Las UCI se preparan para el peor escenario

“Preparaos”. Una carta que varios médicos italianos escribieron hace unos días a la Sociedad Europea de Medicina de Cuidados Intensivos ha puesto en guardia a los expertos de todos los países europeos. “Hemos visto que un alto porcentaje de casos ha necesitado una unidad de cuidados intensivos, en el rango del 10% de todos los pacientes positivos. Queremos trasladar un mensaje contundente: Preparaos”, dice la carta, según ...

“Preparaos”. Una carta que varios médicos italianos escribieron hace unos días a la Sociedad Europea de Medicina de Cuidados Intensivos ha puesto en guardia a los expertos de todos los países europeos. “Hemos visto que un alto porcentaje de casos ha necesitado una unidad de cuidados intensivos, en el rango del 10% de todos los pacientes positivos. Queremos trasladar un mensaje contundente: Preparaos”, dice la carta, según publicó el diario inglés The Independent.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que ocho de cada diez pacientes de coronavirus apenas sufren síntomas menores y no necesitan tratamiento médico, otro 15% pasan por el hospital y la situación de otro 5% requiere que ingresen en una unidad de cuidados intensivos (UCI), donde se trata a los pacientes más vulnerables. La sanidad española cuenta con 348 de estas unidades y un total de 4.400 camas, según la última estadística del Ministerio de Sanidad, con datos de 2017. La gran preocupación entre los expertos es que las UCI se colapsen por la llegada de muchos pacientes en situación crítica que necesiten respiración asistida.

Este martes permanecían en estas unidades un centenar de personas, una tasa ligeramente superior a la correspondiente al número de infectados en España, 1.600. Madrid, la comunidad con más casos (782), dio instrucciones el lunes para cancelar cirugías programadas y liberar así la mayor cantidad posible de camas.

Mientras tanto, los médicos intensivistas están elaborando un plan de contingencia que aborda todos los escenarios posibles: desde el actual hasta uno, el más extremo, en el que las UCI se desborden y sea necesario habilitar camas en otras zonas del hospital.

“En una primera fase, si las camas de la UCI no son suficientes los intensivistas utilizarían camas de las unidades de reanimación. La cirugía programada se puede suspender o retrasar”, explica Pedro Rascado, coordinador del plan de contingencia frente al Covid-19 y miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Medicina Intensiva Crítica y Unidades Coronarias (Semicyuc). No sirve cualquier cama para atender a pacientes críticos a los que les fallan los pulmones, como ocurre con el coronavirus. Tienen que estar equipadas con monitorización y con respiradores, y eso sucede con las plazas de reanimación en las que despiertan los pacientes que se han sometido a una cirugía.

El plan, que preparan los jefes de servicio de más de un centenar de UCI españolas mediante reuniones periódicas por videoconferencia, contempla asimismo que estas unidades tampoco sean suficientes, para lo que será necesario comprar más equipamiento. “Me consta que las administraciones también están preparando necesidades de equipación”, asegura Rascado.

En La Rioja, comunidad considerada zona de riesgo desde este martes, con 155 infectados, aún no tienen ocupada ninguna de las 22 camas de UCI disponibles en dos centros. “La REA (unidades de reanimación) siempre puede ser utilizada para pacientes críticos y se contará con ella en caso de saturación de la UCI”, asegura un portavoz de la Consejería de Sanidad. Asturias, con 28 enfermos, dispone de 82 camas de UCI públicas, solo dos de ellas ocupadas. “Por supuesto que si es necesario se reconvertirán las de reanimación y posquirúrgicas, y en un siguiente escenario se valoraría reconvertir áreas de Urgencias con monitorización para el manejo de pacientes graves”, resumen fuentes de la Consejería de Sanidad del Principado. Además, se ha contratado a nueve especialistas y personal de enfermería. “Se está valorando la adquisición de pulsioxímetros desechables, respiradores y filtros, aunque, prosiguen, “estamos encontrando dificultades para conseguir el material”. Madrid anunció que ha reforzado el personal con 1.142 contrataciones. La mayoría (707) corresponden a la prolongación de los contratos del plan de invierno para la gripe. Otras 435 son específicas para el coronavirus.

“En el plan hacemos una previsión de todas las opciones para estar preparados para todo, para saber qué hacer si llega el momento, pero no porque pensemos que se pueda llegar a ese punto en todos los hospitales”, tranquiliza Rascado, que recuerda que es habitual diseñar este tipo de protocolos también para la gripe estacional. Todos los años es necesario suspender actividad quirúrgica por culpa de la gripe, añade. “También los pilotos entrenan para cualquier situación de emergencia que casi nunca ocurre, pero han de estar preparados. Es muy parecido”, concluye.

Una de las particularidades de las UCI es la ratio de personal que emplean. Aunque depende del tipo de hospital y de la gravedad de los pacientes ingresados, en general la recomendación internacional es de una enfermera por entre uno y tres pacientes. Por ello, si fuera necesario habilitar camas fuera de las UCI, también sería necesario contratar más enfermeras. Rascado explica que, aunque el manejo de los pacientes con coronavirus se parece al de la gripe, el personal adopta “medidas de protección un poco más estrictas”. “Es una enfermedad que acabamos de conocer”, añade. El personal usa lo que se conoce como medidas de aislamiento para transmisión por vía aérea, con mascarillas más eficientes y bata.

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