LA TRANSICIÓN EN AFGANISTÁN

Asesinado en Kabul uno de los tres vicepresidentes del Gobierno afgano

EE UU reconoce 48 muertos y 117 heridos en el ataque por error a una aldea afgana

Uno de los tres vicepresidentes afganos, Haji Qadir, ha sido abatido hoy por varios desconocidos armados cuando salía de su ministerio en Kabul, según han informado fuentes gubernamentales, que han precisado que Qadir, que desempeñaba también el cargo de ministro de Obras Públicas y el de gobernador de la provincia oriental de Nangarhar, ha recibido al menos un disparo en la cabeza.

Las primeras informaciones señalan que Abdul Qadir ha sido asaltado por dos individuos que han llegado al lugar de los hechos en un coche y han descargado sus armas contra el ministro, que se hallaba en el i...

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Uno de los tres vicepresidentes afganos, Haji Qadir, ha sido abatido hoy por varios desconocidos armados cuando salía de su ministerio en Kabul, según han informado fuentes gubernamentales, que han precisado que Qadir, que desempeñaba también el cargo de ministro de Obras Públicas y el de gobernador de la provincia oriental de Nangarhar, ha recibido al menos un disparo en la cabeza.

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Las primeras informaciones señalan que Abdul Qadir ha sido asaltado por dos individuos que han llegado al lugar de los hechos en un coche y han descargado sus armas contra el ministro, que se hallaba en el interior de un vehículo. Posteriormente se han dado a la fuga. Más de una treintena de balas han impactado contra el vehículo, que han causado también la muerte de su conductor, según fuentes oficiales.

El Gobierno de Karzai se ha aprestado a afirmar que el asesinato de Qadir ha sido "un atentado terrorista" y ha expresado "tristeza" por su muerte.

Abdul Qadir era uno de los tres vicepresidentes afganos elegidos el mes pasado por la Loya Yirga o Gran Asamblea, que confirmó a Hamid Karzai -hasta entonces jefe de un Gabinete provisional- como presidente del Gobierno afgano de transición para los próximos 18 meses.

El vicepresidente era miembro de la etnia pastún, a la que pertenecen el 40% de la población afgana, y hermano de Abdul Haq, un antiguo comandante de los muyahidín asesinado en octubre del año pasado poco después de entrar en Afganistán desde el país vecino de Pakistán para fomentar la revuelta contra el derrocado régimen talibán.

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Qadir es el segundo ministro asesinado desde que el Gobierno de Karzai asumió el poder de forma provisional en diciembre, semanas después de la caída de los talibán. El ministro de Turismo y Aviación Civil, Abdul Rahman, fue asesinado en febrero en el aeropuerto de Kabul, cuando se disponía a abandonar la capital afgana. En abril , una bomba dirigida contra el ministro de Defensa, Mohamed Fahim (tayiko) acabó con la vida de cuatro civiles y dejó más de 50 heridos en Jalalabad.

El "error" de EE UU

Por otro lado, el comandante de las fuerzas aliadas, el general Dan McNeil, ha reconocido esta mañana, casi una semana después del bombardeo por error de una localidad afgana donde cientos de personas estaban celebrando un matrimonio, que el ataque produjo al menos 48 muertos y 117 heridos, según cifras de los responsables afganos.

En una rueda de prenas conjunta con el ministro afgano de Asuntos Exteriores, Abdulá Abdulá, McNeill ha asegurado que la política de la coalición no es perjudicar a los inocentes. "Nosotros no atacamos a nuestros aliados", ha subrayado el general.

Este reconocimiento de la mayor tragedia civil desde el comienzo de la operación militar en Afganistán el pasado octubre se produce el mismo día en que una comisión de investigación conjunta afgano-estadounidense debe dar a conocer los resultados de su visita al lugar de los hechos.

Los hechos se produjeron la noche del domingo al lunes pasado, cuando un bombardeo estadounidense alcanzó una fiesta de boda en Deh Rawud, una aldea de la provincia de Uruzgán, en el centro-sur de Afganistán. Los aviones AC-130 dejaron caer al menos siete bombas de casi 1.000 kilos cada una en torno a la ciudad.

Imagen de archivo del vicepresidente asesinado.EPA