La Fiscalía se querella contra un cura de Madrid por abusar de dos menores

El caso fue comunicado por Juan Antonio Reig Pla, obispo de la diócesis de Alcalá de Henares, a la que pertenece el acusado

El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, en una foto de archivo.santi burgos

La Fiscalía de la Comunidad de Madrid ha presentado este jueves una querella contra el sacerdote M. C. Z. por haber abusado de dos menores de edad. De uno de ellos en 2011, y del otro entre 2016 y 2019. Cuando sucedieron los hechos, el cura estaba destinado en la parroquia de Santiago Apóstol de Torrejón de Ardoz, perteneciente al obispado de Alcalá de Henares. Las diligencias presentadas por la Fiscalía se abrieron después de que Juan Antonio Reig Pla, obispo de la diócesis complutense, comunicase a las autoridades que había recibido dos denuncias contra el acusado. El episcopado apartó al sa...

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La Fiscalía de la Comunidad de Madrid ha presentado este jueves una querella contra el sacerdote M. C. Z. por haber abusado de dos menores de edad. De uno de ellos en 2011, y del otro entre 2016 y 2019. Cuando sucedieron los hechos, el cura estaba destinado en la parroquia de Santiago Apóstol de Torrejón de Ardoz, perteneciente al obispado de Alcalá de Henares. Las diligencias presentadas por la Fiscalía se abrieron después de que Juan Antonio Reig Pla, obispo de la diócesis complutense, comunicase a las autoridades que había recibido dos denuncias contra el acusado. El episcopado apartó al sacerdote cuando recibió las denuncias y abrió una investigación canónica. Poco después, aunque no precisa una fecha concreta, trasladó el caso a las autoridades. En la actualidad, el acusado está residiendo en un domicilio particular, según ha informado un portavoz de la diócesis a EL PAÍS.

El pasado febrero, la Fiscalía General del Estado solicitó a los 17 fiscales superiores de toda España que le remitiesen todas las denuncias y querellas en tramitación sobre agresiones y abusos sexuales a menores en cualquier institución religiosa. El caso de la parroquia de Torrejón de Ardoz es uno de los ocho que comunicó Madrid.

“El sacerdote investigado realizó tocamientos a dos menores cuando ambos eran monaguillos en la parroquia”, cita la Fiscalía madrileña en una nota de prensa publicada este jueves. En el caso de 2011, el menor tenía 12 años y los abusos se prolongaron hasta que este dejó de ayudar en misa, pasó a formar parte del coro de la iglesia y dejó de pasar tiempo a solas con el acusado. Sobre el otro caso, la posible víctima sigue siendo menor de edad y los episodios son similares al primero: “Tocamientos por encima de la ropa”, afirman fuentes de la Fiscalía.

La Iglesia española se enfrenta a un escándalo general de pederastia en su seno. Después de que este diario entregase el pasado diciembre al Papa y a la Conferencia Episcopal Española un dosier con 251 casos inéditos, el tema saltó a la agenda política. El Congreso nombró al Defensor del Pueblo para que iniciase una investigación sobre el asunto y los obispos encargaron a un bufete de abogados una auditoría para conocer la magnitud de estos hechos.

Los 68 casos comunicados por los 17 fiscales superiores a la Fiscalía General del Estado tras su petición de información constituyen, más que una radiografía del problema en España, la fotografía de un instante, la de los casos abiertos en 2022. No representa la totalidad de estos delitos, ya que no incluye las sentencias condenatorias del pasado y que una parte de ellos no llega a la justicia penal, sino que se instruyen en procesos eclesiásticos. Por otro lado, la gran mayoría de estos delitos no han visto la luz, bien porque las víctimas nunca lo han contado o la Iglesia los ha silenciado.

Ante la falta de datos oficiales, EL PAÍS dispone de una base de datos que registra todos los casos publicados en los medios de comunicación, los reconocidos por la Iglesia y los resultantes de sentencias judiciales. En este momento contabiliza 637 casos —cada caso representa un acusado— y 1.307 víctimas.

Si conoce algún caso que no ha sido denunciado, puede hacérnoslo llegar a través de la dirección de correo abusos@elpais.es


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