Los vaivenes del Govern ante el curso escolar indignan a padres y maestros

Sindicatos y asociaciones de profesores avisan que para rebajar las ratios tienen que contratarse a más docentes

Varios alumnos esperan en el patio el inicio del curso escolar de 2019, en una escuela de Barcelona.Albert García

Falta menos de un mes para el inicio del curso escolar y la comunidad educativa ha lanzado un grito de alerta ante la “evidente descoordinación” entre los departamentos de Salud y Educación del Govern. El protocolo presentado el pasado jueves para la reapertura de las escuelas, cerradas desde marzo pasado a causa de la pandemia de coronavirus, no convence ni a los sindicatos ni a las familias, y ha originado un desencuentro entre los dos...

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Falta menos de un mes para el inicio del curso escolar y la comunidad educativa ha lanzado un grito de alerta ante la “evidente descoordinación” entre los departamentos de Salud y Educación del Govern. El protocolo presentado el pasado jueves para la reapertura de las escuelas, cerradas desde marzo pasado a causa de la pandemia de coronavirus, no convence ni a los sindicatos ni a las familias, y ha originado un desencuentro entre los dos departamentos implicados. Ambos se han emplazado a una reunión el jueves, en la que no estarán presentes los representantes de los trabajadores, para concretar el protocolo.

La guía para reabrir los centros prevé, entre otras cosas, que si un alumno o profesor da positivo de covid-19 en una prueba PCR se recomendará a toda la clase volver a casa para seguir una cuarentena de 14 días. Y, si un centro tiene dos positivos en diferentes grupos, la autoridad sanitaria podrá cerrar la escuela.

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Sin embargo, el protocolo no cumple con las demandas de los profesores y de las familias, que pedían que los grupos educativos tuviesen unas ratios más bajas. De hecho, el consejero de Educación, Josep Bargalló, avanzó el viernes que no se cambiarían las ratios de los años anteriores, de entre 25 y 30 alumnos por aula, y aseguró que estaban avaladas por Salud. El día siguiente, el secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, lo contradijo y afirmó que unas ratios tan altas no tenían “ningún sentido”.

Las contradicciones han encendido a la comunidad educativa. El gobierno catalán intentó el domingo calmar los ánimos y mostrar una postura unitaria. Argimón aseguró que se trataba de un “malentendido” e insistió en que las ratios son competencia de Educación y se limitó a recomendar que fueran “cuanto más pequeñas mejor”. También avanzó que las ratios finales las decidirá cada centro según sus posibilidades. El jueves, Salud y Educación se reunirán para “actualizar” el protocolo.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, denunció ayer la descoordinación. En una entrevista en RAC 1, criticó al gobierno del presidente Quim Torra y aseguró que le causa una “grandísima desazón” que el departamento de Salud no haya “revisado ni validado” los protocolos.

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“Los profesores tienen miedo y nervios. Nosotros proponíamos que las ratios fuesen de 10 niños por grupo en infantil, y de 15 en primaria y secundaria. Pero todo esto cuesta dinero. Se tendrían que contratar 44.500 dotaciones de profesorado para la escuela pública”, explica Ramon Font, portavoz del sindicato Ustec. Los sindicatos proponían también “que no haya escuela por la tarde si no es necesario, o que las clases duren menos para ventilar entre asignaturas”. “Parece que las restricciones presupuestarias pasan por delante de los criterios médicos”, critica Font.

Los padres también están en alerta. Montse Capdevila, de la plataforma Tornem a les Escoles, considera que la discrepancia entre departamentos “alimenta el discurso del miedo”. “En otros países se están abriendo las escuelas con relativa normalidad. Necesitamos más pruebas PCR, más recursos y no cerrar indiscriminadamente”, afirma.

Cribados masivos en el barrio Besòs de Barcelona

El departamento de Salud inició ayer un cribado masivo en el barrio de Besòs-Maresme de Barcelona, con la realización de pruebas diagnósticas PCR a 1.200 vecinos hasta el miércoles . Desde primera hora se formaron colas en la carpa instalada por el Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña. En este barrio, el riesgo de rebrote se situaba la semana pasada en 467, muy por encima de los 147,4 que tiene de media toda Cataluña y los 174 que tiene Barcelona. Existe riesgo de rebrote cuando el indicador está por encima de 100, y aunque el de Cataluña sigue alto, se ha estabilizado en los últimos días. Salud comunicó ayer que en las últimas 24 horas se han notificado 1.204 nuevos positivos por coronavirus. La cifra aumenta en los últimos días por la cantidad de pruebas PCR que se están realizando, que en Cataluña ya son más de un millón desde el inicio de la pandemia.

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