75 ediciones de la semana de la moda madrileña: el poder del desfile para revitalizar el sector
Es la única pasarela que siguió adelante a pesar de la pandemia. Ahora, con la vuelta al aforo completo, la Mercedes-Benz Madrid Fashion Week vuelve a sacar músculo del talento nacional
En 1985, seis diseñadores (María Moreira, Jesús del Pozo, Manuel Piña, Domingo Córdoba, Jorge Gonzálvez y Antonio Alvarado) se reunían bajo una carpa en la plaza de Colón para mostrar sus creaciones con el apoyo del entonces presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina. Meses más tarde se trasladaron a un emplazamiento menos precario, el Museo del Ferrocarril, para inaugurar unas jornadas dedicadas a la moda nacional a las que se unieron Sybilla, Roberto Verino o Ágatha Ruiz de la Prada. ”En...
En 1985, seis diseñadores (María Moreira, Jesús del Pozo, Manuel Piña, Domingo Córdoba, Jorge Gonzálvez y Antonio Alvarado) se reunían bajo una carpa en la plaza de Colón para mostrar sus creaciones con el apoyo del entonces presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina. Meses más tarde se trasladaron a un emplazamiento menos precario, el Museo del Ferrocarril, para inaugurar unas jornadas dedicadas a la moda nacional a las que se unieron Sybilla, Roberto Verino o Ágatha Ruiz de la Prada. ”Entonces la moda estaba mucho más de moda que ahora. Recuerdo a mucha gente en la puerta intentando entrar. Yo misma me colaba en algunos desfiles”, rememora esta última en uno de los vídeos que la Mercedes-Benz Madrid Fashion Week ha lanzado para conmemorar su edición número 75.
La pasarela anteriormente conocida como Cibeles (fue en 2012 cuando se rebautizó, tras entrar en el circuito de otras semanas de la moda internacionales, como la de Berlín o Ciudad de México, también patrocinadas por la marca alemana) es la única que se ha celebrado de forma continuada durante 37 años. Ni siquiera en los momentos más duros de la pandemia, es decir, en otoño de 2020, dejó de celebrarse, como sí ocurrió en la mayoría de las capitales. “Ahora, más que nunca, la moda española necesita reactivar la generación de negocio y poner en valor su creatividad y talento”, explicaba entonces su directora, Nuria de Miguel.
Esta edición, que se celebrará del jueves al domingo, será la primera sin aforos reducidos. 23 diseñadores desfilarán en Ifema más de una decena lo harán en lo que se conoce como Off Cibeles, que engloba presentaciones en distintos emplazamientos de la ciudad. Para Redondo Brand, Fely Campo o Ynés Suelves esta será su primera edición en el calendario oficial. Otros, como Teresa Helbig, Hannibal Laguna o Roberto Torretta, son ya clásicos de la cita.
Las ventas de moda de autor se desplomaron nada menos que un 36% en 2020 respecto a las cifras del año anterior, según el informe que dio a conocer el pasado verano la Asociación de Creadores de Moda de España. “Es fundamental apoyar esta pasarela ahora mismo. Hay que potenciar la idea de moda nacional y visibilizar que hay un abanico de firmas muy diversas con discursos y narrativas muy distintas”, cuentan Sergio de Lázaro y Verónica Abián, creadores de la marca Otrura. Para ellos, desfilar es un elemento fundamental en su trabajo, no solo porque les permite mostrar el trabajo detrás de cada colección, también y sobre todo, porque “es nuestra forma de hacernos entender, de transmitir nuestro mensaje”. Un mensaje que, además, va mucho más allá del de la propia moda. La firma presentará el próximo sábado una colección con la problemática de la salud mental como trasfondo. “La moda es un canal inmejorable para expresar cuestiones sociales. Y eso sin el desfile es muy difícil de contar”, explican.
“En un desfile se habla de muchas cosas, porque como diseñadores ofrecemos un punto de vista no solo con nuestra colección, también con el escenario o con la elección de los modelos. Hablamos del cuerpo, de los conceptos diversos de belleza, de la identidad, del género…”, comenta Ángel Vilda, alma máter de Brain & Beast, un veterano de la pasarela madrileña que también coincide en la necesidad de subir a una pasarela el trabajo de la moda de autor. “Es la forma de que los clientes entiendan mi punto de vista. Y como diseñador es un subidón de adrenalina. Pasa como en otras áreas culturales; el cine, para el actor y el espectador es estupendo, pero el teatro es magnífico”.
Sin embargo, la pasarela no será el único modo de demostrar el talento del diseño nacional. El pasado viernes dio comienzo la iniciativa complementaria a Cibeles, Madrid es Moda, con un autobús que paseó las colecciones de varios diseñadores por las principales arterias de la capital. “Es un modo de acercar la moda nacional al público y a la ciudad, de conectar el saber hacer de nuestra industria con los ciudadanos”, explica una de sus responsables, Pepa Bueno, directora ejecutiva de ACME. Madrid es Moda se extiende hasta el próximo martes 15, con presentaciones, conferencias y eventos en varios puntos de Madrid. “Nuestra misión es conectar la moda con calle. No solo con el autobús, que puede parecer más literal. También con la idea de unir a autores con grandes marcas o de crear espacios de debate e interacción”.