Portugal pide al 70% de la población que se confine en casa

El Gobierno apela al “deber cívico” para cumplir la medida, sin sanciones, y prevé que los ciudadanos solo salgan para actividades esenciales

Una mujer habla con el conductor de un tranvía este sábado en Lisboa.RAFAEL MARCHANTE (Reuters)

El 70% de la población de Portugal, es decir, cerca de siete de sus 10 millones de habitantes, se encuentra desde este miércoles en confinamiento con el “deber cívico” de permanencia domiciliaria para controlar la expansión de la covid. La medida afecta a 121 de las 308 comarcas, entre las que se encuentran las ciudades de Lisboa y Oporto. En todos estos territorios, las personas solo deberán salir de casa para actividades esenciales como trabajar, estudiar...

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El 70% de la población de Portugal, es decir, cerca de siete de sus 10 millones de habitantes, se encuentra desde este miércoles en confinamiento con el “deber cívico” de permanencia domiciliaria para controlar la expansión de la covid. La medida afecta a 121 de las 308 comarcas, entre las que se encuentran las ciudades de Lisboa y Oporto. En todos estos territorios, las personas solo deberán salir de casa para actividades esenciales como trabajar, estudiar, hacer compras o ayudar a personas dependientes, aunque no se contempla un régimen sancionador. En la medida de lo posible, el teletrabajo será obligatorio.

La diferencia con la situación de hace seis meses es que esta vez las escuelas, tiendas y restaurantes permanecerán abiertos ―hasta las 22.00 el comercio y media hora más la hostelería― e incluso se permitirán espectáculos culturales que cumplan con las normas sanitarias. La medida estará en vigor durante al menos dos semanas.

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El primer ministro portugués, António Costa, defendió el lunes la declaración del estado de emergencia sanitaria, que será aprobada por el Parlamento en los próximos días “para resolver las dudas jurídicas” que podrían generar las medidas restrictivas que se están imponiendo. El Ejecutivo quiere asegurarse de que, desde un punto de vista legal, puede limitar la libertad de circulación de personas, con medidas como un toque de queda durante el fin de semana. Este estado de emergencia sería menos severo que el vivido en primavera, con el objetivo de dar un soporte jurídico a las decisiones del Gobierno.

Como otros países europeos, Portugal está viviendo un recrudecimiento de la pandemia, que supera la primera ola en número de contagios diarios y de personas hospitalizadas. Desde que comenzó la crisis, Portugal ha registrado 149.443 casos de covid y 2.635 fallecidos. La presión hospitalaria crece cada día, y este martes había 2.349 hospitalizados por coronavirus con 320 positivos en cuidados intensivos.

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