Colau, sobre la segunda Mercè en pandemia: “No habrá fiesta en la calle”
La alcaldesa insiste en pedir la reapertura del ocio nocturno para minimizar los botellones
Segunda Mercè en pandemia y, pese a los buenos indicadores sanitarios, de nuevo descentralizada en pequeños escenarios con aforos limitados, cita previa, distancias y mascarillas. La fiesta mayor de Barcelona se celebrará del 23 al 26 de septiembre y con la prog...
Segunda Mercè en pandemia y, pese a los buenos indicadores sanitarios, de nuevo descentralizada en pequeños escenarios con aforos limitados, cita previa, distancias y mascarillas. La fiesta mayor de Barcelona se celebrará del 23 al 26 de septiembre y con la programación ya rodada, el temor es que se repitan los botellones masivos de las últimas semanas en Gràcia y Sants. La alcaldesa, Ada Colau, ha advertido este miércoles: “No son fiestas de calle como otros años, no habrá fiesta en la calle”.
La programación finalizará pasada la medianoche, a las 00.30 horas y el aforo máximo, en conciertos en el Estadio Olímpico y la plataforma del Zoo Marino, será de 3.000 personas. “Es importante mantener las fiestas con la colaboración de todo el mundo y que la ciudadanía se corresponsabilice, que no vaya a las actividades sin haber reservado”, ha dicho Colau tras admitir que ha habido incidentes que el consistorio no quiere que se repitan.
Como hizo el teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle el lunes, Colau ha insistido en la idea de pedir a la Generalitat que, siempre con garantías y criterios sanitarios, se flexibilice el cierre del ocio nocturno. “Los datos están mejorando y sería bueno que hubiera apertura antes de La Mercè si se dan las condiciones, con garantías y requisitos sanitarios, acordado con el sector, si es preciso con test de antígenos... para no caer en una imprudencia. La alcaldesa ha precisado que en los próximos días detallarán los dispositivos policiales especiales que se organizarán durante la fiesta.
La pregonera de esta edición será Custodia Moreno, veterana activista vecinal del barrio Carmel, cuyo discurso promete tras la advertencia que ha lanzado: “Lo políticamente correcto me resbala un poco”. La ciudad invitada, La Habana, que aporta artistas y músicos a la programación.
El cartel es de la artista francesa Malika Favre, que ha firmado varias portadas de la revista The New Yorker. Una Mercè, ha explicado la artista, que vive hace poco tiempo en Barcelona, representada por una mujer “guapa, poderosa y protectora”. La imagen emplea solo cuatro colores (rojo, naranja, blanco y negro) y es una mujer con una cara limpia y luminosa que viste una tela hecha de elementos tradicionales como los mosaicos, la Sagrada Familia, la sardana o el panot de las aceras de Barcelona.
El teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí, que se estrena tras la marcha de Joan Subirats, ha celebrado que la ciudad “ha mantenido la persiana de la cultura abierta”. Del programa ha destacado que el día 24 se destinará a la cultura popular con el paseo de Gràcia como escenario. Entre los escenarios que se estrenan, la plataforma del Zoo Marino o el parque del Turó de la Peira. Y lo que no habrá será ni correfoc ni jornada castellera. El piromusical volverá a tener cuatro puntos de lanzamiento de fuegos artificiales, para que se pueda ver desde toda la ciudad.