Detenidas cinco personas por traficar con una menor de 14 años y obligarla a contraer matrimonio en Lleida
La víctima fue vendida por sus padres, residentes en Navarra, a cambio de 5.000 euros, cinco botellas de whisky y alimentos básicos
La Guardia Civil ha detenido en Navarra a los padres de una menor de 14 años por venderla a otra familia residente en Mollerussa (Lleida) para que contrajera matrimonio con su hijo. En la misma operación, también han arrestado a otros dos hombres, de 40 y 20 años, y una mujer de 42, como responsables de la compra y traslado de la menor en Mollerusa . A todos se les atribuye un delito de trata de seres humanos con fines de matrimonio forzado. La menor, que ya ha sido liberada, fue localizada mendigando en la localidad catalana de Les Borges Blanques (Lleida), según informa la Guardia Civil.
Los hechos se produjeron en enero en una pequeña localidad de la Ribera navarra. Los padres de la menor, un hombre y una mujer de 35 años, se reunieron con otra familia residente en Lleida y cerraron el trato ilícito por el que recibieron un pago de 5.000 euros, cinco botellas de whisky y algunos alimentos básicos. Tras el acuerdo, la menor, que pertenece a una comunidad romaní, fue trasladada a Cataluña. Allí permaneció bajo el control de la familia traficante con el propósito de consumar el matrimonio forzado. La chica, que no estaba escolarizada, también fue obligada a mendigar por las calles para aportar ingresos a la familia compradora.
La Guardia Civil explica que este caso se detectó en un pequeño pueblo a raíz de una conversación que acabó con una denuncia de los Servicios Sociales. De hecho, fueron los técnicos de servicios sociales los que denunciaron que había desaparecido la menor. En ese momento se abrió una investigación por el Equipo Mujer-Menor (EMUME) de la Guardia Civil de Navarra. Esta denuncia resultó esencial para identificar a los implicados y conocer el paradero de la menor. Por este motivo, piden a los ciudadanos que si tienen conocimiento de casos similares, acudan a denunciarlos.
El pasado 3 de octubre, los agentes emitieron un aviso a los Mossos d’Esquadra alertando que la menor desaparecida podría encontrarse en Lleida. Ese mismo tres de octubre, un vecino de Borges Blanques (Lleida) entraba a comprar en el supermercado de la cadena Plusfresc de su municipio. En la puerta del establecimiento topó con una niña mendigando. Tras realizar su compra entregó varios alimentos a la menor, pero se quedó cerca de la puerta esperando ver cuál era su reacción. La adolescente entró, de nuevo, en el establecimiento e intentó cambiar los alimentos por dinero. El vecino de Borges Blanques se enfadó ante esta reacción y llamó a los Mossos d’Esquadra. Una patrulla se personó en el lugar y, al comprobar que la menor iba indocumentada y que no sabía hablar ni español ni catalán, la trasladaron a la comisaría de Mollerussa. La niña entregó a los agentes un número de teléfono al que no hizo falta llamar porque, dos minutos después de que entrara la menor en comisaría, se personó en las dependencias policiales un matrimonio romaní que vive en un piso de Mollerussa desde hace años. Fuentes cercanas a la investigación aseguran que el matrimonio podría estar vigilando cómo practicaba la mendicidad la adolescente cuando vio que los Mossos se la llevaban de la puerta del supermercado.
En la comisaría, el matrimonio aseguró a los agentes que eran los tíos de la menor e intentaron llevarse rápidamente a la chica. La policía catalana no confió en la versión de los hechos y requirió al matrimonio algún tipo de documentación que validara su versión. La pareja aportó una fotocopia de la partida de nacimiento de la niña. Una vez introducida esta documentación en la base de datos, pronto se abrió la alerta de la Guardia Civil, enviada ese mismo día, que solicitaba la protección de la niña. Los Mossos detuvieron al matrimonio y comprobaron que en un perfil de Facebook aparecía la menor junto con uno de los hijos, de 21 años, de esta pareja de compradores. En las fotografías se comprobaba que estaban celebrando la boda del joven de 21 años con la menor de 14. Tanto el joven como el matrimonio comprador quedaron arrestados acusados de tráfico de seres humanos, mendicidad infantil y matrimonio forzado. La menor fue trasladada a un centro de protección de la Generalitat, donde recibe atención y apoyo especializado.
Los padres de la víctima han sido puestos a disposición del Juzgado de Guardia de Tudela. Mientras que los otros dos hombres y la mujer implicados en la compra y traslado de la menor han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Lleida. Los compradores y el joven con el que obligaron a casarse a la joven declararon en Lleida y Tudela y quedaron en libertad. La instrucción del caso sigue abierta y no se descarta que se amplíe la acusación a agresión sexual.
El alcalde de Mollerussa (Lleida), Marc Solsona, ha explicado que se ha enterado del caso a primera hora de este sábado y que en el Ayuntamiento no tenían conocimiento del mismo. Ha señalado que los servicios sociales del Ayuntamiento y los del Consell Comarcal del Pla d’Urgell (Lleida) han indagado este sábado sobre la familia que “compró” a la menor, sobre la que no hay rastro administrativo en los citados servicios.
“Este suceso —ha agregado— no emana de una situación conocida. No teníamos constancia de esa familia ni de la menor en los servicios sociales, por lo que estamos ante un caso accidental”. Solsona ha reiterado que este suceso es “un caso aislado” y que no se tiene constancia de que se hayan producido otros similares en la ciudad. El alcalde, además, ha lamentado que la Guardia Civil no informase previamente al Ayuntamiento sobre el caso, del que no tenían conocimiento hasta la mañana de este sábado. “Si lo hubieran iniciado los Mossos —ha continuado— lo hubiéramos sabido, porque cada tres meses nos reunimos en la comisión de seguimiento de delitos en la ciudad. Pero lo ha empezado a investigar la Guardia Civil y no teníamos conocimiento de nada”.
Solsona ha criticado esa falta de información, “sobre todo por si el Ayuntamiento debía colaborar con información del entorno de la familia o por si tenía constancia de más casos”, datos que “ha habido que recoger esta mañana a toda prisa, en media hora, por si había que hacer alguna actuación desde el consistorio”. “Quiero decir la verdad: expreso mi malestar por la conducta de comunicación en este caso”, ha concluido.
El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 53 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.