El compromiso vegano de la familia de Paul McCartney llega al colegio
El exbeatle y sus hijas, Stella y Mary, se unen a la campaña de PETA que reclama al gobierno británico un menú alternativo y sin carne en los comedores escolares
El compromiso vegano de la familia McCartney no tiene límites. El que fuera miembro de Los Beatles, Paul McCartney, y dos de sus hijas, la fotógrafa Mary y la diseñadora de moda Stella, se han unido a la campaña dirigida por el grupo animalista PETA en la que reclaman al gobierno británico que las escuelas del Reino Unido ofrezcan un menú alternativo en su...
El compromiso vegano de la familia McCartney no tiene límites. El que fuera miembro de Los Beatles, Paul McCartney, y dos de sus hijas, la fotógrafa Mary y la diseñadora de moda Stella, se han unido a la campaña dirigida por el grupo animalista PETA en la que reclaman al gobierno británico que las escuelas del Reino Unido ofrezcan un menú alternativo en sus comedores y los alumnos puedan optar a platos sin carne en su almuerzo.
La carta firmada por el rockero, de 78 años y sus dos hijas y que ha sido entregada al secretario de educación, Gavin Williamson, forma parte del proceso de consulta para la Estrategia Nacional de Alimentos, una revisión histórica del sistema alimentario británico. Según recogen varios medios ingleses, se trata de una oportunidad para revisar las Normas Alimentarias Escolares, que hacen obligatorio servir pescado, carne y lácteos en sus comedores y busca permitir que las escuelas sean más flexibles en sus menús alimenticios. “Nadie necesita comer carne, por lo que no debería ser obligatorio servirla en las escuelas. Es hora de revisar los estándares de alimentos escolares para ayudar al planeta, salvar animales y promover una alimentación saludable”, dicen los McCartney, fundadores en 2009 del movimiento #MeatFreeMonday (Lunes libres de carne), una iniciativa que adquirió mayor protagonismo hace unos años, cuando de nuevo Paul y sus dos hijas se unieron al documental One Day a Week, con la misma filosofía y en el que se concienciaba del impacto de la ganadería en el medioambiente.
Según PETA, en una encuesta realizada en 2019, el 70% de los escolares dijeron que les gustaría ver más opciones veganas en sus cafeterías. “A medida que el mundo enfrenta una doble crisis de salud y clima, hacerse vegano es una de las mejores cosas que los jóvenes pueden hacer por los animales, el planeta y su propia salud”, dicen desde la organización. La carta, también respaldada por Greenpeace y por la organización benéfica Royal Society for Public Health, argumenta que las normas son innecesariamente restrictivas. “Mientras se satisfagan las necesidades nutricionales, los caterings escolares individuales deben tener la libertad de decidir si desean incluir la carne y los lácteos en sus menús”.
La pasión por el veganismo de la familia McCartney nace de la influencia de la matriarca, Linda McCartney (fallecida de cáncer en 1998), quien fuera pionera en el activismo pro derechos de los animales. Fue bajo su influencia que el antiguo beatle se convirtió al vegetarianismo estricto en 1975, seis años después de casarse con la fotógrafa y música, y decidieron criar a sus hijos en un entorno sano, campestre y rodeados de animales de East Sussex (sudeste de Inglaterra).
A lo largo de los años, la prensa británica ha venido dando cuenta de las barbacoas veganas que el clan McCartney suele organizar con el patriarca Paul a la cabeza y que difunde para promover una vida más sana. La hija mayor del matrimonio, la fotógrafa Mary McCartney, ha aportado su granito publicando un libro de recetas veganas; y Stella McCartney ha hecho de su firma de moda todo un estandarte de la conciencia ecologista, pues desde que comenzó en la industria hace casi dos décadas en sus colecciones nunca han entrado el cuero, las pieles, las plumas o cualquier otro producto de origen animal. Sir Paul McCartney, por su parte, es un habitual en las campañas del grupo animalista PETA, un marco en el que conoció a sus segunda esposa, la exmodelo y activista Heather Mills, con quien tiene una hija, Beatrice. Tras la ruptura de este matrimonio, el músico volvió a casarse con su actual esposa, la americana Nancy Shevell, también convertida al veganismo.
La participación de Paul McCartney en esta campaña nacional llega después de que el artista pidiera “la paz en la Tierra” como único regalo por su 78 cumpleaños, celebrado el pasado 18 de junio. La leyenda de los Beatles volvió a unir fuerzas con PETA para alentar a sus seguidores a que vieran el videoclip Glass Walls, que grabó hace una década para la organización en defensa de los animales. “Lo llamamos así porque si los mataderos tuvieran las paredes de cristal, ¿quién querría comer carne?”, dijo el músico en referencia a cómo en muchos de estos centros se sacrifica de manera cruel y violenta a los animales. “Ya sea porque estás preocupado por las enfermedades que surgen de los mataderos, de los animales que sufren terriblemente y sin necesidad, o el impacto catastrófico de la industria cárnica en nuestro medioambiente, mira este breve vídeo y compártelo con tus amigos”, añadió McCartney en un vídeo publicado por la organización animalista.