Barcelona estrenará una ‘superilla’ literaria en el Sant Jordi de 2022
El Ayuntamiento establecerá un perímetro en las principales arterias de la ciudad durante el sábado 23 de abril para los vendedores de flores y libros
El sector del libro y de las flores, junto con el Ayuntamiento de Barcelona, han resuelto crear una ‘superilla’ literaria para celebrar el Sant Jordi de 2022. El Consistorio dispondrá un perímetro de 140.000 m2 en el centro de Barcelona que cortará el tránsito de vehículos el sábado 23 de abril desde la Diagonal hasta Gran Via y de Balmes a Pau Claris, con la excepción de las calles Valencia y Aragón. El paseo de Gràcia quedará reservado para las paradas de libros y rosas. La apuesta, según han coincidido este lunes los repr...
El sector del libro y de las flores, junto con el Ayuntamiento de Barcelona, han resuelto crear una ‘superilla’ literaria para celebrar el Sant Jordi de 2022. El Consistorio dispondrá un perímetro de 140.000 m2 en el centro de Barcelona que cortará el tránsito de vehículos el sábado 23 de abril desde la Diagonal hasta Gran Via y de Balmes a Pau Claris, con la excepción de las calles Valencia y Aragón. El paseo de Gràcia quedará reservado para las paradas de libros y rosas. La apuesta, según han coincidido este lunes los representantes de los sectores implicados en una rueda de prensa en el Palacio de la Virreina, pasa por recuperar la normalidad anterior a la pandemia.
El espacio reservado equivale a “20 campos de fútbol”, ha subrayado Jordi Martí, teniente alcalde de Cultura en el consistorio barcelonés. El encuentro, en el que también han estado presentes Patrici Tixis, presidente del Gremio de Editores de Cataluña, y Carme Ferrer, presidenta del Gremio de Libreros de esta misma comunidad, ha servido para definir la nueva propuesta a dos meses de Sant Jordi. La diada empezará a notarse durante los días previos: el 21 y el 22 de abril los establecimientos de venta de flores y libros ya podrán montar paradas frente a sus comercios. También podrán hacerlo los panaderos. Pero los cortes de tráfico solo tendrán lugar el día señalado, el sábado 23. Los viandantes, a los que se quiere dar protagonismo, tendrán más espacio para desplazarse. No se prevé que haya los mismos controles de acceso que hubo durante la edición anterior, aunque han resaltado que permanecen pendientes de la situación epidemiológica.
La apuesta de “ganar espacio público” para esta fiesta destacada de la literatura en Cataluña, consensuada con la Cámara del Libro y el Gremio de Floristas, recupera una propuesta que se pensaba implementar en el 2020, según ha recordado Martí, hasta que la pandemia lo suspendió todo. Ahora, además de llevar a cabo el proyecto, también se mantendrán algunas novedades que aparecieron durante los últimos dos años: una de ellas será conservar el paseo de Gràcia como eje principal de la cita literaria, que estará reservado para los libreros y los floristas profesionales. El otro espacio diferenciado será el de la Rambla de Cataluña, que se destinará a las asociaciones y entidades, que podrán tramitar los permisos y licencias en línea a través del programa DRAC del Ayuntamiento.
Con todo, los libreros y floristas profesionales también dispondrán de otros espacios exclusivos, repartidos por diferentes puntos de la ciudad, como la Plaza Valdivia; el Paseo Lluís Companys; la Plaza de la Vila de Gràcia; la Plaza de Orfila; la plaza de Sarrià; el Espacio Poblenou-Pallars-Llacuna-Pujades; la Plaza Real; la Plaza Universidad, o el Paseo San Juan en la zona de Arc de Triomf.
Los representantes del sector del libro se han mostrado optimistas. Aún no hay una previsión establecida en cuanto a las ventas, aunque las expectativas “son altísimas”, ha asegurado Patrici Tixis. Todavía queda el recuerdo de la bonanza que vivió el mundo del libro durante el 2021, cuando las cifras de ventas superaron al prepandémico 2019 en más del 10% (aunque aún por debajo de la situación previa a la crisis económica del 2008, cuando el sector salió castigado con una caída del 30% de la facturación). El último año también dejó otro dato prometedor: el 74% de los libros en papel que se venden en España lo hacen a través de las librerías. “Estamos intentando poner las mejores condiciones”, ha agregado Martí en alusión a los planes para el Sant Jordi de este año.
La organización en otros municipios de Cataluña “se hará de manera diferente”, ha indicado Carme Ferrer. Según ha agregado la presidenta del Gremio de Libreros de Cataluña, se están buscando los espacios “más adecuados” para favorecer que haya una mayor afluencia de asistentes. Por lo pronto, los planes en Barcelona siguen su marcha. Entre otros aspectos, ya se piensa en los autores que asistirán a la tradicional firma de libros. El encuentro entre escritores y lectores, uno de los elementos destacados de esta cita literaria, buscará “recuperar” lo que había antes de la irrupción de la covid, ha señalado Tixis. Precisamente esa ha sido la idea que ha corrido de principio a fin: que Sant Jordi recupere la normalidad anterior a la pandemia.