El PP impulsa en el Senado una ley del suelo parecida a la del PSOE que rechaza en el Congreso

Nuevo choque frontal entre Gobierno y el principal partido de la oposición. Esta vez, a cuenta de una futura ley del Suelo. El Partido Popular busca desde el Senado, donde tiene mayoría absoluta y controla los tiempos parlamentarios, que “todos los grupos” se sumen a su propuesta de ley registrada este viernes. El eventual apoyo de otras formaciones sería meramente simbólico, ...

Nuevo choque frontal entre Gobierno y el principal partido de la oposición. Esta vez, a cuenta de una futura ley del Suelo. El Partido Popular busca desde el Senado, donde tiene mayoría absoluta y controla los tiempos parlamentarios, que “todos los grupos” se sumen a su propuesta de ley registrada este viernes. El eventual apoyo de otras formaciones sería meramente simbólico, pues la docena de normas impulsadas por el PP en la Cámara alta son posteriormente frenadas en la Mesa del Congreso, de mayoría socialista. Los populares intentan, sin embargo, seguir erosionando al Gobierno: un hipotético voto a favor de partidos como Junts valdría al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para insistir desde su fortaleza del Senado en los ataques al presidente Pedro Sánchez bajo el argumento de su “debilidad parlamentaria”. En su estrategia de desgaste, Génova descarta de plano sumarse a otra propuesta sobre la misma materia presentada en junio pasado por el PSOE y PNV en la Cámara baja, muy parecida en el articulado al texto del PP en lo que se refiere a ordenación urbanística. Aunque los populares añaden otras cuestiones accesorias que serían propias de la ley de vivienda, como la derogación de la declaración de zonas tensionadas o la eliminación de los topes de precios al alquiler.

Feijóo busca con esta propuesta ―que está dentro de su “Plan de Vivienda”, desgranado este jueves― seguir al ataque, a pesar de que en el Congreso ya hay otra proposición de ley presentada por el PSOE y PNV en junio pasado. El contenido de ese documento es muy parecido a lo de los populares —de hecho hay artículos prácticamente calcados—, en cuanto a los preceptos que abordan estrictamente las políticas de suelo. La diferencia estriba fundamentalmente en que el PP añade el artículo 22 bis, no contemplado en la norma de los socialistas, y en que los populares pretenden con su propuesta derogar las zonas tensionadas, eliminar los topes al alquiler y reducir la suspensión de los desahucios de personas vulnerables de dos meses a uno. Sin embargo, estas tres últimas medidas tienen más que ver con la ley de vivienda y no estrictamente con el desarrollo de planes urbanísticos. “La reforma es más profunda. Aunque sí hay parte de la ley del suelo que tiene que ver”, defienden fuentes populares, que ensalzan su norma como el paraguas necesario para que Feijóo pueda desarrollar las propuestas de su “Plan de Vivienda”.

Socialistas y jetzales registaron su proposición de ley en junio pasado después de que, un mes antes, el PP —que se había mostrado favorable con anterioridad a la norma— rechazase en el último momento el proyecto de Ley del Suelo del Gobierno. El PSOE se enfrentaba entonces a la votación de las enmiendas a la totalidad de la norma promovidas por Podemos, ERC y Junts, y cuya oposición al texto apoyaba también su socio de coalición, Sumar, que por primera vez previó dejar caer una ley salida del Consejo de Ministros.

El PP se subió en aquel momento al barco de independentistas y de Podemos, contrarios a la iniciativa, con la intención de “evidenciar la debilidad parlamentaria del Gobierno” y amenazó con tumbar una norma previamente consensuada con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Con esa reforma, el Ministerio de Vivienda pretendía poner énfasis en la colaboración público-privada para la construcción de casas asequibles y remover trabas a la planificación urbanística. Una premisa que los populares defienden ahora para plantear su propia ley. La ministra Isabel Rodríguez, responsable del ramo, retiró en mayo pasado el texto del Congreso antes de ser debatido por la previsible falta de apoyos. Finalmente, el PSOE registró un nuevo texto después prácticamente igual junto al PNV, aunque borró el sello socialista de la proposición en septiembre por una cuestión de cupo en la Mesa. “La ley está ahora mismo con la firma del PNV. Podemos firmar hoy mismo PSOE y PP y ya estaría en marcha”, señalan fuentes del Ministerio de Vivienda. “Ese texto ya está registrado en la Cámara. Es un texto absolutamente riguroso, que podría haber sido objeto de mejora por parte de todos los grupos, esa era mi predisposición”, ha reivindicado Rodríguez.

Pero los populares se cierran en banda a esa posibilidad. “El Gobierno ha sido incapaz de legislar a lo largo de estos meses”, ha cargado la senadora y vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP, Paloma Martín, este viernes tras registrar la norma en el Senado. “Hemos visto cómo llevó al Congreso una ley del suelo que tuvo que retirar en el mes de mayo por falta de apoyo de sus socios y para evitar otra derrota parlamentaria. Vamos a solicitar a los grupos parlamentarios que la apoyan, también al Partido Socialista”, ha remachado Martín, que se ha amarrado al hecho de que los socialistas retiraron su logo “el 2 de septiembre” de la propuesta registrada en junio junto al PNV. “No hay un solo texto del Gobierno ni del PSOE”, ha dicho al respecto, tras presumir de haber “tomado la iniciativa” y “adelantado” a La Moncloa.

El entendimiento se aventura así prácticamente inviable. Más cuando, en el texto registrado hoy, el PP pone negro sobre blanco su negativa a declarar zonas tensionadas en las comunidades autónomas donde gobierna, una apuesta firme del Gobierno de coalición. “Se propone la derogación de las medidas intervencionistas en el mercado de alquiler como las zonas de mercado tensionado, los índices de precios de los alquileres, el control de los precios las de tolerancia a la inquiocupación”, señala el documento del grupo parlamentario popular. “Estamos interviniendo el mercado del alquiler para bajar los precios, para que se pueda pagar una vivienda con empleos dignos”, ha respondido la ministra Rodríguez. “Lamento que el Partido Popular haya aprovechado para ir contracorriente y contra un consenso mayoritario de los alguileres. Si no quieren ayudar, al menos que no incordien”, ha concluido.