“La Olimpiada Informática Femenina ayuda a romper con la brecha digital”
La madrileña Victoria Durán ha sido finalista de esta competición, centrada en incentivar a las estudiantes y a reducir las diferencias de género desde la escuela
Victoria Durán (Madrid, 18 años) es una amante “desde siempre” de las matemáticas y la informática, gracias al referente de su hermano y de uno de sus profesores del Colegio Alemán de Madrid, el señor Hess. No tenía suficiente con afrontar la selectividad y segundo de Bachillerato, que decidió presentarse a la primera edición de la Olimpiada Informática Femenina, en la que sus participantes tienen que enfrentarse a problemas de programación. “Me apunté para probar, aunque yo me iba a centrar más en el colegio”. Sin embargo, pasó las primeras fases ...
Victoria Durán (Madrid, 18 años) es una amante “desde siempre” de las matemáticas y la informática, gracias al referente de su hermano y de uno de sus profesores del Colegio Alemán de Madrid, el señor Hess. No tenía suficiente con afrontar la selectividad y segundo de Bachillerato, que decidió presentarse a la primera edición de la Olimpiada Informática Femenina, en la que sus participantes tienen que enfrentarse a problemas de programación. “Me apunté para probar, aunque yo me iba a centrar más en el colegio”. Sin embargo, pasó las primeras fases y acabó segunda lo que le ha dado un billete para representar al equipo nacional que participará en la Olimpiada Europea en junio, y dar un paso más para derribar la brecha digital de género.
¿De dónde le viene ese amor por la informática y las matemáticas?
Yo hago concursos de matemáticas igual que mi hermano mayor, que ha sido mi referente. Cuando entré en quinto, mi profesor Hess era muy bueno porque nos dedicaba mucho tiempo. Nadie le pagaba nada y siempre estaba dispuesto a ayudarnos y motivarnos. Además, estaba en contacto con los que organizaban concursos y nos incentivaba mucho a participar en estos eventos. Había una asignatura extraescolar de matemáticas que te preparaba para estos concursos y me apunté con amigos. Era muy divertido, porque nos juntábamos todo el equipo y después de entrenar nos íbamos a comer pizza. No es lo mismo empezar solo que así, sobre todo al ser pequeños. Mi hermano también lo hacía y eso me motivaba al ver a los más mayores.
¿Cómo se siente con este billete a la Olimpiada Europea?
No me lo esperaba. Me apunté por apuntarme y cuando vi que había resultados no me lo creía, porque tampoco entreno demasiado. La semana antes del concurso me paso como cuatro horas al día, pero el resto de semanas si tengo mucho lío en el colegio pues hago mucho menos.
¿Cómo practica?
Nos dan un archivo Excel que incluye diferentes problemas que tenemos que seguir. También hacemos concursos cada cierto tiempo. De momento me está costando llevarlo al día, pero ya en mayo, cuando acabe los exámenes, todo irá mejor. Hay la posibilidad de tener clases por internet. Vamos, que no tienes tiempo de aburrirte.
¿Qué quiere estudiar el próximo año?
Matemáticas. Me gusta la programación pero no tanto los sistemas operativos. Aun así, no descarto hacer algo profesional en el futuro, lo bueno es que lo he aprendido y seguro que me sirve. En un futuro no saber de informática será casi como ser analfabeto.
¿Ha participado en otros concursos, como la Olimpiada de Matemáticas?
Sí, pero son muy difíciles porque hay más nivel. En el colegio hay muchos concursos raros de estos alemanes. Por ejemplo, de música solemos quedar bien; también hay de debate. Si quieres participar siempre hay algo a lo que te puedes apuntar y eso está bien porque así es una manera divertida de aprender. Te acercan a diferentes materias de otra manera. Las mates o la física del cole pueden ser aburridas. Por otro lado, está la diversión y apuntarse en grupo con amigos. Al final pasas mucho tiempo con ellos porque en algunos concursos tienes que buscar equipo.
¿Se apunta con alguien más?
A mí me ayudó mucho que mi amiga Jimena Lozano se apuntase conmigo en los primeros concursos que hice de matemáticas. Es una crack de matemáticas y está en la Europea de chicas de matemáticas. También está el grupo de los chicos. Antes, en la clase especial de mates dedicada a competir éramos 20 y ahora solo quedamos tres.
¿Por qué cree que existe la brecha digital de género?
Creo que viene de antes. Se ve que hay muchos más chicos que chicas. Pero creo que es porque cuando son más pequeños tú ves a los mayores como referentes y desgraciadamente los científicos más conocidos son hombres. Pero creo que la tendencia está cambiando. Muchas de mis amigas quieren estudiar carreras de ciencias.
¿Cree que puede ayudar a las mujeres a estudiar más carreras científicas?
Esta iniciativa de la Olimpiada Informática Femenina ayuda a romper con esa brecha digital, aunque todas las que estamos apuntadas ya conocíamos lo que eran y nos atraen estas materias. Lo bueno es que hay algunas de primero de secundaria que se apuntan en un grupo. Eso sí que puede ayudar a que otros conozcan estas carreras científicas.
Evitar la brecha digital de género
Solo el 12% de estudiantes de grados relacionados con Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en España son mujeres, frente al 19% de la media de la OCDE, según los últimos datos recogidos en el informe Panorama de la Educación 2017. Victoria Durán considera que es muy importante incentivar a los estudiantes desde jóvenes: “No es obligatorio que le guste a la gente, pero el problema es que muchos lo ven como una obligación y pérdida de tiempo porque no ven lo útiles que son”.