La Audiencia Nacional retoma la causa sobre los homenajes a presos de ETA

Manuel García-Castellón, magistrado de la Audiencia Nacional, ha retomado la investigación sobre las supuestas estructuras creadas entre 2016 y 2019 para organizar actos de homenaje a etarras. El juez instructor dio por acabadas sus pesquisas el pasado octubre, pero ha aceptado ahora un recurso de la asociación Dignidad y Justicia —al que se adhirió el PP— para que se practiquen nuevas pruebas que considera pendientes. “El cierre de la instrucción fue prematuro, al faltar diligencias necesari...

Manuel García-Castellón, magistrado de la Audiencia Nacional, ha retomado la investigación sobre las supuestas estructuras creadas entre 2016 y 2019 para organizar actos de homenaje a etarras. El juez instructor dio por acabadas sus pesquisas el pasado octubre, pero ha aceptado ahora un recurso de la asociación Dignidad y Justicia —al que se adhirió el PP— para que se practiquen nuevas pruebas que considera pendientes. “El cierre de la instrucción fue prematuro, al faltar diligencias necesarias para el esclarecimiento de los hechos que se investigan”, admite García-Castellón en un auto fechado este lunes, donde señala la existencia de tres chats de la aplicación de mensajería Telegram utilizados para “promover campañas y movilizaciones a favor de los presos de la organización terrorista”: “Dos de ellos, pertenecientes al partido Sortu”.

A petición de Dignidad y Justicia, personada en el sumario como acusación popular y vinculada al PP, el magistrado considera “necesario” y “pertinente” dilucidar quiénes son los “administradores” de esos tres canales de Telegram: dos de ellos, vinculados a Sortu; y el tercero, a la red ciudadana Sare, una plataforma de apoyo a los reclusos de la extinta organización terrorista. Según señala en el auto, dos de los históricos etarras investigados en este proceso, Carlos Sáez de Eguilaz, alias Kai, y Felipe San Epifanio, Pipe, participaban en esos chats y recibían “abundante información”, “directrices” e “instrucciones” sobre actos y movilizaciones, así “como mensajes sobre la puesta en libertad de los presos de ETA”. Parte de ese contenido era “después difundido” por organizaciones como Etxerat, grupo de apoyo a los reclusos de la banda, o por la revista Kalerainfo, cerrada en 2021 por orden de la Audiencia Nacional tras solicitarlo la Fiscalía.

Esta causa judicial se abrió en 2018 por presuntos delitos de enaltecimiento terrorista por los homenajes a los reclusos de la banda que salen de prisión, popularmente conocidos como ongi etorri. En varias fases, la Guardia Civil ha detenido e investigado a una decena de personas: entre ellos, al antiguo etarra Antonio López Ruiz, alias Kubati; a Jorge Olaiz, exmiembro del comando Amaiur de ETA; y a Haymar Altuna, Oihana Garmendia y Miren Zabaleta, integrantes de Sortu (uno de los partidos que forman parte de la coalición EH Bildu).

Los imputados se desvincularon de cualquier supuesta estructura. Kubati, asesino de la disidente de la banda Dolores González Katarain, Yoyes, negó incluso la existencia de una estructura estable para poner en marcha esos actos y afirmó ante el juez que salieron adelante gracias exclusivamente a la “dinámica” de funcionamiento que opera dentro de la izquierda abertzale. En 2021, el instituto armado también arrestó a Sáez de Eguilaz y San Epifanio.

Este sumario nunca se ha archivado. De hecho, la Fiscalía pidió a principios de este enero que, una vez agotada la investigación, se procesase y se propusiera sentar en el banquillo a seis de los imputados: a los etarras Kubati, Sáez de Eguilaz y San Epifanio; a Haymar Altuna y Oihana Garmendia, de Sortu; y a Oihana San Vicente, de la organización Kalera Kalera.