Francia investiga a cinco afganos evacuados de Kabul por sus presuntos lazos con los talibanes
Líderes de la derecha y ultraderecha francesa aprovechan el caso para atacar al Gobierno y su política migratoria
Las autoridades francesas han puesto bajo vigilancia antiterrorista a cinco afganos evacuados el fin de semana desde Kabul por sus presuntos lazos con los talibanes, según medios nacionales. El ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha confirmado la información, que ha dado pie de inmediato a que la oposición francesa, especialmente aspirantes de la derecha y la ultraderecha a las elecciones presidenciales del año que viene, critiquen la política migra...
Las autoridades francesas han puesto bajo vigilancia antiterrorista a cinco afganos evacuados el fin de semana desde Kabul por sus presuntos lazos con los talibanes, según medios nacionales. El ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha confirmado la información, que ha dado pie de inmediato a que la oposición francesa, especialmente aspirantes de la derecha y la ultraderecha a las elecciones presidenciales del año que viene, critiquen la política migratoria del Gobierno de Emmanuel Macron.
Las sospechas se centran sobre todo en un individuo que, según documentos consultados por la Agencia France Presse, habría admitido su pertenencia al movimiento islamista. También ha reconocido que fue responsable armado de un puesto de control talibán en Kabul, si bien las autoridades francesas han indicado a la par que “ayudó ampliamente a la evacuación de la Embajada de Francia”, según declaraciones de Darmanin a la AFP. El diario Le Monde lo identifica como Niangalay S., un hombre nacido en 1995 en la provincia de Logar, a un centenar de kilómetros al este de Kabul. De acuerdo con el rotativo, el sospechoso se benefició de una operación de repatriación el 18 de agosto en la que aprovechó “la confusión del ambiente que reinaba en el lugar” para meterse, junto con familiares, en el avión militar francés que lo sacó del país.
“Ante las dificultades extremas para realizar una investigación de seguridad sobre las personas antes de ser repatriadas”, los responsables franceses “aceptaron embarcar a esa persona y su familia” en el vuelo rumbo a Abu Dabi, dijo Darmanin a la AFP. Una vez llegado a la capital emiratí en la que Francia ha instalado su punto de partida del puente aéreo de evacuación de ciudadanos extranjeros y afganos en riesgo, la DGSI, el servicio de inteligencia interior francés, “hizo el trabajo que no pudo hacer en Kabul” y realizó diversas entrevistas de seguridad al sospechoso, que acabó admitiendo haber estado con los talibanes.
Tras llegar a Francia este fin de semana, el hombre fue informado de que se le imponía una “medida individual de control administrativo y de vigilancia” (Micas, por sus siglas en francés), una provisión en las leyes antiterroristas francesas que permite aplicar a un sospechoso de terrorismo restricciones a sus movimientos y una vigilancia de los mismos por parte de los servicios de inteligencia. Junto al principal sospechoso, otras tres personas “próximas” al individuo también recibieron sendas notificaciones de vigilancia pese a que “por el momento no son directamente sospechosos” de pertenencia a los talibanes, según AFP. Le Monde afirma sin embargo que los cuatro, entre ellos dos hermanos originarios de Kabul, fueron detectados portando armas entre los talibanes en la capital tras la entrada en la ciudad e incluso unos días antes de ser evacuados.
Una quinta persona, de la que se ha comprobado que aunque llegó de forma separada hasta territorio francés tiene “vínculos” con los otros cuatro sospechosos, también ha sido puesta bajo vigilancia.
“Francia es humana, pero también vigilante”, dijo Darmanin en un mensaje en las redes sociales en las que confirmó la noticia. “En la gestión de la crisis afgana, el Gobierno francés seguirá tomando todas las disposiciones necesarias para garantizar la seguridad de los franceses, como ha sucedido este fin de semana”, agregó.
A pesar de ello la noticia, que ha coincidido con el anuncio por parte del ministro del Exterior, Jean-Yves Le Drian, de que ya han sido evacuados más de 1.000 afganos y que hasta este martes la cifra podría llegar a los 2.000, ha sido aprovechada por la oposición de derechas para criticar la gestión de la crisis por parte del Gobierno.
“El deber de acogida de Francia pasa a segundo plano cuando la seguridad de los franceses está amenazada”, escribió la líder de ultraderecha Marine Le Pen en Twitter.
“El Gobierno debe explicar a los franceses qué le impide expulsar de inmediato a esos individuos. El derecho debe adaptarse a las necesidades de nuestra seguridad, no a la inversa”, tuiteó también Xavier Bertrand, candidato de la derecha a las presidenciales. “En el avión francés que evacuaba a los afganos, había cinco individuos sospechosos de ser talibanes. Si es verdad, no tienen nada que hacer en nuestro territorio y deben ser expulsados sin demora”, reclamó por su parte su potencial rival en la derecha, Valérie Pécresse.
Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.