Sabrina Carpenter, la exniña Disney discípula de Taylor Swift que se ha convertido en la nueva estrella pop

El 10 de agosto de 2009, una joven Sabrina Carpenter de 10 años escribió este inocente tuit: “Estaba intentando participar en un concurso de karaoke de Taylor Swift para ganar entradas y tener la oportunidad de conocerla, pero me dijeron que tenía que tener 13 años :(”. El 23 de febrero de 2024, era la propia Taylor Swift la que la presentaba como “la brillante Sabrina Carpenter” mientras la invitaba al escenario a cantar al piano junto a ella en pleno con...

El 10 de agosto de 2009, una joven Sabrina Carpenter de 10 años escribió este inocente tuit: “Estaba intentando participar en un concurso de karaoke de Taylor Swift para ganar entradas y tener la oportunidad de conocerla, pero me dijeron que tenía que tener 13 años :(”. El 23 de febrero de 2024, era la propia Taylor Swift la que la presentaba como “la brillante Sabrina Carpenter” mientras la invitaba al escenario a cantar al piano junto a ella en pleno concierto en Sídney. “¡La Sabrina de 9 años que cantaba White Horse jamás se vio venir esto!”, escribió la de Pensilvania ―igual que Taylor― en su perfil de Instagram, donde acumula 34,6 millones de seguidores, en una publicación en la que compartía ese emocionante momento. Carpenter, que ha sido la telonera de Swift durante gran parte de su gira The Eras Tour, ha aprovechado bien estos últimos 15 años para pasar de ser una simple fan a la estrella pop del momento. Así lo demuestra otro hito reciente: el pasado 30 de abril desbancó a su ídolo como número 1 mundial en Spotify. Espresso, su último single, superó a Fortnight, la canción de Taylor con Post Malone que llevaba coronando el listado desde que salió The Tortured Poets Department.

Como muchos coetáneos de Swift, Sabrina Carpenter también tiene su pasado de chica Disney. Antes de darle portazo a la compañía como ya hicieron sus predecesoras Miley Cyrus, Demi Lovato, Selena Gomez o Vanessa Hudgens una década antes, Carpenter se arrimó a Disney Channel para empezar a labrar su carrera. En 2011 quedó tercera en el concurso de canto The Next Miley Cyrus Project, dirigido por la mismísima Miley Cyrus; en 2013 interpretó la canción Smile para el álbum inspirado en Campanilla y sus amigas, Fairies: Faith, Trust, and Pixie Dust; su voz tuvo un papel recurrente en la serie animada La princesa Sofía, donde también interpretaba la canción All You Need, y entre 2014 y 2017 protagonizó la comedia de situación Riley y el mundo. También ha prestado su voz a otras series animadas de la franquicia, como Phineas y Ferb o La ley de Milo Murphy, algo que le viene de familia, ya que su tía es la actriz Nancy Cartwright, conocida por dar voz a varios personajes de Los Simpson, incluido Bart, en la versión anglosajona.

Pero ella tenía claro que su voz no estaba destinada a esconderse detrás de un dibujo animado. En abril de 2015 lanzó su primer álbum de estudio, Eyes Wide Open, que alcanzó el puesto 43 en el listado de Billboard. Entonces, a punto de cumplir los 16 años, todavía describían su estilo como pop adolescente con elementos de folk. “Sabrina Carpenter ya se ha hecho un hueco como la reina (adolescente) del country-pop dulce y azucarado”, comenzaba una crítica de la publicación musical Idolator, que equiparaba su sonido con el de “Taylor Swift antes de que todos los chicos de la ciudad le rompieran el corazón”. Un año más tarde decidió que se había acabado lo del azúcar y lanzó Smoke and Fire, un sencillo independiente apartado ya de la estética infantil a la que tenía acostumbrado a su público que ni siquiera estuvo incluido en el álbum que sacó ese año. “Estoy tan cansada / ardiendo como humo y fuego”, dice la última estrofa de la canción. Comenzaba el resurgir de Sabrina Carpenter.

“Puede reclamar legítimamente el título de estrella del pop en toda regla”, aseguraba un artículo de la revista i-D sobre la cantante a raíz del lanzamiento del álbum Emails I Can’t Send, en 2022, que debutó en el puesto número 23 de Billboard. En el disco, con una mezcla de sonido experimental, oscilando entre la música disco, el pop o el country, entre otros géneros, canta sobre estar sujeta al escrutinio público, encontrarse con su ex en una cafetería o mentirle a su terapeuta. “Mi música anterior presentaba una faceta de mí misma que no sentía que fuera auténtica en ese momento”, reconoció el año pasado en una entrevista con Vogue. “Honestamente, fue mucho más emocionante escribir la verdad, ya sea positiva o negativa o bonita o fea o bien recibida o no”, aseguró sobre su nuevo trabajo: “Creo que importaba que dijera lo que sentía en lugar de tratar de endulzar las cosas”.

Este trabajo incluye un dardo directo hacia su entonces ya exnovio, el actor y cantante Joshua Bassett, que a su vez fue pareja de la también actriz y cantante ―y exchica Disney, cómo no― Olivia Rodrigo. En 2021 Rodrigo lanzó la canción Driver License y muchos seguidores percibieron referencias a Carpenter en esa letra que narraba el dolor que sufrió al echar de menos a una persona que amó y que se fue “con una chica rubia”. Las fans de Rodrigo se lanzaron entonces contra Carpenter, tachándola de “rompe hogares”. Ella se desahogó un año después en la canción because i liked a boy. “Salir con chicos que tienen exnovias, no, yo no lo recomendaría. Soy una rompe hogares, una puta, tengo amenazas de muerte llenando camiones. Dime tú, ¿quién soy?, supongo que no tengo elección, todo porque me gustó un chico”, decía la letra.

El chico que le gusta ahora lo presentó oficialmente como su nuevo novio en la alfombra de la Gala Met de este 2024. Se trata de Barry Keoghan (Dublín, 31 años), el actor que este año ha dado mucho que hablar gracias a su papel protagonista en Saltburn. En la alfombra roja de los Oscar, dos meses antes, ya eran muchos los que especulaban sobre esta relación cuando Keoghan apareció con una pulserita con el nombre de Sabrina al más puro estilo swiftie. “Está bebiendo el agua de mi bañera como si fuera vino tinto”, dijo ella en abril en su debut en Coachella en un claro guiño a una de las escenas de Keoghan más comentadas de la película.

“Creo que hay una gran diferencia entre mi yo de hace dos años y la de ahora. Ahora me estoy divirtiendo, que creo que es la mayor diferencia”, confesó hace poco en una entrevista para el podcast del DJ Zane Lowe. Esa comodidad de haber encontrado por fin su sitio, llenando estadios con la cantante del momento y pasándoselo bien con el actor de moda, se transmite ahora en todo lo que hace. Hasta Kim Kardashian la definió como “la estrella del pop de la próxima generación” cuando la presentó en abril como la imagen de la nueva campaña de Skims, su marca de ropa interior ―que enseguida se hizo viral―. A sus 25 años recién cumplidos, y con sus escasos 1,51 metros de altura, Sabrina está dispuesta a llegar a lo más alto.