La Generalitat defiende su sistema de rastreadores tras la oferta del Ejército
ERC considera que "hacen falta más sanitarios que militares"
Meritxell Budó, consejera portavoz del Gobierno catalán, ha puesto este miércoles en valor el sistema de rastreadores que tiene la Generalitat para evitar la propagación de la covid-19 tras la oferta del Ejército de destinar parte de su contingente a esta función. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ofreció el martes a las comunidades autónomas 2.000 militares para poder contribuir a frenar la expansión del coronavirus...
Meritxell Budó, consejera portavoz del Gobierno catalán, ha puesto este miércoles en valor el sistema de rastreadores que tiene la Generalitat para evitar la propagación de la covid-19 tras la oferta del Ejército de destinar parte de su contingente a esta función. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ofreció el martes a las comunidades autónomas 2.000 militares para poder contribuir a frenar la expansión del coronavirus. La consejera no ha aclarado si pedirán o no esa ayuda.
En una entrevista en RNE, Budó ha planteado que si alguna comunidad autónoma quiere la ayuda que lo valore y que lo pida. Con todo, ha añadido que 2.000 militares no es un número demasiado elevado y que el Gobierno debería concretar más su oferta. En el caso de Cataluña, la consejera ha recalcado que el Departamento de Salud ha trabajado con un programa que ha aumentado “muchísimo” los rastreadores y que además se activará una aplicación de utilización voluntaria que garantizará el anonimato. “Será una herramienta importante”, afirmó.
El partido Esquerra Republicana, que dirige la consejería de Salud, ha expresado de forma más concreta su rechazo a la propuesta de Sánchez. En declaraciones a Servimedia, ERC ha considerado que la oferta muestra que “hacen falta más sanitarios y menos militares”, y han recalcado que el Govern está haciendo “todos los esfuerzos necesarios” para contener la pandemia. El partido, que reclama recortar un 40% el presupuesto militar, cree que “es un sinsentido mantener un presupuesto de 16.000 millones” para que integrantes del Ejército desempeñen funciones de sanitarios o bomberos.
Tras la oferta de Sánchez, la consejera de Salud, Alba Vergés, afirmó el martes en la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo del Govern que la coordinación “debe existir siempre”, pero no aclaró si el gobierno de Torra aceptará o no el ofrecimiento de los rastreadores militares. Vergés dijo que el Gobierno de Sánchez debería “centrarse en sus competencias”, y le recordó el “retraso” en habilitar el permiso de conciliación para los padres que tengan que cuidar un hijo que ha sido contagiado y no puede ir a la escuela, un permiso que este miércoles ha planteado ya el Ministerio de Educación.
El Govern ya tuvo un desencuentro con el Gobierno a causa de la participación de militares en tareas de protección frente a la covid-19. A principios de abril, cuando la pandemia mostró su máxima virulencia especialmente en las residencias de ancianos, Torra terminó aceptando la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para las tareas de desinfección de los centros, pese a que durante días la posición del Govern con respecto a la ayuda de los militares fue ambigua y hasta rechazada en decenas de casos, en los que se optó por contratar a empresas privadas para llevar a cabo las desinfecciones. La Generalitat argumentó entonces que usaban de forma coordinada todos los servicios a su alcance, incluida la UME.