Los republicanos del Senado eligen como líder a un candidato distinto del que quería Trump

John Thune, que sustituye con aire de continuidad a Mitch McConnell, no se ha plegado públicamente a los deseos del presidente electo de aprobar sus nombramientos sin votarlos en la Cámara alta

John Thune, este miércoles en los pasillos del Capitolio de Washington.Leah Millis (REUTERS)

El Partido Republicano en el Senado estadounidense eligió este miércoles en una votación secreta a John Thune como su nuevo líder. Thune sustituirá al frente de la formación, que en las elecciones del 5 de noviembre obtuvo una mayoría cómoda de 53 escaños frente a 47 de los demócratas, a Mitch McConnell, su jefe desde 2006, un hombre cuyo estilo ha marcado la política de Washington en las últimas décadas. Con ...

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El Partido Republicano en el Senado estadounidense eligió este miércoles en una votación secreta a John Thune como su nuevo líder. Thune sustituirá al frente de la formación, que en las elecciones del 5 de noviembre obtuvo una mayoría cómoda de 53 escaños frente a 47 de los demócratas, a Mitch McConnell, su jefe desde 2006, un hombre cuyo estilo ha marcado la política de Washington en las últimas décadas. Con la elección del senador de Dakota del Sur, que era el segundo de McConnell, el partido envía un mensaje a Donald Trump: la lealtad absoluta que el presidente esperaba de la Cámara Alta no está garantizada.

El entorno del presidente electo, con Elon Musk a la cabeza, había apostado por otro candidato, Rick Scott, senador por Florida y político afín al movimiento MAGA (Make America Great Again). Trump no se había decantado por ninguna de las tres opciones (la pugna la completaba John Cornyn, de Texas), pero sí había dejado claro el fin de semana en las redes sociales lo que esperaba del nuevo líder parlamentario: que estuviera dispuesto a permitir la votación “en receso” de los nombramientos de su Gabinete en plena formación. El nuevo inquilino de la Casa Blanca tiene prisa por empezar su trabajo de desmantelamiento de las políticas de la Administración de Biden y le sobra el trámite de la aprobación en el Senado de sus fichajes, una tradición que respetó en su primera presidencia, pero que se saltaron predecesores como Ronald Reagan, Bill Clinton y George W. Bush. Sin ese atajo, el proceso de esos nombramientos puede alargarse meses o años. “¡Necesitamos que los puestos se cubran INMEDIATAMENTE!”, escribió Trump en Truth, su red social, con su habitual uso enfático de las mayúsculas.

El senador Rick Scott llega este miércoles a la votación del líder de de la mayoría republicana. SHAWN THEW (EFE)

Scott, que había anunciado que no tendría problema con cumplir con los deseos del jefe, cayó en la primera votación. En la segunda y definitiva, Cornyn obtuvo 24 apoyos, por los 29 que cosechó Thune, que ha evitado confirmar públicamente si piensa o no plegarse a las prisas del nuevo presidente. Trump lo necesita también para sacar adelante los puntos más polémicos de un programa de gobierno que incluye una deportación masiva de millones de personas, un adelgazamiento drástico de la estructura de las agencias y decisiones de efectos potencialmente desastrosos en materia climática.

La ayuda a Ucrania, clave

Thune representa una cierta continuidad con el legado de McConnell, que se convirtió en enemigo de Trump, cuando le afeó al presidente su papel de instigador del asalto al Capitolio en los días que siguieron a la insurrección del 6 de enero de 2021. Después, McConnell decidió votar en contra del impeachment (juicio político) al que fue sometido Trump por su implicación en aquellos hechos. El nuevo líder de la mayoría se ha enfrentado a Trump en el pasado, pero también se ha acercado estratégicamente en los últimos meses al presidente electo. En la reunión a puerta cerrada en la que resultó elegido en un Capitolio que este miércoles vivió una actividad frenética tras semanas de descanso por las elecciones, Thune prometió a los senadores que trabajaría estrechamente con la nueva Administración, incluso en asuntos en los que difiere con Trump, como la ayuda a Ucrania en su defensa de la agresión rusa.

El nuevo líder de la mayoría tiene además la misión de sacar adelante radicales recortes de impuestos, nombrar jueces conservadores y funcionarios de la Administración de Trump. Los votos republicanos también servirán para aprobar los presupuestos, la ayuda exterior y el siempre conflictivo techo de la deuda.

La alargada sombra de Trump fue algo más que un lugar común este miércoles en el Capitolio. Antes de reunirse en la Casa Blanca con su predecesor (y sucesor), Joe Biden, para tratar asuntos de la transferencia de poder entre ambos, el presidente electo se vio en el edificio cuyos seguidores atacaron en 2021 con los miembros de su partido en la Cámara de Representantes, a los que dirigió unas palabras de agradecimiento. Los republicanos acarician la mayoría en la Cámara baja también, pero aún están, ocho días después del cierre de las urnas, esperando a que termine el escrutinio en California. Este miércoles se hallaban a dos escaños de consolidar una mayoría que obtuvieron en las elecciones legislativas de 2022.

La elección de Thune es también un golpe a la autoridad creciente de Elon Musk en Washington. El empresario, convertido en las últimas semanas en el hombre con mayor influencia sobre Trump, que lo nombró el martes codirector de algo llamado Departamento de Eficacia Gubernamental, dejó clara su preferencia este domingo en X, la red social de la que es propietario: “¡Rick Scott, para líder de la mayoría del Senado!”, tuiteó. El multimillonario montó una encuesta entre sus seguidores en la que Scott se impuso. Además, lanzó un mensaje fulminante contra el rival más destacado por el puesto: “El senador Thune es la principal opción de los demócratas”. Pero por esta vez, el hombre más rico del mundo no se salió con la suya.

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