Trias avala repetir con el PSC el pacto de la Diputación de Barcelona pese a la investidura de Collboni

Tras una semana de tensión sobre el desenlace final de la alcaldía de la capital catalana, los focos ahora se posan sobre la Diputación de Barcelona. Allí gobierna un Ejecutivo formado por el PSC y Junts y, durante la campaña electoral del 28-M, fueron muchas las voces de ambos partidos que apostaban públicamente por revalidar esa mayoría. La bomba del pasado sábado,...

Tras una semana de tensión sobre el desenlace final de la alcaldía de la capital catalana, los focos ahora se posan sobre la Diputación de Barcelona. Allí gobierna un Ejecutivo formado por el PSC y Junts y, durante la campaña electoral del 28-M, fueron muchas las voces de ambos partidos que apostaban públicamente por revalidar esa mayoría. La bomba del pasado sábado, con Xavier Trias viendo como el socialista Jaume Collboni le arrebataba la vara de alcalde con una suma alternativa, dejaba en el aire ese entendimiento pero en menos de 48 horas las cosas parecen volver al punto de partida. De criticar “la injerencia del Estado” y el “el control a los independentistas″ en el Ayuntamiento de la capital catalana, Trias ha pasado este lunes a avalar un pacto en ese ente provincial. El líder de Esquerra, Oriol Junqueras, ha pedido que no se dé la presidencia allí al PSC aunque al mismo tiempo ha asegurado que no dará reversa a los pactos que tiene con la formación de Collboni en las demarcaciones de Tarragona y Lleida.

Trias ha asegurado, en una entrevista en RAC-1, que confía en los líderes socialistas Núria Marin (alcaldesa de L’Hospitalet) y Antoni Balmón (de Cornellà) para poder llegar a un acuerdo en la Diputación y reeditar el Ejecutivo actual. “Son dos personas que no me han enredado nunca”, ha explicado el exalcalde. Trias ha intentado así contraponer a esos dos barones del socialismo catalán con el actual alcalde de la ciudad, Jaume Collboni. Se trata de unas declaraciones que, además, llegan un día después de que el propio concejal electo dijera ante el consejo nacional de su partido que había pedido convertir el 23-J en una votación contra el PSC, comunes y el PP. “Tenemos que decir que ya basta. No estamos dispuestos a que nos humillen y nos maltraten y cada día nos hagan más dependientes”, había afirmado.

Por su parte, la portavoz del PSC, Elia Tortolero, solo ha tenido buenas palabras para el pacto que ha mantenido en los últimos cuatro años con Junts. “Estamos muy contentos y hacemos una valoración muy positiva de loque ha sido el gobierno de la Diputación de Barcelona con Junts”, ha dicho en la rueda de prensa de este lunes. El PSC puede jugar con la aritmética en la Diputación de Barcelona, donde la mayoría absoluta es de 26 votos. Los socialistas obtuvieron 17 escaños, mientras que Junts logró 12 y ERC ,11. Los socialistas podían así sumar a lado y lado del independentismo, pero tras lo sucedido el sábado en el Ayuntamiento de la capital era posible pensar en otras mayorías contando con comunes y el PP.

En el ente provincial no opera la salvaguarda de la lista más votada y en segunda ronda es elegido presidente quien obtenga más votos. Junts y ERC sólo podrían salirse de la suya si el diputado de Tot x Terrassa les apoyara y los comunes no apoyaran a los socialistas. Junqueras ha hecho un llamamiento para intentar cerrar esa mayoría alternativa, pero su tono daba a entender que considera más probable que la sociovergencia vuelva a repetirse. “La Diputación de Barcelona no puede tener una presidencia del PSC”, ha asegurado.

Junqueras ha cargado con contundencia contra el pacto que llevó a Collboni a la alcaldía y dejó a Trias y Ernest Maragall en la banqueta. “Cuando Barcelona vota, el Estado veta”, ha machacado en varias ocasiones. Pero los republicanos piensan usar ese agravio en su favor y por ello Maragall será candidato al Senado este 23-J. “Se trata de dar voz a los ciudadanos para que demuestren su rechazo al pacto de la vergüenza”, ha explicado el presidente de los republicanos. “Si ganamos un solo voto más con ello me doy por satisfecho”, ha apostillado el concejal barcelonés.

Para Junqueras, “PP, PSOE y Sumar son herramientas a favor del Estado y sus intereses”. Pero pese a la “agresión” y su invitación a que la ciudadanía la exprese en las urnas, los republicanos mantendrán los pactos en las Diputaciones de Lleida y Tarragona con el PSC. Esos pactos, conocidos la semana pasada, sentaron muy mal en Junts. Se mantendrán, ha dicho el exvicepresident, porque permiten que sea una fuerza independentista la que ostente la presidencia.

La Diputación de Barcelona, que presta servicios básicos a municipios muy pequeños y permite articular redes de control político local, también abre la puerta a un importante número de cargos eventuales y técnicos. Cada grupo político también tiene sus propios asesores: este mandato la lista asciende a 67 cargos (3,9 millones de euros en sueldos). En Gobierno provincial, el recuento es de 26 cargos (15 del PSC, el resto de Junts) y la factura de las retribuciones asciende a 1,9 millones.

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