Un militante de Vox se enfrenta a tres años de cárcel por vandalizar el mural feminista de Ciudad Lineal en Madrid

Un militante de Vox, Luis Felipe Ulecia, se enfrenta a una petición fiscal de tres años de cárcel por participar presuntamente en el destrozo del mural feminista del distrito madrileño de Ciudad Lineal la madrugada del lunes 8 de marzo de 2021, coincidiendo con la celebración del Día de la Mujer. El famoso mural, titulado La unión hace la fuerza y pintado por ...

Un militante de Vox, Luis Felipe Ulecia, se enfrenta a una petición fiscal de tres años de cárcel por participar presuntamente en el destrozo del mural feminista del distrito madrileño de Ciudad Lineal la madrugada del lunes 8 de marzo de 2021, coincidiendo con la celebración del Día de la Mujer. El famoso mural, titulado La unión hace la fuerza y pintado por colectivo Unlogic Crew, amaneció aquel día con unos manchurrones de pintura negra que cubrían los rostros de muchas de las 16 mujeres homenajeadas, entre las que se encuentran Rigoberta Menchú, Rosa Parks o Frida Kahlo. En el lugar, dejaron un manifiesto en el que un grupo de radicales llamado Revolutio, una organización juvenil que comparte mensajes de Vox en redes sociales, se atribuía la acción. En la nota, tildaban el feminismo de “una de las bestias negras de nuestro tiempo”.

En sus conclusiones provisionales, el fiscal considera estos hechos constitutivos de un delito contra la dignidad y un delito contra el patrimonio artístico. El juicio, en el que será el único acusado, se celebrará el próximo mes de febrero, según han informado fuentes jurídicas. El acusado no es un militante de base más, sino que fue vicesecretario de Juventudes del partido que lidera Santiago Abascal y ocupó el puesto 12 de Vox en la lista al Ayuntamiento de Madrid en las anteriores elecciones municipales.

Tras conocer la noticia, la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, ha recordado que el mural “es una expresión de la sociedad civil y se tiene que preservar porque la defensa de la igualdad se tiene que hacer todos los días del año al ser un principio constitucional”. “Lo importante es que los hechos que se denunciaron sabemos que efectivamente eran objeto de delito”, ha declarado Maroto, para quien la igualdad “debería unir a todas las fuerzas políticas”.

Una de las principales pruebas de cargo contra el procesado es que la pintura usada fue adquirida por una de sus tarjetas bancarias, según fuentes próximas a la investigación. Los hechos, señala el escrito, “se produjeron tras una discusión política en el seno del distrito de Ciudad Lineal”, donde el 21 de enero de 2021 el concejal de Vox Miguel Moisés Rodríguez presentó una proposición para eliminar el mural y sustituirlo por otro que representase a deportistas paralímpicos. La proposición fue aprobada con los votos a favor de PP y de Ciudadanos. Los vecinos se movilizaron inmediatamente para tratar de salvar el mural, mientras el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, se pronunció a favor de borrar a las mujeres, pero días después, en medio de una vorágine de críticas, cambió de opinión.

La polémica continuó una semana después cuando, en el pleno de Cibeles del 26 de enero, Ciudadanos también cambió de postura y votó a favor de una moción de urgencia de Más Madrid, que salió adelante con el voto favorable del PSOE, para mantener el mural feminista original. La entonces vicealcaldesa, Begoña Villacís, abanderó la nueva postura de su partido con respecto al mural y desautorizó así al que en aquel momento era el concejal presidente de Ciudad Lineal, Ángel Niño (Ciudadanos).

Según el fiscal, el acusado “con evidente desprecio hacia las mujeres, coadyuvó en el tachado con pintura negra sobre las imágenes de todas las mujeres que aparecían representadas en el mural feminista, de titularidad municipal”, ubicado en el centro deportivo municipal La Concepción, en el número 5 de la calle José del Hierro. Dicho mural “fue creado para dar visibilidad a algunas mujeres relevantes de la historia y como muestra del rechazo a la violencia de género”. El Ayuntamiento lo consideró de valor artístico o cultural, con un coste de elaboración de 10.065,15 euros, sin que ese haya renunciado a la indemnización que le pudiera corresponder.

“La acción de vandalización alcanzó una gran repercusión en los medios de comunicación”, recuerda el escrito del fiscal. La noticia fue recogida en todos los diarios, televisiones y radios nacionales y hasta el rotativo británico The Guardian se hizo eco con una crónica de su corresponsal en España. El fiscal considera que “por su evidente naturaleza degradante y despreciativa, constituye un atentado a la dignidad de las mujeres destinatarias y del colectivo en el que se integran”. Además de la pena de cárcel, la Fiscalía pide que el acusado no pueda votar durante el tiempo de condena y que no pueda ejercer profesión u oficio educativos en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre durante seis años. Y que pague una multa de casi tres mil euros y que indemnice al Ayuntamiento de Madrid en 10.065 euros por los desperfectos ocasionados en el mural.

Cinco meses con las manchas negras

El mismo día en el que ocurrieron los hechos, el Ayuntamiento se comprometió a restaurar la obra. “Condeno firme y sin paliativos lo que ha sucedido en el mural. La intolerancia no cabe en la ciudad de Madrid. El compromiso del Ayuntamiento es devolver el mural al estado en el que estaba”, señaló el alcalde. Sin embargo, cuatro meses después, las caras de las mujeres seguían tapadas por pintura negra mientras el mural se multiplicaba con más de 60 copias por todo el país. Primero fue Puente Genil (Córdoba), al que siguieron Cádiz, Tarragona, Lorca (Murcia), Soria, Salamanca, el municipio castellonense de Geldo... y también muchas ciudades de la región, como Rivas-Vaciamadrid, Alcorcón, Alcalá de Henares y Getafe. Al igual que le sucedió al original, el mural de Alcalá y el de Getafe también fueron destrozados.

Los artistas que lo pintaron dedicaron sus fines de semana a viajar a otras provincias para hacer réplicas y, como no daban abasto, dieron permiso para que todo el que quiera lo imite. “Nos llegan fotos de toda España, e incluso propuestas del extranjero, de Japón, Perú...”, contó a este diario Jorge Nuño, uno de los ocho artistas de Unlogic Crew. En respuesta a los vándalos, fueron apareciendo en el muro algunos mensajes como “la unión nos hace fuertes”, “ahora vuestras manos son tan negras como vuestro corazón” o “cromañón, tu siglo ya pasó”.

El mural decora una pared exterior del polideportivo de este barrio de pisos obreros en el este de Madrid. Hasta 2018, la pared, de 60 metros de largo por cuatro de alto, era verde. Inspirados por un mural feminista que habían visto en Vigo, unos vecinos promovieron la idea de cubrir el polideportivo con un mensaje constructivo, que fue aprobada en mayo de 2018 en el pleno de Ciudad Lineal, antes de que Vox obtuviera representación en el Ayuntamiento. En la plataforma online Decide Madrid, los vecinos pudieron votar entre dos diseños y de las mujeres notables derrotó a otro de unas mujeres quitándose una venda. Sus autores, ayudados por decenas de niños y padres, tardaron nueve días en hacerlo y fue concluido el 7 de octubre de 2018.

Gracias a la presión de los vecinos del distrito y a la movilización social, finalmente, el mural original fue restaurado el 26 de agosto de 2021 por el mismo colectivo Unlogic Crew que lo pintó y se le dio un barniz antipintadas para repararlo fácilmente en el caso de que se vandalice de nuevo.

Suscríbete aquí a nuestra newsletter diaria sobre Madrid.