El Ayuntamiento de Barcelona ralentiza la construcción de pisos prefabricados
El segundo edificio de contenedores, en Glòries, no estará listo hasta finales de año
El plan del Ayuntamiento de Barcelona para hacer pisos de emergencia de forma rápida, recurriendo a soluciones prefabricadas, como los contenedores reciclados, acumula retrasos. Fue hace ya tres años cuando el gobierno de la alcaldesa Ada Colau anunció la construcción, ese mismo año, de ...
El plan del Ayuntamiento de Barcelona para hacer pisos de emergencia de forma rápida, recurriendo a soluciones prefabricadas, como los contenedores reciclados, acumula retrasos. Fue hace ya tres años cuando el gobierno de la alcaldesa Ada Colau anunció la construcción, ese mismo año, de tres edificios provisionales con contenedores marítimos para aumentar el parque de vivienda protegida de emergencia. Pero los primeros 12 APROP (Alojamientos Provisionales de Proximidad), en Ciutat Vella, no se habitaron hasta enero de 2020. Habrá que esperar un año más para que termine un segundo edificio, de 42 alojamientos, en la plaza de les Glòries. El tercer proyecto, en la Bordeta, otros 40 alojamientos, iniciará las obras en primavera de 2022. En total alojarán a unas 200 personas.
La concejal de Vivienda del consistorio, Lucía Martín, atribuyó ayer el retraso a problemas burocráticos y al hecho de que de inicio no encontraron empresas preparadas para estos proyectos. La edil explicó que el consistorio ha adjudicado la primera obra y ha elegido el proyecto ganador del concurso para el segundo. De las dos promociones, la de Glòries costará cuatro millones y la de La Bordeta, 6,7 millones. Un elevado precio que Martín justificó por la necesidad de hacer trabajos previos en el solar.
Martín reveló otra novedad. Y es que si los primeros APROP se destinaron a personas que estaban en la mesa de emergencia —donde aguardan personas que han sufrido un desahucio o en otras circunstancias por las que necesitan un piso urgentemente—, esta vez también alojarán a jóvenes con pocos recursos y a familias monomarentales. Se facilitará así, dijo, “la mixtura social”.
Los jóvenes, que son una cuarta parte de los solicitantes de vivienda pública, ocuparán la mitad de los pisos del edificio de Glòries. No está decidido qué tipo de contrato de alquiler tendrán. La titular de Vivienda se mostró partidaria de que sean contratos más breves de lo que marca la Ley de Arrendamientos Urbanos, para que sean una solución provisional, un puente para facilitar la emancipación, y que tengan rotación.
La concejal resaltó también la apuesta por incrementar el parque de alquiler y, al mismo tiempo, apoyar “a la industria y generar empleo en soluciones innovadoras”. Marín celebró que se presentaran 26 propuestas para el edificio de La Bordeta, cuyo diseño será más complejo que la estructura de contenedores apilados, precisó. Tendrá además zonas de uso comunitario.
Santiago López, de la empresa Constructora de Calaf, explicó que los APROP que se fabricarán en el municipio de la comarca de l’Anoia Calaf. Allí llegarán los contenedores, y se someterán a un proceso industrial para habilitarlos con instalaciones, pavimentos, aperturas y todo lo que tiene una vivienda habitual.