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“Raúl Richie”, el primer diputado migrante de la Ciudad de México

El candidato del PAN, Raúl de Jesús Torres Guerrero, obtiene el triunfo con el 54,8% de los 8.906 votos que enviaron los capitalinos residentes en el extranjero

Karina Suárez
El candidato del PAN Raúl de Jesús Torres Guerrero, primer diputado migrante de la Ciudad de México.
El candidato del PAN Raúl de Jesús Torres Guerrero, primer diputado migrante de la Ciudad de México.RR.SS.

En los últimos 15 años Raúl de Jesús Torres Guerrero, conocido como Raúl Richie, no ha dejado de viajar entre la Ciudad de México, Boston, Washington y Nueva York. De madre mexicana y padre peruano, el diputado migrante electo por el PAN asegura que conoce la migración “desde la cuna” y que su historia y su preparación en distintas universidades de Estados Unidos y Europa le permitirán crear la red de apoyo para brindar asesoría legal e incluso protección a las mexicanas que sufren violencia de género en el extranjero.

El joven, de 31 años, se convertirá en septiembre en el primer diputado migrante de la capital de la Ciudad de México. Para la primera candidatura migrante de la capital del país se recibieron un total de 8.906 votos, de los que el candidato del PAN obtuvo el 54,8% y se alzó con la victoria dejando en segundo lugar a la aspirante de Morena, Verónica Puente Vera, quien logró solo el 22% y en tercer lugar se situó la candidata del PRI, Andrea Kat, con un 9%, según los datos del Instituto Electoral de Ciudad de México.

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El licenciado en Relaciones Internacionales por Endicott College en Boston con posgrado en Gerencia Pública en Washington, debe su mote Raúl Richie precisamente a que sus compañeros de aula no podían pronunciar su apellido. “Me habían dicho que yo tenía una cara de niño, el famoso baby face y de ahí salió que en vez de decirme Raúl que era complicado de decirlo me empezaron a decir Richie”, cuenta. Pese a que su apodo alude a la inexperiencia, el ahora candidato electo asegura que tiene la formación necesaria para encarar su primer cargo público y llevar al Congreso capitalino las necesidades de los migrantes y de sus familias.

“Mi papá es peruano y llegó siendo migrante a la Ciudad de México, cuando yo tenía cinco años, en el 94, con la crisis económica tan fuerte mi papá decidió emigrar como mucha gente en ese entonces y cruzó a Los Ángeles. Yo me tardo 15 años en volver a reunirme con mi papá, entonces conozco lo que es estar con una familia dividida, pero también reconozco que ese gran esfuerzo de mis padres hizo que yo pudiera llegar a estudiar Relaciones Internacionales en Boston, luego me fui a estudiar Relaciones Internacionales en Europa”, relata.

Luego de participar en varios congresos binacionales y colaborar con políticos del PAN en temas de legislación migratoria, Torres Guerrero es invitado por el partido político conservador para contender por la recién creada diputación migrante. Limitados por las restricciones que impedían hacer campaña política en el extranjero, Torres Guerrero y los otros 10 aspirantes se vieron obligados a realizar una campaña para residentes extranjeros desde el centro del país. En su caso, el aspirante panista se acercó a las familias de migrantes y a los migrantes en retorno, principalmente a los dreamers para contarles sobre sus propuestas.

Ahora que se ha confirmado su triunfo en las urnas, Torres Guerrero adelanta que durante los primeros 100 días como diputado migrante se centrará en sentar las bases legales de esta nueva figura política, en la creación de una comisión de asuntos migrantes en el Congreso local y en la articulación de una red de representantes de migrantes en las principales ciudades de Estados Unidos. “Conozco la migración desde adentro, he empezado cargando muebles en pleno Times Square a las cuatro de la mañana y sé lo que significa el trabajo duro” dice.

Tras conocer los resultados de la primera diputación migrante capitalina, Avelino Meza, secretario de la organización Fuerza Migrante en Estados Unidos, afirma que la comunidad migrante que él representa está satisfecha con el proceso y nivel de participación alcanzado en estas elecciones intermedias. “Uno de los objetivos básicos de esta agenda del diputado migrante va a ser que sea un promotor, un impulsor para que esta figura se replique en otros Estados del país”, dice. En estos comicios la lista nominal de mexicanos en el extranjero cerró con 32.305 electores de 89 países, según las cifras del Instituto Nacional Electoral (INE).

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Sobre la firma

Karina Suárez
Es corresponsal de EL PAÍS en América, principalmente en temas de economía y sociedad. Antes trabajó en Grupo Reforma. Es licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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