Rabia por la guerra en Ucrania

Los lectores opinan sobre la guerra en el este de Europa, los impuestos verdes y las primeras entregas del podcast diario ‘Hoy en EL PAÍS’

Militares ucranios ayudan a una mujer con un perro pequeño a cruzar el río Irpin por un camino improvisado bajo un puente destruido por un ataque aéreo ruso.VADIM GHIRDA (AP)

Me gustaría ser capaz de interpretar qué significa la palabra guerra. En cualquiera de sus posibilidades. Pero tengo que admitir mi ignorancia en el momento de intentar hacerlo. Quizá porque entre acontecimiento y acontecimiento me he ido familiarizando con todo tipo de barbarie. Hasta el punto de que la sensibilidad me dura un instante. Justo lo que tarda en llegarme otra barbaridad. Sea la que sea. O como sea. Incluso me atrevería a decir que agradezco cie...

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Me gustaría ser capaz de interpretar qué significa la palabra guerra. En cualquiera de sus posibilidades. Pero tengo que admitir mi ignorancia en el momento de intentar hacerlo. Quizá porque entre acontecimiento y acontecimiento me he ido familiarizando con todo tipo de barbarie. Hasta el punto de que la sensibilidad me dura un instante. Justo lo que tarda en llegarme otra barbaridad. Sea la que sea. O como sea. Incluso me atrevería a decir que agradezco ciertos acontecimientos. Pues es precisamente gracias a ellos que consigo, desde la comodidad de la distancia, reafirmar mi solidaridad con esos lugares y gentes que sufren. Y esto es algo con lo que yo no consigo llevarme bien. Algo que tal vez se deba a que las crueles imágenes que me llegan ya no provocan en mí el espanto que, se supone, deberían provocar. ¿Será acaso cuestión de esta rabia mía que está a crecer de una manera galopante? ¿O será ya cuestión de una rabia que se está a expandir de un modo generalizado?

Manuel I. Nanín. O Carballiño (Ourense)

Dos gotas luchando por alcanzar las flores

Ambas se deslizaban por la superficie suave y fría y veían a lo lejos la línea de meta en esa superficie negra en la que se esconden y desaparecen de la vista, de la vida. Hoy, con la guerra a 3.485 kilómetros de mí, he vuelto a hacer carreras con las gotas de agua en el cristal. Y pensaba cómo siempre competimos y luchamos por ganar, mientras no entendemos que la guerra es una derrota para la humanidad. La gota corría cada vez más rápido, corría el amor y corría la guerra, al final el peso del odio ganó. Pero la gota del amor gana al derramarse en todas esas lágrimas de compasión al leer las noticias. Al deslizarse sobre los rostros apreciando en ese líquido transparente el reflejo de la humanidad. Algún día las gotas ya no competirán, solo se dejarán llevar como las flores que nacen tras el arma letal.

María Alloza Tejero. Zaragoza

Los impuestos verdes

Un comité de expertos elegidos por el Gobierno de España ha enviado a Hacienda un informe en el que se basará la reforma fiscal que el Gobierno tiene comprometida con la Comisión Europea. Entre las propuestas para aumentar los impuestos verdes, aquellos relacionados con el medio ambiente, está suprimir el impuesto de matriculación de los vehículos e implantar uno de circulación que penalice la contaminación. Si bien la intención de favorecer la renovación de vehículos parece buena, las consecuencias serán regresivas y discriminatorias. La reforma favorecerá a las personas con mayor poder adquisitivo y penalizará a quienes tienen salarios más bajos y no tienen dinero para comprar un coche nuevo.

Jesús C. Echeverría Morrás. Pamplona

‘Hoy en EL PAÍS’

Gracias. Muy alto han puesto el listón con las primeras entregas de Hoy en EL PAÍS. Al final, la directora tiene razón y es posible la hibridación de la palabra escrita y la hablada en un medio tradicionalmente impreso. Además de disponer de estupendos profesionales, la pausa con la que está elaborado permite el análisis riguroso. Gracias a las periodistas responsables y a la directora que apostó por el formato.

Pedro Mota Gómez. Valladolid


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