El Govern incumple la orden del TSJC y no ofrece individualmente los exámenes de Selectividad en castellano y aranés
Un 5% de los alumnos que se examinan de las materias optativas de la mañana piden que la prueba no sea en catalán, según la Generalitat de Cataluña
Las pruebas de Selectividad se celebran desde ayer sin grandes cambios en comparación con otras ediciones, a pesar de la entrada en escena del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que ordenó a la Generalitat ofrecer de manera individual las pruebas de selectividad en catalán, castellano y aranés. El tribunal consideró que “la elección de la lengua de los enunciados de examen no puede venir determinada por la Admin...
Las pruebas de Selectividad se celebran desde ayer sin grandes cambios en comparación con otras ediciones, a pesar de la entrada en escena del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que ordenó a la Generalitat ofrecer de manera individual las pruebas de selectividad en catalán, castellano y aranés. El tribunal consideró que “la elección de la lengua de los enunciados de examen no puede venir determinada por la Administración”. Los exámenes, sin embargo, se repartieron por defecto en catalán, como hasta ahora, tal y como comprobó EL PAÍS en la facultad de Biología en la Universidad de Barcelona.
Según datos del propio Govern, aproximadamente el 5% de los alumnos que se examinaron de las materias optativas de Ciencias de la Tierra, Fundamentos de las Artes y Matemáticas aplicadas a las ciencias sociales pidieron la prueba en lengua castellana, una cifra similar a las ediciones anteriores. En la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), unos 70 estudiantes de los 5.000 que se examinaron pidieron hacer las pruebas en castellano, según explicó el rector. El sindicato CC OO lamentó la decisión judicial, “que interfiere en los criterios pedagógicos, sin ninguna demanda real que lo justifique”, protestó en Twitter. El Síndic recordó este martes en un comunicado que el marco normativo “avala plenamente” que se repartan inicialmente los exámenes en catalán.
La portavoz de la Generalitat, Patricia Plaja, anunció este martes que recurrirán la decisión del TSJC. Es la primera ocasión que el nuevo Govern de Pere Aragonès evita cumplir estrictamente una orden judicial. La resolución del TSJC llega tras estimar la petición de medidas cautelares urgentes de la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), que pidió anular el párrafo de las instrucciones que fijaba “repartir primero los enunciados de examen en catalán y, solo si algún alumno lo pide, darle la versión en castellano”.
La única gran novedad para los estudiantes fue que los tribunales de las pruebas remarcaron al inicio de los exámenes a los estudiantes que tienen la posibilidad de realizar estas pruebas en el idioma que elijan. En los pasillos de diferentes facultades también había recordatorios en este sentido. La Generalitat ya había avisado de que “el funcionamiento de las pruebas será igual que los años anteriores” y confirmó que reforzaría las “vías de comunicación”. Algunos alumnos recibieron un correo informativo el lunes por la noche. “Nos enviaron un mail avisándonos del cambio y de que podíamos elegir en qué idioma hacer los exámenes y nos lo han vuelto a recordar esta mañana antes de empezar”, asegura Ariadna Aliana, estudiante de la escuela Betània Patmos de Barcelona.
Valle-Inclán en el examen de Lengua castellana
El embrollo judicial, sin embargo, no ha limitado los nervios de los cerca de 40.0000 estudiantes que se examinan desde este martes hasta el viernes. Siguiendo con la pauta del año anterior y con el fin de evitar aglomeraciones, se harán los exámenes en cuatro días y no en tres, como en convocatorias previas a la pandemia. Además, se han ampliado los puntos de examinación hasta llegar a los 225 con el fin de reducir desplazamientos.
A las nueve de la mañana empezaba el primer examen, Lengua Castellana y Literatura, donde los estudiantes no podían escoger el idioma porque forma parte de la evaluación de las competencias lingüísticas en esta materia. Nervios e incertidumbre tras la primera hora y media de pruebas. Aliana revisa en el móvil una de las respuestas del examen. “Para mí la más complicada ha sido la de sinónimos, es la que me ha hecho dudar más”, dice. Su amiga y compañera de clase, Patrícia Benítez, añade que le ha sorprendido que en ambas opciones del examen saliera la lectura Luces de Bohemia, de Ramón María del Valle-Inclán, aunque el formato de las preguntas era distinto en cada una de las variaciones de examen.
Otros compañeros de la escuela barcelonesa forman el clásico corralito para comparar respuestas y comentan que ha sido un examen “muy asequible”. Pese a las complicaciones que ha tenido esta generación debido a la pandemia y al cambio constante entre clases online y presenciales, Llorenç García remarca: “Habríamos podido sacar un 10 si hubiéramos querido”. Aunque Jorge Cottet añade: “Hemos acabado el temario por completo, pero muy justos de tiempo. Nos hubiese gustado tener algunas clases más para poder repasar”.
Este martes tras los exámenes de Lengua Castellana y Literatura, se han celebrado los de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente, Fundamentos de las Artes y Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales en la segunda franja y, después del segundo descanso, se ha puesto punto final al primer día de pruebas con Análisis Musical, Historia del Arte y Física. Ahora toca relajarse y preparar los siguientes exámenes que empezarán el miércoles con Lengua Catalana y Literatura, Lengua Extranjera, a continuación, y Electrotecnia, Economía de la empresa y Literatura catalana al final del día.
La mayoría de los estudiantes coinciden en que la prueba de Historia es la que da más respeto por “la gran cantidad de temario”, pero no se enfrentarán a ella hasta el jueves, día en que también se examinarán de Dibujo Artístico, Matemáticas y Latín en la segunda franja, y acabarán con Dibujo Técnico, Historia de la Filosofía y Literatura Castellana. Aquellos alumnos que hagan las pruebas de materias específicas tendrán exámenes hasta el viernes, día en que se han programado las asignaturas de Química, Diseño, Geografía, Biología, Cultura Audiovisual, Griego y Tecnología industrial. Las notas y el veredicto final sobre qué les deparará el futuro a estos estudiantes se podrán consultar a partir del 25 de junio.