Travis Kelce avisa a la liga de fútbol de que se está “pasando un poco” al exponer su relación con Taylor Swift
La cantante ha acudido a los dos últimos partidos de la estrella de los Kansas Chiefs, en los que se ha convertido en la protagonista de la retransmisión
En un océano de divorcios de famosos, la historia de Taylor Swift y Travis Kelce es una isla de calma y diversión. Su relación, tan popular y pública como absolutamente privada y sin apenas detalles, se ha situado en el foco mediático de la prensa estadounidense, y no solo de las revistas del corazón. Los medios más...
En un océano de divorcios de famosos, la historia de Taylor Swift y Travis Kelce es una isla de calma y diversión. Su relación, tan popular y pública como absolutamente privada y sin apenas detalles, se ha situado en el foco mediático de la prensa estadounidense, y no solo de las revistas del corazón. Los medios más serios glosan los detalles de un romance de otoño, aún no oficializado por ellos, que llena horas de televisión y redes sociales. Pero quizá esté llenando demasiadas horas. O eso es lo que piensa uno de sus protagonistas. Porque Kelce, estrella de la liga de fútbol americano estadounidense y de su equipo, los Kansas Chiefs, ha dicho, muy educadamente, que quizá haya llegado el momento de pisar el freno.
Los rumores y comentarios sobre su relación llevan semanas pululando, pero no fue hasta el pasado 24 de septiembre cuando todo cobró forma. Entonces, Swift acudió al estadio Arrowhead de Kansas City, donde vio el partido de Kelce desde un palco junto a su madre y la familia del jugador. Después, abandonaron juntos el estadio en el Chevrolet Chevelle eléctrico de él. La artista se convirtió durante toda la noche del domingo en la protagonista de la retransmisión, e incluso la NFL, la liga de fútbol profesional estadounidense, cambió su perfil de Twitter (ahora X) y colocó una foto de la cantante, además de autorenombrarse como “Taylor’s Version”, es decir, versión de Taylor, una coletilla que ella añade a todas las canciones que recupera (tras haberlas perdido a manos de su exmánager) y regraba.
El esquema se repitió este pasado domingo 1 de octubre, cuando Swift acudió al estadio de los Jets en Nueva York para ver el partido en el que estaba presente Kelce. En el MetLife Stadium, la de Pensilvania estuvo acompañada de una buena pandilla de amigos famosos: el matrimonio formado por Blake Lively y Ryan Reynolds, el actor Hugh Jackman, la actriz Sophie Turner (recién separada de Joe Jonas, expareja hace años de Swift, y a la que ahora la cantante le está prestando una casa en Nueva York para que viva junto a sus dos hijas durante la resolución de su divorcio) y la cantante Sabrina Carpenter, entre otros. Ese domingo, incluso hubo anuncios durante el partido que hacían referencia a Swift, y su canción Welcome to New York (es decir, Bienvenidos a Nueva York, en referencia a la ciudad donde tenía lugar el partido) sonó en más de una ocasión.
De nuevo, las cámaras enfocaron constantemente a Swift, de 33 años, que se convirtió en una estrella más del partido. En cada touchdown de Kelce, las imágenes volvían constantemente a ella. Según datos de la NFL, este ha sido el juego más visto del año, con 27 millones de espectadores y solo por detrás de la final de la liga, el partido de la Super Bowl de febrero (donde precisamente ganaron los Kansas Chiefs con Travis Kelce). Y aunque ambos lo llevan con naturalidad, sin confirmar, desmentir y ni siquiera hablar del asunto, Kelce (que el jueves cumple 34 años) ha alzado la voz al respecto. El deportista tiene un podcast llamado New Heights junto a su hermano mayor Jason (de 35), también jugador profesional de fútbol americano, en su caso en los Philadelphia Eagles.
En el capítulo de esta semana, Jason le pregunta directamente a Travis sobre el asunto de que Swift se haya convertido en la protagonista de las retransmisiones. “Seamos directos: ¿se está pasando la NFL?”, pregunta el mayor. “Deja fuera tus sentimientos por Taylor”, le dice, lo que provoca una carcajada del menor, que después, más serio, admite. “Creo que es divertido cuando muestran quién está en el partido. Creo que le da un poco más de ambiente, aporta un poco más a lo que estás viendo. Pero a la vez...”, deja en el aire Travis, y es Jason quien completa la frase: “Se están pasando”. Y, efectivamente, Travis se muestra de acuerdo. “Se están pasando un poco, está claro, sobre todo dada mi situación. Supongo que simplemente quieren divertirse con todo esto”.
Más adelante la pareja de hermanos vuelve al tema, y Travis saca a colación que los famosos “no están ahí para salir en la tele”. “Porque nunca sabes si les vas a pillar dándole un bocado enorme a una hamburguesa y quedar como un idiota, no sé si me entiendes, hay ciertas cosas... No quieres estar en la tele todo el rato”. “La NFL no suele traer a famosos a los partidos”, reconoce Jason. “El baloncesto lo ha intentado, están a un lado de la pista, los sacan un par de veces y vuelven al juego. La NFL está como: ‘¡Mirad a todos estos famosos de primer nivel en nuestro partido! ¡Que se vean, que se vean!’. Tío, sácales una vez, haz un cortecito, pero no puedes exagerar así”.
El mediático romance entre Swift, reina absoluta de las listas de éxitos este verano, gracias en buena parte a su exitosa gira The Eras Tour —que junto al Renaissance Tour de Beyoncé está ayudando a revitalizar la economía estadounidense—, y la estrella del fútbol americano ni siquiera está confirmado por sus protagonistas. Según la prensa estadounidense, ambos están contentos con esta incipiente relación, hablan a diario por teléfono y tienen ganas de verse con frecuencia, pero sin presión ni prisa. Lo normal en dos treintañeros que están empezando a salir juntos y tienen agendas apretadas y vidas a distancia. Tras una discretísima relación de seis años con el actor británico Joe Alwyn que acabó en abril, Swift no quiere esconderse. Las cámaras de televisión tampoco van a permitírselo, especialmente si hay un touchdown que celebrar.