El aumento de las infecciones respiratorias obliga a reprogramar cirugías en al menos cuatro hospitales catalanes

La gripe ya tiene efectos directos en la capacidad asistencial de Cataluña. Al menos cuatro hospitales catalanes han tenido que desprogramar en estas fechas parte de su actividad quirúrgica para atender a los enfermos de gripe y covid. El hospital del Mar de Barcelona, el Arnau de Vilanova de Lleida y el de Badalona (BSA), según ha podido saber EL PAÍS, han tenido que reagendar intervenciones no urgentes para atender a ...

La gripe ya tiene efectos directos en la capacidad asistencial de Cataluña. Al menos cuatro hospitales catalanes han tenido que desprogramar en estas fechas parte de su actividad quirúrgica para atender a los enfermos de gripe y covid. El hospital del Mar de Barcelona, el Arnau de Vilanova de Lleida y el de Badalona (BSA), según ha podido saber EL PAÍS, han tenido que reagendar intervenciones no urgentes para atender a los pacientes que llegaban a urgencias con virus respiratorios. Lo mismo está ocurriendo en otros centros hospitalarios más pequeños como el de Palamós, según avanzó TV Costa Brava. En total, al menos son unos 40 casos aproximadamente. “La desprogramación es mucho menor en comparación a la actividad habitual diaria”, defienden fuentes del Departamento de Salud.

El consejero de Salud, Manel Balcells, admitió la afectación pero remarcó que el sistema sanitario catalán ni sufre “saturación ni colapso”, sino “presión asistencial”: “Es una situación puntual y no significativa, y estas operaciones programadas se realizarán más adelante. Se han desprogramado intervenciones no urgentes”, subrayó en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu del Ejecutivo catalán. Cataluña tiene una tasa de 900 casos de infección respiratoria aguda (IRA por sus siglas, que engloba la gripe, la covid y otros virus respiratorios), una cifra similar a la media española la semana pasada, a la espera de nuevos datos comparativos. Los profesionales sanitarios esperan alcanzar el pico de infecciones en los próximos días, en los que las temperaturas descenderán drásticamente.

Tras las vacaciones de los profesionales sanitarios y la interacción social de las fiestas, los hospitales han tenido que tomar medidas para afrontar la epidemia de gripe. “Ha sido un cúmulo de factores que ha llevado a tener que reorganizar la actividad quirúrgica”, explica el gerente de la Región sanitaria de Girona, Jaume Heredia. La baja vacunación también ha afectado al auge de los virus. El propio consejero ha atribuido la baja cobertura vacunal contra la gripe (la menor de los últimos cuatro años) a un “cierto cansancio epidémico” y a una relajación de la ciudadanía ante el peligro.

Los hospitales, explica Heredia, han sustituido aquellas intervenciones que implican días de ingreso por aquellas que no, lo que ha permitido ganar 50 camas en la región gerundense. En el hospital de Palamós, sin embargo, la epidemia ha impedido esta posibilidad. “En Palamós, donde la ocupación habitualmente ya es muy elevada, no se ha podido hacer estas sustituciones como en el resto de centros y hasta día de hoy se han anulado una decena de intervenciones”, admite el gerente. Este centro, con 133 camas disponibles, atiende de media a unos 60 pacientes de medicina interna y ahora tiene más de 90 pacientes ingresados. “Es un crecimiento muy importante”, ha indicado el responsable.

Heredia ha asegurado que las intervenciones urgentes y las oncológicas “están garantizadas”, pero que la epidemia de virus respiratorios ha obligado a los centros a “adaptarse a esta nueva situación”. “La prioridad es la atención a los pacientes con insuficiencia respiratoria”, ha insistido. Además, el gerente ha destacado que “gracias a la campaña de inmunización del virus respiratorio sincitial, casi no estamos teniendo niños ingresados y estas camas las estamos utilizando para pacientes con patología respiratoria aguda”.

Los virus respiratorios también se han hecho evidentes en el CUAP Güell de Girona. El centro ha llegado a atender a unas 500 personas en un día, cuando en un fin de semana se atienden a unos 250 pacientes. Heredia ha sostenido que esperan que se llegue al pico entre finales de esta semana y principios de la que viene y que en dos o tres semanas se pueda recuperar la normalidad en los hospitales gerundenses.

Cambio de planes

Por otra parte, Balcells ha explicado que el Govern plantea que las bajas automáticas de tres días autojustificadas sean únicamente una medida puntual para momentos de tensión asistencial por epidemia de gripe, pero ha descartado que se instauren de forma permanente. “No lo planteamos de forma permanente, ni mucho menos”, ha señalado el consejero.

Balcells ha defendido recuperar esta medida tan solo “puntualmente” en épocas de epidemia y posible saturación, no de forma permanente, como ha dicho que está estudiando la ministra de Sanidad, Mónica García. “No coincidimos con la propuesta de la ministra”, ha asegurado Balcells, que a su vez ha señalado que este “matiz” necesitaría el visto bueno de sindicatos y agentes económicos. Asimismo, ha recordado que la medida de las autobajas es una regulación estatal para la que se necesita cobertura legal suficiente y no se puede llevar a cabo por decreto de la Generalitat de Cataluña.

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