Antisemitismo contra ‘antipalestinismo’

Tan pronto alguien duda de la palabra del Gobierno de Israel afloran con cierta ligereza las acusaciones de antisemitismo. Y me parece que no siempre es cierto. Se ha condenado hasta la saciedad la horrible masacre perpetrada por Hamás el pasado 7 de octubre, pero hay quien todavía arrastra los pies para criticar con igual fuerza la violencia desproporcionada que, como respuesta, viene desplegando el sionismo imperante sobre la población ci...

Tan pronto alguien duda de la palabra del Gobierno de Israel afloran con cierta ligereza las acusaciones de antisemitismo. Y me parece que no siempre es cierto. Se ha condenado hasta la saciedad la horrible masacre perpetrada por Hamás el pasado 7 de octubre, pero hay quien todavía arrastra los pies para criticar con igual fuerza la violencia desproporcionada que, como respuesta, viene desplegando el sionismo imperante sobre la población civil de Gaza. Decía el otro día un analista español que a Israel, como si de un niño mimado se tratara, se le ha permitido hacer todo lo que ha querido desde 1947, aunque cometiera salvajadas que atentan contra el derecho internacional y humanitario. En cambio, a estas alturas del conflicto, todavía hay quien confunde a la organización terrorista Hamás con Palestina, como si aquí confundiéramos a ETA con Euskadi. Una curiosa metonimia que favorece el antipalestinismo más cerval y que los medios rigurosos deberían evitar.

Gonzalo de Miguel Renedo. Logroño

Una profesora saturada

Estoy saturada. Acaba de comenzar el curso y hay mañanas en las que ya no puedo más. Amo mi trabajo, enseñar me llena. Pero es indignante la cantidad de labor burocrática que me ahoga y limita la creatividad del profesorado. En la sala de profesores hay dos personas que miran el móvil y ríen a carcajadas, yo apenas parpadeo frente al ordenador. Me quema la cara cada vez que resuena en mi cabeza eso de que los docentes trabajamos poco. Siempre hay holgazanes que hacen ruido y muchos trabajadores que callan. Amo mi trabajo. Ojalá nos cuidaran un poquito más.

Claudia Escudero. Las Palmas de Gran Canaria

Un futuro para todos

La escalada de violencia entre Israel y Hamás nos recuerda la urgente necesidad de la paz en Oriente Próximo. La solución no puede ser militar. La comunidad internacional debe impulsar el diálogo y la diplomacia para alcanzar una solución justa que respete las aspiraciones de Israel y Palestina. A pesar de los desafíos, la historia nos muestra que la paz es posible cuando prevalece la voluntad de comprender y coexistir. En estos momentos críticos, hay que llamar a todas las partes a que den un paso hacia la paz, porque solo así podremos sanar heridas profundas y construir un mejor futuro para todos.

Daniel Rodríguez Martín. Barcelona

De la necesidad, virtud

Hay quien afirma que esta amnistía posible se llama necesidad. Y no va desencaminado, porque las decisiones y las leyes difíciles o arriesgadas se toman y aprueban casi siempre por necesidad. Si no, nunca me habría metido yo en una hipoteca, por ejemplo. Otros dicen que es como cuando vas al banco a pedir un crédito, pero no cuentan que el banco nos vende su dinero también por necesidad, pues vive de ello. Comprarles ese dinero significa tener una casa más confortable. Si esta amnistía, que aún está cocinándose, garantiza una vida mejor para todos en una España mejor, entonces es necesaria para el bien general. Es, por tanto, una oportunidad que debemos saber aprovechar en beneficio de todos. Así, claro que merece la pena. Y, si no, es preferible empezar de nuevo.

Luis de Luxán Meléndez. Porrúa-Llanes (Asturias)