Médicos y expertos piden a los madrileños que mantengan las restricciones
“Independientemente de lo que diga un juez, lo que sí sabemos seguro es cómo se transmite el virus y la manera de evitarlo”, dice Santiago Moreno, jefe de Enfermedades Infecciosas del hospital Ramón y Cajal
Frente al embrollo judicial y el enfrentamiento político, responsabilidad de los ciudadanos y evidencia científica. Este era el sentir mayoritario este jueves entre los médicos y expertos consultados poco después de conocerse que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dejaba sin efecto, en vísperas de un puente, las restricciones impuestas en la comunidad para frenar la propagación del coronavirus.
“Yo reco...
Frente al embrollo judicial y el enfrentamiento político, responsabilidad de los ciudadanos y evidencia científica. Este era el sentir mayoritario este jueves entre los médicos y expertos consultados poco después de conocerse que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dejaba sin efecto, en vísperas de un puente, las restricciones impuestas en la comunidad para frenar la propagación del coronavirus.
“Yo recomiendo a la población que siga las restricciones que estaban vigentes. Es más, que las acentúen dentro de lo posible porque considero que ya eran tímidas ante la gravedad de la situación. Por el bien de todos, lo mejor es restringir los contactos sociales y evitar todo desplazamiento que no sea imprescindible”, afirma Ildefonso Hernández, portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas).
“Independientemente de lo que diga un juez, lo que sí sabemos seguro es cómo se transmite el virus y la manera de evitarlo”, añade Santiago Moreno, jefe de Enfermedades Infecciosas del hospital Ramón y Cajal. Este especialista propone un ejercicio: “Estos días, hagamos como si todos estuviéramos infectados y tuviéramos que adoptar medidas para no contagiar a nadie. Si logramos ese punto de civismo, si hacemos lo imposible para no incurrir en ninguna práctica que suponga un riesgo, lograremos evitar contagios y frenar el virus”.
Hartazgo
Los expertos consultados coinciden en calificar de “muy delicada” la situación de la Comunidad de Madrid, con una incidencia que sigue por encima de los 500 casos por 100.000 habitantes a 14 días y tiene el 21% de las camas hospitalarias y el 40% de las plazas de la UCI ocupados por pacientes infectados por el virus. La positividad —el porcentaje de pruebas diagnósticas que detectan el virus en el paciente— es del 18,5%, según los datos ofrecidos este jueves por el Ministerio de Sanidad.
El miedo de los especialistas es que este nuevo bandazo haga crecer el hartazgo de la población ante la pandemia y fomente el desapego hacia las medidas de prevención. “Ese es un riesgo”, opina Natalia Rodríguez, médica en el Clínic de Barcelona e investigadora en el instituto ISGlobal. “Otro es que parte de la población interprete que el levantamiento de las restricciones se debe a que la situación no es tan preocupante. Y eso no es ni mucho menos así”, defiende.
La investigadora recordó que “con números siete veces menores, se confinó Lleida y se logró parar un brote complicado”. “El riesgo en Madrid persiste. Con las cifras que tiene, las medidas deberían ser en realidad mucho más restrictivas. Yo sería muy prudente y evitaría el ocio con otros, visitar a personas vulnerables...”, añade Rodríguez.
Para Pere Godoy, presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, hace semanas que Madrid cruzó la línea a partir de la cual algún tipo de restricción es imprescindible: “La evidencia nos dice que la estrategia básica ante una epidemia es la detección precoz de los casos, el estudio de contactos y el aislamiento. Pero cuando la incidencia alcanza niveles tan elevados, esto ya no es suficiente”.
Godoy hace un llamamiento a “la ciudadanía a implicarse con las medidas de prevención, porque es un problema que afecta a toda la comunidad y como tal necesita la contribución de todos para ponerle freno”. “En los próximos días es importante recordar que la mascarilla puede ser de mucha ayuda, pero que esto no sustituye la distancia ni la reducción de contacto social. Hay que tener paciencia, reducir cenas, actos sociales... Esto es algo que podemos hacer todos”, concluye.
Ildefonso Hernández sostiene que “bajar la incidencia es importante porque es la vía de reducir la presión asistencial en hospitales y centros de salud”. “No es algo gratuito. La presión sobre el sistema impide hacer otras actividades sanitarias que son imprescindibles. Vamos a tener una tercera ola causada por los efectos secundarios de la falta de asistencia sanitaria a otras patologías. Y esto solo se resuelve bajando a mínimos la incidencia y la presión”, reiteró el portavoz de Sespas.
Entre la preocupación, los expertos albergan una esperanza: “Mucha gente ya está siguiendo las medidas de prevención. Esto es lo que explica que la incidencia en Madrid empezara a bajar antes de que fueran impuestas las restricciones. Es una buena señal”, valora Hernández.
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