Ayuso brinda por la Navidad con la frase favorita de su jefe de gabinete: “Esto no lo tapa ni Franco. Van ‘p’alante”

Feijóo se deshace en elogios hacia la presidenta: “Quiero que España se parezca a Madrid”

Cena de Navidad del PP madrileño, en Mejorada del Campo, este lunes.Santi Burgos

La cúpula del PP madrileño se ha reunido este lunes en un palacio de bodas, el de Negralejo, en la carretera de Mejorada, para celebrar su tradicional cena de Navidad y recordarse a sí mismos que son “una gran familia”, expresión que repitieron no menos de una decena de veces. La primera afiliada a la que entregaron una placa de “reconocimiento” por su labor se apellidaba, curiosamente, Casado, pero no consta que guarde parentesco con el exlíder del partido, el primero elegido en primarias, ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La cúpula del PP madrileño se ha reunido este lunes en un palacio de bodas, el de Negralejo, en la carretera de Mejorada, para celebrar su tradicional cena de Navidad y recordarse a sí mismos que son “una gran familia”, expresión que repitieron no menos de una decena de veces. La primera afiliada a la que entregaron una placa de “reconocimiento” por su labor se apellidaba, curiosamente, Casado, pero no consta que guarde parentesco con el exlíder del partido, el primero elegido en primarias, defenestrado otra noche fría hace un par de años por sus parientes de siglas.

Subió primero a hablar la novia, la anfitriona, la que gobierna, Isabel Díaz Ayuso, y después el pretendiente, el invitado, Alberto Núñez Feijóo, en la oposición. “Gracias por invitar a este humilde diputado de la circunscripción de Madrid”, declaró el gallego. “Normalmente”, añadió, “empezaría haciendo una broma de lo bien que nos llevamos Isabel y yo, pero estoy preocupado porque ya nadie habla de esto. Quizá es que el Gobierno está muy ocupado”. Excusatio non petita, accusatio manifesta, pero es cierto que en ese trayecto de Galicia a la capital el expresidente de la Xunta ha ido perdiendo los atributos gallegos (a los que recurría para tirar de las orejas a Pablo Casado por arrimarse a Vox, por ejemplo) para mimetizarse con su nuevo entorno. “Quiero que España se parezca a Madrid”, dijo. El político que inauguró su mandato al frente del PP asegurando que él venía a ganar a Pedro Sánchez, “no a insultarle”, le llamó este lunes “el presidente más barato de la democracia” y aseguró que le faltaba “dignidad y honor” para dimitir y dejarle paso un año y medio después de las elecciones, repitiéndolas hasta que él pueda ser presidente, es decir, hasta que quiera.

Isabel Díaz Ayuso, Alberto Núñez Feijóo y Cuca Gamarra, en la cena de Navidad del PP madrileño.Santi Burgos

Ayuso regaló a su invitado una caja de Peperos, unos dulces adquiridos recientemente en su viaje a Corea del Sur, y un análisis sobre lo que ocurre en su territorio: “Presidente, esta es la situación política nacional: No hay pan para tanto chorizo”. También auguró un gran 2025: “Se van a llevar a todos p’alante”, dijo, parafraseando la frase favorita de su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, habitual propagador de bulos y aprendiz de adivino. “Aldama ha cantado por soleares esta mañana en el Supremo”, ha celebrado la presidenta madrileña, refiriéndose a la declaración en el alto tribunal del empresario, considerado el conseguidor de la trama que afecta al exministro y exdirigente socialista José Luis Ábalos. Ayuso se regodeó en su complicado frente judicial y se burló del “piso de su sobrina”, en alusión a la vivienda en Plaza de España donde vivía, a cuenta, presuntamente, de la trama corrupta, la entonces pareja de Ábalos. “Esto no lo tapa ni Franco y van p’alante”, insistió la lideresa, convencida, por otro lado, de que el calendario de actos que prepara el Gobierno sobre el 50 aniversario de la muerte del dictador en 2025 llevarán la “violencia a las calles”.

Cerca de un millar de cargos y afiliados del PP escucharon a Feijóo y Ayuso antes de degustar pimientos del piquillo rellenos de ternera y bechamel; flor de alcachofa a la parrilla con escamas de sal; croquetas cremosas de jamón ibérico; carrilleras de ibérico guisadas sobre parmentier trufado; tarta cremosa de queso sobre crumble y frutos rojos y lingote aéreo de chocolate y crema inglesa. A la prensa le dieron —literalmente— de comer aparte, ya que, al contrario que otros años, los periodistas tuvieron que seguir el acto a través de sendos plasmas unos metros más allá del recinto donde cenaba el PP madrileño.

Sobre la firma

Más información

Archivado En