Shannen Doherty afirma que Kurt Iswarienko está retrasando su divorcio con la esperanza de que ella muera antes de tener que pagar
La actriz, enferma de cáncer, solicita al fotógrafo una manutención conyugal para hacer frente a sus gastos médicos y legales, anticipando que sus ingresos van a disminuir “drásticamente” este año porque no ha podido trabajar debido a sus “problemas de salud recurrentes”
Hace más de una década que el cáncer no da tregua a Shannen Doherty (Tennessee, Estados Unidos, 53 años). En 2015 contó por primera vez que estaba recibiendo tratamiento por un cáncer de mama. Entonces llevaba solo cuatro años de matrimonio con su tercer marido, el fotógrafo Kurt Iswarienko (49 años), con quien se casó en 2011. Lo peor parecía haber pasado y la enfermedad parecía estar medianamente controlada, hasta que en junio de 2023 la actriz, que siempre ha sido transparente sobre sus diagnósticos, anunció que tenía metástasis en el cerebro. Ese noviembre reveló además que el cáncer se había extendido a los huesos. Ese año, también pidió el divorcio a Kurt. “El divorcio es lo último que quería Shannen. Desafortunadamente, sintió que no le quedaba otra opción”, señaló la representante de la intérprete, Leslie Sloane, a la revista People. Ahora es la propia Doherty la que habla de su divorcio, que todavía no se ha llevado a cabo, y ella lo achaca a un motivo difícil de asimilar. “Simplemente, no es correcto que a Kurt se le permita prolongar nuestro divorcio con la esperanza de que muera antes de que se le exija que me pague, mientras continúa viviendo su vida y eludiendo sus responsabilidades con su esposa moribunda de más de 11 años”, afirma en unos documentos legales obtenidos por medios como People o US Magazine.
Doherty, conocida por sus papeles en Sensación de vivir o Embrujadas, llevó personalmente estos documentos al juzgado el pasado 14 de junio, según explican estos medios estadounidenses. En ellos, la actriz solicita una manutención conyugal de 15.343 dólares al mes ―unos 14.360 euros― a Iswarienko, con efecto retroactivo “desde el 1 de junio de 2024″. Además, pide que su exmarido se haga cargo de los 9.100 dólares ―8.500 euros― que le costó pagar al abogado que llevó su divorcio el año pasado.
Para lo único para lo que quiere ese dinero, asegura, es para costear su tratamiento contra el cáncer, ya que sus problemas económicos son cada vez más graves. Según los documentos, Doherty espera que sus ingresos disminuyan “drásticamente” este año porque no ha podido trabajar debido a sus “problemas de salud recurrentes”. “Hoy en día, prácticamente todos los ingresos que gano son ingresos residuales del trabajo que realizaba antes de casarme”, afirma en los papeles. “Recientemente, me enteré de que Embrujadas ya no se transmitirá en ninguna de las principales plataformas de streaming después del 30 de junio de 2024. Como resultado, mis futuros ingresos residuales disminuirán drásticamente”, continúa, refiriéndose a la serie que se emitió entre 1998 a 2001. La actriz alega que Iswarienko está retrasando estos trámites a propósito, consciente, como ella, de que cada vez avanza más su cáncer terminal.
La abogada de Iswarienko, en cambio, cuestiona esta afirmación, y dice que había ofrecido un acuerdo de conciliación a la intérprete en octubre de 2023, demostrando que quería encontrar una solución, pero Doherty lo negó. “Kurt no está ‘simplemente esperando a que Shannen muera”, ha declarado la abogada Katherine Heersema en respuesta a la publicación de la información que aparece en los documentos. “Quiere lo mejor para Shannen y quiere que ambos puedan dejar atrás este caso y seguir adelante”, garantiza. Doherty afirma por su parte haber rechazado los acuerdos propuestos porque “eludía el tema de sus obras originales creadas durante el matrimonio” y “su capacidad de ingresos”. Como está sin trabajo, la actriz también espera que sus facturas médicas “aumenten drásticamente” cuando su seguro médico ya no sea válido.
Según los cálculos documentados, los ingresos anuales promedio de Iswarienko en los últimos tres años fueron de 672.916 dólares netos ―unos 629.400 euros―. Esto deja “al menos” 56.076 dólares ―más de 52.400 euros― por mes gastables, de los cuales los abogados de Doherty afirman que la manutención conyugal saldría sin problema. Estos cálculos de la actriz y sus abogados son el resultado del promedio de ingresos anual de 259.708 dólares ―243.000 euros― que incluía el trabajo del fotógrafo entre 2021 y 2022. Ella, sin embargo, afirma que en lo que va de año ha ganado poco más de 25.000 dólares ―23.385 euros―, lo que, según sus letrados, muestra una caída significativa de los ingresos. La intérprete cifra su factura médica del año pasado en 21.640 dólares ―20.240 euros―, y alega que Iswarienko no debería tener problemas para ayudar a pagarla porque “suele gastar dinero en artículos y experiencias lujosas”.
A principios del pasado mes de abril, Doherty explicó en su podcast, Let’s Be Clear, que se está preparando para la muerte. “Mi prioridad en este momento es mi madre. Sé que va a ser muy duro para ella si yo muero antes. Y porque sé que va a ser duro, estoy intentando que otras muchas cosas le resulten más fáciles. No quiero que tenga que encargarse de un montón de cosas. No quiero que se encuentre con un trastero lleno de muebles”, reconocía la intérprete, asegurando que estaba haciendo limpieza, vendiendo o regalando un sinfín de objetos que ya no necesita. “Sientes que estás soltando algo que fue muy especial e importante para ti. Pero sabes que es lo que debes hacer... y, al final, va a darte cierta sensación de paz y de calma. Porque estás ayudando a la gente que se va a quedar a tener una transición más limpia y más sencilla”, comentó.