Canarias y Baleares piden al Gobierno cerrar sus conexiones mientras dure el estado de alarma
La medida golpearía con dureza el turismo. Los hoteleros han pedido un cierre “ordenado y escalonado”
El presidente de Canarias, Ángel Victor Torres, le pedirá este lunes al presidente Pedro Sánchez el cierre de las islas por mar y por aire para tratar de frenar los contagios por coronavirus. Durante la aplicación de estas medidas extraordinarias solo podrían volar hasta las islas los aviones que vayan a repatriar a los miles de turistas que hay ahora mismo en Canarias, que está en temporada alta, o que traigan locales que necesiten volver a casa. Los hoteles, poco a poco, han...
El presidente de Canarias, Ángel Victor Torres, le pedirá este lunes al presidente Pedro Sánchez el cierre de las islas por mar y por aire para tratar de frenar los contagios por coronavirus. Durante la aplicación de estas medidas extraordinarias solo podrían volar hasta las islas los aviones que vayan a repatriar a los miles de turistas que hay ahora mismo en Canarias, que está en temporada alta, o que traigan locales que necesiten volver a casa. Los hoteles, poco a poco, han ido vaciándose en esta última semana. “Hay muchas posibilidades de que el Gobierno acepte esta petición”, cuenta a EL PAÍS una fuente del Gobierno canario. La presidenta Francina Armengol ha pedido lo mismo para Baleares, donde se contabilizan 73 casos y un fallecido.
Canarias fue el primer lugar donde se detectó un caso por Covid-19 en España. Ocurrió en la isla de la Gomera. Se trataba de un turista alemán, que fue aislado por las autoridades locales después de que el Gobierno alemán alertara de que acababa de llegar a las islas, desde su país, un hombre que había estado en contacto con un contagiado. Ese caso quedó controlado aislando al grupo de gente que viajaba con el turista alemán, que fueron sometidos a pruebas. Ninguno de ellos dio positivo. La crisis parecía haber sido atajada, pero tres semanas después, en un hotel del sur de Tenerife, un médico italiano volvió a dar positivo. El hombre sintió los síntomas y se presentó por su propio pie en un hospital. El Gobierno aisló por completo al hotel, un resort gigantesco con más de mil personas dentro en el municipio de Adeje. El contagio del médico se extendió a su pareja y otros cuatro amigos que habían convivido con él. Nadie más se contagió en el hotel. La emergencia parecía, de nuevo, controlada.
Sin embargo, la semana pasada los casos de infección se fueron multiplicando. En apenas unos días, se pasaron de 20 a 119 el número de infectados. Ashotel, la patronal de hoteleros, ha asistido alarmada a este aumento. El cierre de las comunicaciones de la isla es una medida extraordinaria que paralizaría la economía local: el turismo es el 35% del PIB de Canarias. El presidente Torres acordará este lunes con sus socios todos los detalles sobre el posible confinamiento de las islas en un Consejo de Gobierno extraordinario, que a este paso va a dejar de ser extraordinario: se celebra cada día.
El Gobierno dispondrá, si Madrid acepta la propuesta, una cantidad mínima de vuelos para casos de emergencia. Los cargueros con mercancías también podrán atracar en las islas, que apenas tienen producción propia e importa la mayoría de sus productos de consumo. Con esta excepción quedaría garantizado el suministro de 2,1 millones de personas.
El domingo, los hoteleros españoles abogaban por “un cierre ordenado y escalonado” de los recintos turísticos, hasta que se vacíen por completo. “Ya hay muchos hoteles que no tienen clientes”, dijo Jorge Marichal, el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT).
En la misma línea, la presidenta del Gobierno de Baleares, Francina Armengol, ha pedido al Gobierno central que apruebe una “restricción casi absoluta” de los aeropuertos para permitir solo los vuelos de repatriación de turistas a sus países de origen y el transporte de locales que por determinados motivos se encuentran fuera del archipiélago. Las agrupaciones hoteleras de las diferentes islas anunciaron en la noche del domingo que se ha comenzado a organizar la salida ordenada de los clientes hacia sus países de origen para cerrar de forma paulatina los establecimientos que queden abiertos en las cuatro islas. La Federación Hotelera de Mallorca y la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Baleares consideran que habría sido “más efectivo” que el cierre obligado de hoteles se hubiera incluido en el Real decreto de declaración del estado de alarma. Este lunes han salido 25 vuelos de repatriación de las islas con destino a Reino Unido y Alemania principalmente. Además, los aeropuertos de las islas han registrado 67 cancelaciones.
“Daremos a los turistas todas las facilidades para que puedan salir” ha señalado Armengol, que ha insistido en que si continúa entrando gente de fuera “será más difícil de controlar la expansión del coronavirus”. Baleares fue la segunda comunidad, después de Canarias, que registró un caso en España.
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