Argentina estudia llevar a Uruguay ante La Haya por las papeleras

El bloqueo de un paso fronterizo entre ambos países dura ya 42 días.

El Gobierno argentino señaló ayer que estudia llevar a Uruguay ante el Tribunal Internacional de La Haya, en caso de que no se produzcan avances en el conflicto por la construcción de dos fábricas de pasta de celulosa en el lado uruguayo de la frontera fluvial que separa a ambos países. Ayer continuaba el bloqueo del paso fronterizo en Frai Bentos-Puerto Unzúe, que dura ya 42 días, protagonizado por piqueteros argentinos que exigen la paralización de la construcción de las fábricas.

A pesar de la crisis, en un desayuno con corresponsales extranjeros, el ministro de Exteriores argentino...

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El Gobierno argentino señaló ayer que estudia llevar a Uruguay ante el Tribunal Internacional de La Haya, en caso de que no se produzcan avances en el conflicto por la construcción de dos fábricas de pasta de celulosa en el lado uruguayo de la frontera fluvial que separa a ambos países. Ayer continuaba el bloqueo del paso fronterizo en Frai Bentos-Puerto Unzúe, que dura ya 42 días, protagonizado por piqueteros argentinos que exigen la paralización de la construcción de las fábricas.

A pesar de la crisis, en un desayuno con corresponsales extranjeros, el ministro de Exteriores argentino, Jorge Taiana, se declaró optimista sobre una resolución pactada del conflicto, aunque señaló que el recurso ante el tribunal internacional es una salida que está prevista en el tratado firmado entre Argentina y Brasil sobre la utilización del río Uruguay. El ministro añadió que el presidente argentino, Néstor Kirchner, y el uruguayo, Tabaré Vázquez, habían acordado hace una semana pedir el levantamiento del bloqueo fronterizo a cambio de la paralización durante 90 días de la construcción de las fábricas.

"Me hubiera gustado que se hubiera atendido más rápidamente este llamamiento", reconoció ayer Taiana. Lo cierto es que las obras continúan —y miles de personas se manifestaron el pasado jueves en Uruguay a favor de las fábricas— al tiempo que los ambientalistas siguen cortando el puente internacional.

Desde Brasil, donde se encuentra de viaje, el presidente uruguayo aseguró que su Gobierno no ha cambiado "un ápice" su posición. "No hemos negociado, las obras siguen adelante", añadió Vázquez, modificando notablemente la versión argentina sobre los resultados de la reunión con Kirchner.

Contactos con España

Aunque Argentina ha reiterado que se trata de un asunto estrictamente bilateral, la Administración argentina ha contactado con las embajadas de España y Finlandia en Buenos Aires, países a los que pertenecen las dos fábricas objeto de la polémica: la española Ence y la finlandesa Botnia, según señaló ayer el canciller argentino. "Lo que hay que hacer es un estudio de impacto ambiental alternativo, serio, independiente y completo, que es lo que no ha sucedido hasta ahora", añadió Taiana.

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El corte de la frontera terrestre con Uruguay está creando un profundo malestar en Montevideo, cuyo Gobierno va subiendo el tono de las declaraciones a medida que pasan las semanas y la Administración argentina no interviene para despejar la ruta.

"El que hace zapatos es zapatero, el que hace pan, panadero y el que hace piquetes es piquetero", subrayó Vázquez desde suelo brasileño. Para el mandatario uruguayo, que ayer terminó una gira suramericana en la cual ha explicado el conflicto con Argentina, "esto no puede seguir así. No lo entiende nadie".

El presidente uruguayo, Tabaré Vázquez (izda), acompañado por su homólogo paraguayo, Nicanor Duarte (dcha), interviene durante la rueda de prensa celebrada en el palacio de López en Asunción (Paraguay).EFE

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