Míriam Nogueras, vicepresidenta del PDeCAT, deja la dirección del partido
No participó por problemas técnicos en el Consell Nacional de la formación este jueves y este viernes por la mañana ha anunciado su decisión, aunque mantiene su militancia
La vicepresidenta del PDeCAT y diputada en el Congreso Miriam Nogueras, la cabeza más visible enfrentada a Bonvehí y que defiende la disolución en Junts, no partició en la reunión de este jueves del Consell un Consell Nacional, el máximo órgano entre congresos, en el que se apuntaba que se consagraría la intención de la dirección del partido de romper con el expresidente Carles Puigdemont. Desde su entorno aseguran que tuvo problem...
La vicepresidenta del PDeCAT y diputada en el Congreso Miriam Nogueras, la cabeza más visible enfrentada a Bonvehí y que defiende la disolución en Junts, no partició en la reunión de este jueves del Consell un Consell Nacional, el máximo órgano entre congresos, en el que se apuntaba que se consagraría la intención de la dirección del partido de romper con el expresidente Carles Puigdemont. Desde su entorno aseguran que tuvo problemas técnicos que le impidieron participar, sin embargo, este viernes por la mañana ha anunciado que deja la dirección del partido aunque mantiene su militancia. Nogueras y otros miembros de la dirección afines al expresident querían que en este cónclave se votara la propuesta de tránsito hacia el nuevo partido propuesta por los políticos en prisión, pero finalmente decidieron retirarla, el pasado lunes, como adelantó el diario Ara.
Pero la realidad es que las negociaciones continúan. El presidente de la formación, David Bonvehí, hizo un discurso de orgullo neoconvergente pero sin cruzar ningún Rubicón. Los críticos de la dirección y defensores de unirse sin resquemores a Junts per Catalunya ya habían retirado su ofensiva de votar la propuesta hecha por los políticos independentistas presos. Ambas partes ganan tiempo.
En su intervención, Bonvehí rindió cuentas de las negociaciones llevadas adelante con el exlíder de la ANC, Jordi Sànchez, encargado de negociar por parte del entorno de Puigdemont. Las conversaciones comenzaron en diciembre de 2019 y se extendieron hasta marzo, cuando las partes estuvieron cerca pero no lograron cerrar nada. Tras el paréntesis de la pandemia se retomaron los contactos en mayo, pero la dirección del PDeCAT, con varios cuadros municipales, se resisten a diluir el proyecto dentro del nuevo Junts per Catalunya. El entorno del expresident no quiere una federación y el pasado fin de semana dio el paso para echar a rodar el nuevo partido sin tener en cuenta a los neoconvergentes. La confianza entre ambos por la manera como los del expresident se hicieron con la marca electoral, violentando las normas internas de las formaciones.
“Desde el Partit Demòcrata defendemos que el nuestro proyecto político, el nuestro modelo de país, y nuestro modelo de sociedad tiene que estar presente en las futuras elecciones de Cataluña, con la fórmula que sea, pero tiene que estar”, aseguró este jueves Bonvehí. El líder de los neoconvergentes insistió en que su negociación con Puigdemont se ha basado en la “generosidad de partido” y en la mirada amplia. También defendió que el propio Consell Nacional le había encomendado que se transitara hacia Junts como partido, no a nombre individual, que es lo que exige Sànchez.