El Govern activa el aviso preventivo de contaminación atmosférica en Barcelona
Las autoridades recomiendan evitar las actividades exteriores en 81 municipios del Área Metropolitana y el Vallès
La Generalitat de Cataluña ha activado a través del Departamento de Territorio un aviso preventivo por contaminación atmosférica por niveles elevados de partículas de diámetro inferior a 10 micras (PM10) en el ambiente atmosférico del Área de Barcelona. La media de los niveles de PM10 del martes fue superior al valor de 50 µg/m³ en diversas estaciones de medición del Área de Barcelona y Vallès-Baix Llobregat. La previsión a 24 horas indica que los niveles podrían superar de nuevo este umbral este miércoles, dado que se prevé que la intrusión de polvo africano se mantenga.
A través de sendos comunicados, el Departamento y el Ayuntamiento de Barcelona recomiendan evitar desplazarse en vehículo privado y que se utilice el transporte público, o moverse a pie o en bicicleta; y en caso de no poder evitarlo, compartir coche o conducir de manera eficiente. El consistorio añade la recomendación de regular la climatización en los hogares, y que las personas especialmente sensibles a la contaminación muevan sus rutinas deportivas a la noche, cuando las concentraciones de partículas son inferiores.
El ayuntamiento barcelonés ha puesto en marcha diversas actuaciones como regar más intensivamente las calles con tráfico, evitar sopladores y regar parques no asfaltados, así como avisar a las obras en marca que cumplan los requisitos ambientales.
Las PM10 son pequeñas partículas sólidas o líquidas que flotan en el aire, y hasta un 40% de ellas están generadas por los motores, neumáticos y frenos de los vehículos, mientras que el resto provienen de obras, demoliciones y en algunos casos, de nubes de polvo sahariano.
La Agencia de Salud Pública de Cataluña alerta de que según la duración de la exposición a las partículas, “se puede producir un riesgo para la salud de las personas”. Los efectos sobre la salud pueden ser el aumento de afecciones respiratorias y cardiovasculares, como el agravamiento del asma y los síntomas respiratorios. El colectivo más vulnerables a estos efectos son las personas con enfermedades respiratorias o del aparato circulatorio, bebés, niños en edad preescolar y mujeres embarazadas.