo empezó en España?
Aunque hay ligeras diferencias entre comunidades, en Cataluña el cambio de tendencia se notó a finales de octubre. “Fue en la semana 43 [del 20 al 26 de ese mes], cuando el año pasado el primer cambio no se notó hasta la 45 y los casos empezaron a subir con fuerza en la 48. Ahora estamos en la semana 47 y ya van cuatro semanas de ascenso”, explica Esteve Fernández. El País Vasco también notó por esas fechas un incremento de las hospitalizaciones.
En el último informe disponible del Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda (SIVIRA), del Instituto de Salud Carlos III, con datos del conjunto de España hasta la semana del 10 al 16 de noviembre, todos los indicadores apuntan al alza. La estimación de la incidencia de gripe asciende a 82,9 casos por 100.000 habitantes (65,1 la semana anterior). La de positividad —porcentaje de pruebas a pacientes con síntomas compatibles que dan finalmente positivo— fue del 17,3% (14,5% la semana previa). Y las hospitalizaciones, aún en niveles bajos, se duplicaron de 1,2 a 2,4 casos por 100.000 habitantes.
¿Qué recomiendan las autoridades?
El mensaje es unánime: las personas que forman parte de los grupos de riesgo que todavía no lo hayan hecho, que corran a vacunarse. La mayoría de comunidades han tomado medidas para facilitarlo. La vacuna de la gripe está recomendada en todas las personas mayores de 60 años, embarazadas, niños a partir de seis meses y hasta cinco años (más en algunas comunidades), y pacientes de algunas enfermedades. También para los trabajadores sanitarios, un grupo en el que solo el 39,5% se vacunó el año pasado. Los primeros datos ofrecidos por las comunidades, aún provisionales, apuntan este año a una mejora de las coberturas en todos los grupos.
El incremento de contagios ha llevado, además, a Galicia y Aragón a plantear la recomendación y obligatoriedad, respectivamente, de llevar mascarillas en los centros sanitarios, incluso cuando no se tienen síntomas.
¿Cuándo se alcanzará el pico?
El pico de la gripe suele producirse habitualmente en España a finales de enero o principios de febrero. Todas las previsiones apuntan a que este año va a adelantarse y se alcanzará —la semana puede no ser la misma según la comunidad— en algún momento entre mediados de diciembre y principios de enero. Cataluña lo espera entre la segunda y la tercera semana de diciembre. Fuentes consultadas en otras comunidades, en cambio, temen que sea un poco más tarde, en plenas fiestas de Navidad, lo que podría dar un último impulso a las cifras de contagios.