El Govern reclama la gestión del ingreso mínimo vital para evitar un caos en las tramitaciones
La prestación estatal será compatible con la Renta Garantizada de Ciudadanía
El Ingreso Mínimo Vital (IMV) aprobado por el Gobierno recientemente ya se puede solicitar a partir de este lunes. La medida era un compromiso de legislatura que se ha avanzado debido a la crisis social y económica derivada de la pandemia de Covid-19. La Generalitat, que cuenta ya con la ...
El Ingreso Mínimo Vital (IMV) aprobado por el Gobierno recientemente ya se puede solicitar a partir de este lunes. La medida era un compromiso de legislatura que se ha avanzado debido a la crisis social y económica derivada de la pandemia de Covid-19. La Generalitat, que cuenta ya con la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC), una prestación que será compatible con el IMV, reclama asumir la gestión de las dos ayudas para evitar dificultades en las solicitudes y tramitaciones.
Una de las características del IMV es que es compatible con prestaciones autonómicas. En el caso de Cataluña se podrán solicitar y percibir al mismo tiempo el IMV y la RGC, una ayuda aprobada en septiembre de 2017 por el Govern. El ingreso máximo a cobrar si se combinan estas dos prestaciones será el de la RGC, que tiene unas cuantías más altas. Es decir, si una persona ha solicitado las dos ayudas y han sido aprobadas, el Estado abonará la cantidad correspondiente al IMV (la cuantía mínima es de 462 euros), y la Generalitat lo complementará hasta llegar al tope máximo que fija la RGC en cada caso. Este tope se calcula según el Indicador de Renta de Suficiencia, y fija desde 644 euros por una unidad familiar de una sola persona, hasta 1.181 para una unidad familiar con cinco o más personas a cargo.
La Generalitat ha reclamado al Gobierno que se pueda asumir la gestión del IMV desde la administración autonómica. También lo ha pedido la Comisión de Gobierno de la Renta Garantizada, formada por entidades del tercer sector, sindicatos, patronales y el Govern. El motivo de esta reclamación es que, según el departamento de Trabajo de la Generalitat, la solicitud de las dos prestaciones por vías distintas y en dos administraciones diferentes puede comportar problemas que se solucionarían con una coordinación en la gestión.
Desde este lunes, la prestación estatal del IMV se puede solicitar en las oficinas de la Seguridad Social. En cambio, la RGC se solicita en las oficinas de la Generalitat. Los requisitos de una y otra prestación son distintos, y también lo son los trámites a realizar. “Ahora mismo hay descoordinación, porque quien solicite una pedirá también la otra, y tendrá que ir por dos circuitos diferentes cuando podría ser una ventanilla única”, explica una portavoz del departamento de Trabajo. Al no haber una gestión unificada, es probable que una persona que haya solicitado las dos ayudas y hayan sido aprobadas, tenga que devolver dinero a la Generalitat para no sobrepasar el tope de las dos prestaciones combinadas. “Tiene que ser una sola ventanilla, y que el beneficiario reciba la cantidad final, como hacemos desde las años 90 con las prestaciones no contributivas que son compatibles con las del Estado”, añaden desde Treball.
La renta garantizada llega actualmente a más de 81.600 hogares y tiene más de 127.700 beneficiarios. Con la llegada del IMV, la Generalitat tendrá un ahorro, que está decidiendo con la comisión de gobierno cómo gestionarlo. Lo más probable, indican fuentes de Treball, es que se amplíe el espectro de los posibles beneficiarios para dotar de más cobertura a la RGC.