La UE estudia levantar sanciones a Siria a cambio de mayor seguridad y el respeto a la mujer y las minorías
La jefa de la diplomacia europea se reúne en Riad con ministros de Exteriores de varios países para hablar del futuro sirio tras el derrocamiento de El Asad
La Unión Europea estudia levantar, gradualmente y de forma temporal, algunas de las sanciones impuestas a Siria a cambio de que el nuevo liderazgo de Hayat Tahrir al Sham (HTS), designado como una organización terrorista por la ONU y Estados Unidos, emprenda una transición que garantice la protección de las minorías, los derechos de las mujeres y cuestiones de seguridad y defensa. Los ministros de Exteriores de los 27 Estados miembros de la UE ...
La Unión Europea estudia levantar, gradualmente y de forma temporal, algunas de las sanciones impuestas a Siria a cambio de que el nuevo liderazgo de Hayat Tahrir al Sham (HTS), designado como una organización terrorista por la ONU y Estados Unidos, emprenda una transición que garantice la protección de las minorías, los derechos de las mujeres y cuestiones de seguridad y defensa. Los ministros de Exteriores de los 27 Estados miembros de la UE analizarán ese alivio de las restricciones en una reunión en Bruselas el próximo 27 de enero. Mientras, la alta representante para Política Exterior y Seguridad de la UE, Kaja Kallas, ha debatido este domingo junto a otros representantes diplomáticos internacionales y de la región el futuro del país árabe tras el derrocamiento del régimen de Bachar el Asad, en una reunión en Riad, la capital de Arabia Saudí.
“Analizaremos cómo aliviar las sanciones, pero esta decisión debe tener lugar tras un proceso tangible dentro de una transición política que refleje a Siria en toda su diversidad”, ha remarcado Kallas en un mensaje difundido en las redes sociales a su llegada a Riad. “Hay esperanza y también desafíos en Siria”, ha dicho. Al encuentro en Riad han acudido también los ministros de Exteriores de Emiratos Árabes, Egipto, Qatar, Jordania, Líbano o Kuwait. También la alemana, Annalena Baerbock, y el subsecretario de Estado de Estados Unidos, John Bass, así como el jefe de la diplomacia de Turquía y enviados de Naciones Unidas y la Liga Árabe.
Tras la caída de Bachar el Asad —ahora exiliado en Rusia—, la UE ha debatido cómo relacionarse con el nuevo Gobierno interino sirio, controlado por el grupo islamista suní Hayat Tahrir al Sham (HTS) y su líder, Ahmed al Shara. La Unión y algunos de sus Estados miembros han dado pasos rápidos para abrir relaciones diplomáticas con las nuevas autoridades —HTS viene moderando notablemente sus postulados, aunque proviene de la rama siria de Al Qaeda— y varios ministros de Exteriores, entre ellos, el italiano, Antonio Tajani, el francés, Jean-Noël Barrot, y la alemana, Annalena Baerbock —los representantes de Berlín y París, bajo mandato europeo de Kallas— han visitado Damasco para reunirse con la nueva cúpula en un intento no solo de testar las aguas, sino también de trazar lazos y dejar claro al nuevo régimen que la UE está ahí, pero solo con ciertas condiciones.
Algunos países quieren, además, que ese acercamiento sirva no solo para fomentar la vuelta de miles de refugiados sirios que ahora están en Europa, sino también para disuadir al nuevo régimen de que mantenga alguna relación con Rusia, aliado de El Asad durante años.
El debate ahora es si levantar algunas sanciones europeas que llevan años pesando sobre Siria y cómo hacerlo. Varios Estados miembros, entre ellos Italia y Alemania, han propuesto un levantamiento gradual, por ejemplo, a las restricciones al sector bancario, el transporte aéreo y el movimiento de activos privados para permitir que los fondos regresen el país y así impulsar el retorno de los refugiados. También reducir las sanciones impuestas al sector energético para mejorar el suministro en el país, que ahora tiene gravísimas carencias. Pero todo solo si se garantizan las reformas democráticas.
Berlín y Roma han enviado al resto de Estados miembros varias propuestas para reformular las relaciones con el nuevo liderazgo sirio, que incluyen ese levantamiento de sanciones que —como opción para garantizar que las reforma se cumplen y son irreversibles— puede ser temporal, según las propuestas a las que ha tenido acceso EL PAÍS.
También Francia ha mencionado esa posibilidad. “Hay algunas sanciones que hoy en día impiden el acceso a ayuda humanitaria y que dificultan la recuperación del país. Esas sanciones podrían levantarse rápidamente”, dijo hace unos días el ministro francés Barrot tras su visita a Damasco acompañado de su homóloga alemana. El viaje despertó controversia después de que el principal líder sirio y de HTS, Ahmed al Shara, no le estrechara la mano a Baerbock y sí a Barrot. “Hay otras sanciones que estamos discutiendo con nuestros socios europeos y que podrían levantarse, pero obviamente dependerá del ritmo al que se tengan en cuenta nuestras expectativas para Siria en materia de mujeres y seguridad”, apuntó el francés en una entrevista con France Inter.
Estados Unidos ya ha dado un paso similar y ha aliviado durante un plazo de seis meses algunas sanciones para permitir ciertas transacciones con el Gobierno sirio, remesas personales y pagos energéticos, para que las restricciones impuestas no obstaculicen los servicios básicos de suministro de electricidad, agua o saneamiento, según una nota del Departamento del Tesoro estadounidense.
Terrorismo e Israel
Tras clausurar la conferencia, el ministro saudí de Exteriores, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, ha subrayado la necesidad de levantar sanciones a Siria, porque mantenerlas “obstaculizará las aspiraciones del pueblo sirio de alcanzar el desarrollo”.
En el comunicado final, los participantes destacan la importancia “de respetar la unidad de Siria, su soberanía y la seguridad de su territorio”. También expresan su “preocupación” por la penetración de tropas de Israel en suelo sirio en la zona desmilitarizada o de amortiguamiento entre ambas partes. La reunión también trató el peligro de un resurgimiento del grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, en sus siglas en inglés). En esa línea, los países árabes, especialmente los vecinos de Siria, mantuvieron una reunión previa en la que acordaron reforzar la coordinación de seguridad entre ellos “para hacer frente a cualquier amenaza terrorista que emane del territorio sirio”, informó Efe. Así lo destacaron en un comunicado conjunto los ministros de Exteriores de Egipto, Qatar, Kuwait, Bahréin y Emiratos Árabes Unidos, además de Irak, Jordania y Líbano, vecinos árabes de Siria.
El Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), organización que agrupa a las seis potencias económicas del golfo Pérsico, está coordinando la celebración de una conferencia internacional de donantes para la reconstrucción de Siria, anunció este domingo su secretario general, Yasim al Badawi.