El ejército israelí mata a cinco palestinos en una mezquita de Cisjordania

La matanza se produce después de que el día anterior los militares iniciaran una ofensiva sobre el territorio ocupado que terminó con la vida de 12 personas

Palestinos, en el exterior de una mezquita tiroteada por el ejercito israelí, este jueves en el campo de refugiados de Faraa, en Cisjordania.Nasser Nasser (AP/ LaPresse)
Jerusalén -

Tropas del ejército israelí han matado a cinco “combatientes” palestinos que estaban “escondidos” dentro de una mezquita en Tulkarem, en la Cisjordania ocupada, según informó la institución armada a través de un comunicado. Estas muertes se producen después de que el ejército lanzase en la madrugada del miércoles una amplia ofensiva simultánea en tres zonas del norte de Cisjordania, que causó la muerte de 10 palestinos. Ese mismo día, el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, llamó a actuar en Cisjordania igual que en Gaza, “incluida la evacuación temporal de los residentes palestinos y cualquier medida que sea necesaria”.

La operación comenzó a primera hora del miércoles con cientos de tropas israelíes respaldadas por helicópteros, drones y vehículos blindados de transporte de personal que atacaron las ciudades de Tulkarem, Yenín y áreas del valle del Jordán. También hubo una interrupción total de la red en la empresa Jawwal, una de las dos principales compañías de telecomunicaciones en los territorios palestinos de Gaza y Cisjordania, según señaló un testigo. Las autoridades sanitarias palestinas dijeron que al menos 12 palestinos murieron en las operaciones del miércoles.

En Yenín, este jueves, las excavadoras avanzaban por las calles vacías mientras el sonido de los drones perforaba el cielo. Las tropas israelíes permanecían estacionadas frente al principal hospital de la ciudad, inspeccionando las ambulancias. El miércoles, los militares bloquearon el acceso al hospital con montículos de tierra y controlaron la entrada de ambulancias para evitar que los combatientes buscaran refugio allí.

Allegados participan en el funeral de cuatro palestinos que murieron durante una operación militar israelí en el campo de refugiados Faraa, este jueves.Nasser Nasser (AP)

Los brazos armados de las facciones Hamás, Yihad Islámica y Al Fatah dijeron en declaraciones separadas el miércoles que sus hombres habían detonado bombas contra vehículos militares israelíes en Yenín, Tulkarem y Faraa, una ciudad en el valle del Jordán, una ciudad en el valle del Jordán. Israel, por su parte, señaló que uno de los cinco combatientes muertos en la mezquita de Tulkarem es Mohamed Jabber, conocido como Abu Shujaa, jefe de una red de combatientes en el campo de refugiados de Nur Shams, próximo a la ciudad.

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Los enfrentamientos en Cisjordania se han intensificado desde que comenzó la guerra de Israel con los militantes de Hamás en Gaza hace casi 11 meses. Israel sostiene que Irán proporciona armas y apoyo a las facciones militantes de palestinos y ha aumentado las operaciones en Cisjordania, mientras que los colonos judíos han lanzado frecuentes ataques de estilo contra las comunidades palestinas.

El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Israel Katz, dijo en un mensaje en X durante la madrugada del miércoles, refiriéndose al ataque sobre Cisjordania emprendido esa misma noche: “Esta es una guerra en todos los sentidos, y debemos ganarla”. Acusó a Irán de trabajar para desestabilizar a Jordania y establecer un frente oriental contra Israel, como lo ha hecho en Gaza y en el Líbano, donde Israel ha estado intercambiando fuego casi a diario con militantes del grupo iraní Hezbolá. Para abordar la amenaza de un frente oriental, Katz dijo que Israel tendría que utilizar “todos los medios necesarios, incluyendo, en casos de combate intenso, permitir a la población evacuar temporalmente de un barrio a otro para evitar daños a los civiles”.

En la cercana Gaza, las órdenes de evacuación han desplazado a casi todos los 2,3 millones de habitantes del enclave varias veces, dando lugar a una hambruna y enfermedades mortales. La última ronda de violencia entre israelíes y palestinos comenzó el 7 de octubre después de que militantes de Hamás irrumpieran desde Gaza, en el sur de Israel, matando a 1.200 personas y tomando más de 250 rehenes, según cifras israelíes. La campaña de Israel en Gaza desde entonces ha demolido franjas del enclave y ha matado a más de 40.500 personas, dicen funcionarios de salud palestinos. Las conversaciones con mediación internacional para poner fin al conflicto continúan.

Desde que comenzó la guerra de Gaza, miles de palestinos han sido arrestados en ataques en Cisjordania y Jerusalén Este y más de 660, entre combatientes y civiles, han muerto, según cifras del Ministerio de Salud palestino. Al menos 30 israelíes han muerto en ataques en Jerusalén y Cisjordania durante el mismo período, según los recuentos israelíes.

Miembros de las fuerzas israelíes patrullan una calle durante una operación militar en el campo de refugiados de Nur Shams, este jueves.Majdi Mohammed (AP/ LaPresse)

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