El casting de Ayuso para un posible nuevo Gobierno: ascensos internos, fichajes y cambios en carteras clave

La previsible salida de al menos cinco de sus nueve actuales consejeros obligará a Isabel Díaz Ayuso a un cambio de alineación casi total en el Gobierno de la Comunidad de Madrid si logra mantener el poder tras las elecciones del 28 de mayo. La actual presidenta, y líder del PP, ha decidido enviar al Ayuntamiento de...

La previsible salida de al menos cinco de sus nueve actuales consejeros obligará a Isabel Díaz Ayuso a un cambio de alineación casi total en el Gobierno de la Comunidad de Madrid si logra mantener el poder tras las elecciones del 28 de mayo. La actual presidenta, y líder del PP, ha decidido enviar al Ayuntamiento de la capital a los titulares de Cultura, Turismo y Deporte (Marta Rivera de la Cruz), Transportes e Infraestructuras (David Pérez), y Administración Local y Digitalización (Carlos Izquierdo), que han sido incluidos en la lista electoral que encabeza José Luis Martínez-Almeida. En paralelo, el consejero de Justicia e Interior, Enrique López, se ha dado de baja como afiliado del PP para poder volver al derecho. Y a la cara visible de la Sanidad, Enrique Ruiz-Escudero, le espera el Senado. Para el cambio de alineación, que en el caso de Ayuso supone romper la dinámica continuista que ha mantenido desde que llegó al poder ―hasta ahora solo había cambiado a un consejero nombrado por el PP―, la líder conservadora ha evaluado el ascenso de cargos intermedios de la Administración y nuevos fichajes.

“He estado durante cuatro años analizando a cada persona que he conocido en reuniones, en distintos encuentros, profesionales, viceconsejeros, directores generales, afiliados, no afiliados”, advierte la presidenta de la Comunidad de Madrid, que lleva diseñando su posible nuevo Gobierno desde que ganó la guerra civil que le enfrentó en 2022 con Pablo Casado, entonces presidente del PP, y que dejó sentenciados a los tres consejeros madrileños que no le explicitaron su apoyo (Pérez, López e Izquierdo).

“Pondré al frente de la Comunidad, si los madrileños me dan su confianza, al mejor equipo, después de cuatro años de experiencia, de dificultades y de conocimiento profundo de la Administración de Madrid”, añade la líder conservadora, que en 2019 tuvo que configurar su Ejecutivo en coalición con Ciudadanos y bajo la influencia de la dirección nacional, de la que se desprendió para el Gobierno de 2021, y a la que ahora dará manos libres Alberto Núñez Feijóo.

Entre los cargos intermedios con posibilidades de ascender están dos políticos de larga trayectoria en el PP que pertenecen al núcleo duro de la presidenta desde mucho antes de que diera el salto a la primera línea política: Carlos Díaz-Pache, actual viceconsejero de Transportes e Infraestructuras, y José Antonio Sánchez, viceconsejero de Administración Local y Digitalización. En buena posición se encuentra también otro político con responsabilidades en el actual Gobierno, como Miguel Ángel García, viceconsejero de Presidencia y gran conocedor de las entrañas de la Administración.

En el PP, además, se ha visto con sorpresa que tres candidatos a alcalde hayan sido incluidos en la lista de la Asamblea que encabeza Ayuso: Ana Millán (Arroyomolinos), Ignacio Vázquez (Torrejón), y Jesús Moreno (Tres Cantos). Aunque una fuente que cuenta con la confianza de Ayuso niega tajantemente que eso deje abierta la posibilidad de que abandonen la política municipal, y pasen al Gobierno, salto al que ya optó Millán en años precedentes, en los chats de los diputados conservadores todos se han lanzado a hacer quinielas.

“Lo que nos dicen es que en el PP de Torrejón todos saben que Vázquez se va a ir al Gobierno”, resume una fuente del PP, pese al desmentido oficial en plena campaña de las municipales, que retrata una confusión interna con la que contaba Ayuso y que incluso ha fomentado. La presidenta ya advirtió de que no figurar en las listas no implicaba que no se fuera a ser consejero, e incluso explicitó su preferencia porque los nuevos titulares de su posible Gobierno renunciaran al acta de diputado.

Además, con la baja de Rivera de la Cruz, en las filas conservadoras también se espera un guiño a los votantes de Cs, como el que ha representado en la lista del PP para la Asamblea la inclusión en el número 20 de Patricia Reyes, exdiputada naranja y actual directora de Igualdad de la Comunidad de Madrid. ¿Y los actuales consejeros? En realidad, nada garantiza tampoco su continuidad en el Gobierno, ni, en su caso, en las actuales carteras.

Enrique Ossorio, el número dos del Gobierno, y encargado de elaborar el programa electoral, ha sufrido el desgaste inherente a la portavocía gubernamental al pasar de una polémica a la siguiente (desde su negación de que hubiera pobres en la región al cobro del bono social térmico). “Estará a lo que la presidenta le diga”, sentencia una fuente popular sobre la posibilidad de que se le ofrezca la presidencia de la Asamblea regional.

Javier Fernández-Lasquetty, titular de Economía, Hacienda y Empleo, ha culminado en estos cuatro años un agresivo programa de recortes impositivos, tiene la tarea pendiente de rebajar otro medio punto todos los tramos del IRPF la próxima legislatura, y solo se ve en la política autonómica.

Paloma Martín, que está al frente de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, es considerada por Díaz Ayuso como un todoterreno capacitado para afrontar las tareas más complejas, como por ejemplo la de Sanidad.

Y Concepción Dancausa, que tiene la responsabilidad de Familia, Juventud y Política Social, lleva apenas dos años en el cargo, y ha sido, junto con Izquierdo, la única incorporación al Ejecutivo de Ayuso con respecto a la alineación inicial de 2019.

En el PP comparan la elaboración de las listas electorales con un sudoku. La persona encargada de resolver gran parte de ese reto matemático ha sido Alfonso Serrano, el secretario general del PP de Madrid. Es la mano derecha de Díaz Ayuso, según definición de la propia presidenta. De que mantenga o no las riendas del partido, como parece previsible, dependerá mucho de la alineación de un posible próximo Ejecutivo.

Pero ese no es el único puesto que puede provocar un efecto dominó. La única consejera de la que ha prescindido Díaz Ayuso desde 2019 es Eugenia Carballedo, catapultada a presidenta de la Asamblea sin que mediara destitución, pues su salida del Gobierno coincidió con el inicio de la legislatura 2021-2023. Que continúe o no en ese puesto será clave en el diseño final del equipo de Díaz Ayuso en el caso de que retenga el poder.

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