La Comunidad Valenciana, a la cola de inversión ejecutada

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, se ha lanzado esta semana a celebrar el primer aniversario de las elecciones en las que el PP, con el apoyo de Vox, arrebató el Gobierno autonómico a la izquierda progresista (socialistas, Compromís y Podem) que formaba el Botànic. A Mazón se le ha llenado la boca de orgullo por “el cambio” y ha hecho balance de lo realizado. Han sido muchas palabras y discursos...

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, se ha lanzado esta semana a celebrar el primer aniversario de las elecciones en las que el PP, con el apoyo de Vox, arrebató el Gobierno autonómico a la izquierda progresista (socialistas, Compromís y Podem) que formaba el Botànic. A Mazón se le ha llenado la boca de orgullo por “el cambio” y ha hecho balance de lo realizado. Han sido muchas palabras y discursos pero los datos reflejan cómo la valenciana es la administración autonómica que menos presupuesto de inversiones ha ejecutado durante el primer trimestre del año. Así lo indica la información publicada por el Ministerio de Hacienda sobre ejecución presupuestaria que señala que, del capítulo seis, el que corresponde a inversiones reales, la Generalitat solo ha gastado 5,7 millones de los 1.700 previstos en las cuentas para todo el año. Esto supone un porcentaje del 0,33% de las inversiones reales ejecutadas en estos tres meses, un dato muy lejano al 5% de la media de ejecución de las comunidades autónomas.

Por encima de ese porcentaje sobresale Andalucía, que ya ha ejecutado un 13,40% de las inversiones presupuestadas para todo el año. Le siguen Murcia y Castilla y León con unos índices que superan el 7%. No hay ni una autonomía que haya comprometido, porcentualmente, menos que la valenciana. Solo Extremadura se aproxima con un gasto del 1,33% de las inversiones previstas para 2024.

Los datos que publica el ministerio son aportados por cada departamento de Hacienda de las propias administraciones autonómicas y estos indican que, pese al escaso montante comprometido para gastos, la Generalitat tampoco se sitúa entre las mejores pagadoras. Mientras que la media de la ejecución de los pagos sobre esas obligaciones reconocidas es del 64,1%, la Comunidad Valenciana se queda en un 57,09%. Madrid, por ejemplo, ha invertido, de momento, solo el 3,98% de su presupuesto pero es la mejor pagadora ya que ya ha abonado el 98,14% de lo comprometido.

El propio ministerio recoge en una nota aclaratoria que la Generalitat está implantando un nuevo sistema informático y que algún dato podría estar desactualizado. Sin embargo, en la información segregada que publica la propia Generalitat se percibe como hay consejerías con datos más acordes a lo que debería ser la ejecución después de un trimestre y otros que se encuentran muy atrás. Esta información avala así la parálisis y no solo en inversión. En el global presupuestario (que además de inversiones incluye gastos de personal, transferencias y gastos financieros, entre otros) en la mitad de las consejerías la ejecución global no llega al 10%, transcurridos ya cuatro meses, puesto que la Generalitat ofrece los datos a 30 de abril desde el viernes. Los datos indican que el esfuerzo inversor ha aumentado algo en este último mes, del 0,33 al 2,87%.El peor es el departamento impulsor de la economía y de apoyo a las empresas, como es el de Innovación, Industria y Comercio, con solo el 4,02%.

Este fue uno de los reproches, este jueves en las Cortes, del portavoz socialista, José Muñoz, al propio Mazón después de la celebración que el PP montó el día 28. “Déjese de fiestas y póngase a trabajar”, le sugirió. Hace un año, con el Gobierno del Botànic la ejecución del capítulo de inversiones era del 6,88% sobre un presupuesto total mayor que el actual. Así, el Consell progresista, a 30 de abril, había ejecutado 2,6 veces más, o un 158% más que el Ejecutivo del PP y Vox.

La respuesta de Mazón, a modo de balance, se dio a lo largo de dos intervenciones. En ellas habló de la supresión de impuestos, la eliminación de la tasa turística y la aprobación de desgravaciones fiscales, medidas que suponen una mengua de ingresos en las arcas públicas. En Sanidad, habló de la salida del “colapso” y de la reducción de las listas de espera de prioridad 1 (aquellas que precisan intervención en un plazo máximo de 30 días) en un 52% y un plan de salud mental presupuestado, que aún no se ha implantado. Pese a ello, la ejecución de las inversiones previstas por Sanidad, tal como admite la propia Generalitat a fecha 30 de abril, es del 0,49%, es decir, que solo se ha comprometido con un gasto de 2,8 millones.

Carlos Mazón habló también en las Cortes de varios comités, el de cooperación autonómica y el que ha de diseñar un plan de choque para Ford, ambos sin dotación, y de la apuesta por la investigación con un convenio para atraer talento ( 6,2 millones de euros más al año para salarios). En Educación, mencionó como medida destacada en el balance la aprobación de la educación gratuita de cero a tres años, que de momento no ha supuesto ningún gasto, y la “libertad educativa”. La única inversión que mencionó en la primera de sus intervenciones fue la de una adjudicación de un tramo del postrasvase Júcar-Vinalopó, de 33 millones de euros. Cuando volvió a tomar la palabra solo acertó a decir “avanzamos en inversiones”.

La agenda de Mazón siempre está completa. Esta semana ha ido a la presentación de la fase de grupos de la final de la Copa Davis, al almuerzo organizado por el Ayuntamiento de Xirivella con motivo de la Setmana de la Gent Major, al homenaje a los 181 profesionales que finalizaron su labor profesional el año pasado en La Fe, donde se arrancó a cantar, y se ha reunido con la asociación de amigos del Corpus y también con el presidente del Instituto valenciano para el estudio de la empresa familiar. El presidente de la Generalitat no tiene reparo en intervenir para hablar de gratitud y promesas y, sobre todo, de reivindicaciones. Porque si algo llena las intervenciones de Carlos Mazón son las peticiones y los reproches al Gobierno de Pedro Sánchez. “Ya no nos callamos”, ha dicho esta misma semana, pese a sus quejas con las mismas que cuando estaba en la oposición.

El dirigente del PP habla, en esa evaluación de su primer año victorioso, de las cinco proposiciones de ley presentadas por PP y Vox como símbolo del cumplimiento del “programa del cambio”. Son las normas sobre la llamada “libertad educativa”, la que regulará la televisión autonómica À Punt, la ley de Transparencia, la de concordia, que suplirá la de Memoria Histórica, y la de Antifraude. De momento, no se sabe si precisarán inversión.

El portavoz de Vox en las Cortes, José María Llanos, también salió a la palestra el jueves a defender la gestión en los departamentos que les entregó el PP: Cultura, Agricultura y Justicia. La inversión ejecutado en estas consejerías es del 2,13% en el caso de Cultura, el 0% en Agricultura y el 7,28% en Justicia.