Brasil busca a 140 víctimas de las lluvias tras recuperar más de un centenar de cadáveres en Petrópolis
Las autoridades alertan de un riesgo muy alto de nuevos deslizamientos de tierras tras las lluvias, que ya han dejado al menos 104 muertos. “Va a ser difícil encontrar a alguien con vida”, advierte un vecino
Los equipos de rescate desplegados en la ciudad brasileña de Petrópolis buscan todavía al menos 140 víctimas después de haber localizado hasta este jueves los cadáveres de más de un centenar de fallecidos por el temporal que el martes por la noche llevó terror, desolación y devastación a este municipio de montaña cercano a Río de Janeiro. “Tenemos registrados por el momento 104 muertos. Y también hay 24 rescatados con vida”, ha explic...
Los equipos de rescate desplegados en la ciudad brasileña de Petrópolis buscan todavía al menos 140 víctimas después de haber localizado hasta este jueves los cadáveres de más de un centenar de fallecidos por el temporal que el martes por la noche llevó terror, desolación y devastación a este municipio de montaña cercano a Río de Janeiro. “Tenemos registrados por el momento 104 muertos. Y también hay 24 rescatados con vida”, ha explicado la Defensa Civil. Medio centenar de bomberos han retomado al amanecer las tareas de rescate en busca de víctimas entre el barro, mientras las autoridades alertan de que existe un riesgo muy alto de nuevos deslizamientos de tierras por las fuertes lluvias que se esperan para este jueves y viernes.
Petrópolis es una localidad muy turística, ubicada a 70 kilómetros de Río de Janeiro, que con su clima fresco atrajo al emperador Pedro II, que se instalaba allí cuando hacía demasiado calor en la entonces capital. El antiguo palacio de verano acoge ahora el Museo Imperial.
El Ejército se ha sumado a la operación con soldados y equipamientos para liberar calles. Algunos vecinos también colaboran en la búsqueda de víctimas. “Fui criado aquí, conozco a todo el mundo. Vine a ayudar al personal (de rescate). Es surrealista. Desgraciadamente, va a ser difícil encontrar a alguien con vida”, explicó Luciano Gonçalves, de 26 años, a la agencia France Presse mientras rebuscaba, con una azada en la mano, entre el barro que ha tomado buena parte de la ciudad.
Los equipos de rescate trabajan en lo que el gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, calificó en el primer momento como un escenario de guerra. Los bomberos buscan en el barro con excavadoras, perros, botes e incluso aeronaves. La policía también ha desplegado a unos 200 agentes en esta ciudad de 300.000 vecinos para recoger y cruzar informaciones sobre personas en paradero desconocido para elaborar un listado oficial. Antes de la actualización de este jueves por la mañana, había 35 personas sin localizar.
Los especialistas coinciden en que las catástrofes de esta envergadura obedecen a una conjunción de factores. En este caso, apuntan a unas lluvias fortísimas, la topografía de la región y, como ocurre en otras tragedias similares que periódicamente conmocionan a Brasil, a la fragilidad de las infraviviendas construidas ilegalmente en zonas escarpadas por familias que no pueden permitirse vivir en otro lugar. Las autoridades contabilizaron en Petrópolis más de 300 deslizamientos de tierras además de inundaciones y caídas de árboles.
El martes por la noche las nubes descargaron sobre la ciudad tanto volumen de agua como el previsto para todo el mes de febrero. Fue una tormenta histórica. El gobernador Castro ha asegurado que fue “la peor lluvia desde 1932″. De todos modos, esta ciudad y otras vecinas sufrieron una tragedia aún mayor hace poco más de una década. Un temporal en 2011 por estas mismas fechas, en plena temporada de lluvias, mató a más de 900 personas en la región.
Desde el mes de diciembre, Brasil ha sufrido otras tragedias de menor envergadura por lluvias extremas en los Estados de Bahía, São Paulo y Minas Gerais.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS América y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la región