Ione Belarra afirma que le ofrecieron una salida política para Irene Montero en una embajada “para que dejara de dar problemas”
La exministra de Igualdad presenta su lista a las europeas: “No nos vamos a conformar con el ‘no se puede’ del socialismo y de los verdes”
Podemos calienta motores para las elecciones europeas, en las que el partido se medirá con Sumar. Rodeada de la plana mayor de la organización y miembros de su candidatura, la número dos de la formación izquierdista, Irene Montero, ha dejado este lunes recados a socialistas y verdes para reivindicarse como la única fuerza de izquierdas capaz de posicionarse “sin miedo” contra las “injusticias”. “No nos vamos a conformar ni con el...
Podemos calienta motores para las elecciones europeas, en las que el partido se medirá con Sumar. Rodeada de la plana mayor de la organización y miembros de su candidatura, la número dos de la formación izquierdista, Irene Montero, ha dejado este lunes recados a socialistas y verdes para reivindicarse como la única fuerza de izquierdas capaz de posicionarse “sin miedo” contra las “injusticias”. “No nos vamos a conformar ni con el odio y los recortes de derechos, ni tampoco con el ‘no se puede’ del socialismo y de los verdes”, ha proclamado en un acto celebrado en un local del madrileño barrio de Lavapiés. Ha marcado así las distancias con sus potenciales rivales, a la vez que ha hecho una alusión velada a la coalición que lidera la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, que tiene candidatos que pertenecen tanto al grupo de la izquierda europea (IU) como a los verdes (Catalunya en Comú). En su intervención, la líder de partido, Ione Belarra, ha afirmado que le “ofrecieron” para Montero una “salida política” en una embajada para que “dejara de dar problemas”.
“Irene hubiera tenido muy fácil tener una salida política”, ha explicado Belarra nada más comenzar su intervención, afirmando que no había hablado con Montero lo que iba a desvelar a continuación, porque de hacerlo, ella no le hubiera dejado. “Me ofrecieron algo bonito, una embajada. Una salida que la sacara de España y que hiciera que deje de dar problemas. Cuando me lo propusieron, me eché a llorar, porque me dio mucha rabia”, ha señalado acto seguido sin dar ningún otro dato. Fuentes del partido sugieren que fue la propia Yolanda Díaz después de las elecciones generales la que formuló la propuesta y que el puesto era en la legación de Chile, un país con el que Montero tiene una vinculación especial, ya que estudió allí una temporada. La extitular de Igualdad quedó excluida de las listas del 23-J, tras una negociación muy dura con todos los partidos que integraron la coalición, pero particularmente agónica con Podemos, que hasta el último día no confirmó su integración en el proyecto. A pesar de su entrada, la formación denunció el “veto” a su número dos y presionó durante días para que los de Díaz rectificaran. Menos de dos semanas antes, el partido se había hundido en las municipales y autonómicas, tras una campaña en la que Montero tuvo un papel muy destacado. En ese momento, en Sumar no veían a la ministra como un activo político y argumentaban que no querían convertir la ley del solo sí es sí, que desde su entrada en vigor había provocado más de mil rebajas de condena a agresores sexuales y una enorme crisis para el Gobierno de coalición, en un elemento central de la campaña.
Preguntada por la información conocida este lunes, la formación de la vicepresidenta guarda de momento silencio. “Lo que Irene ha representado es necesario. Hubiera sido entendible que no pidiera más. Habría sido muy fácil para ella dar un paso a un lado, buscar fuera de España esa salida política”, ha razonado Belarra, que ha valorado que, en cambio, haya decidido “echarse a la espalda” la candidatura de las europeas.
A menos de cinco meses de los comicios, la exministra de Igualdad ha presentado al equipo que la acompaña en las primarias del partido, cuyo resultado se hará público el 2 de febrero, día del comienzo de la campaña de las elecciones autonómicas en Galicia, una cita muy complicada para Podemos, que es una fuerza extraparlamentaria. En la lista de Montero, que debe ser aún votada por la militancia entre el 24 de enero y el 1 de febrero, se encuentran los coportavoces del partido Isa Serra, Pablo Fernández y María Teresa Pérez. También el exdiputado madrileño Serigne Mbayé, el ex Jemad Julio Rodríguez, ahora presidente de la fundación vinculada al partido (el Instituto República y Democracia), y la activista por los derechos trans Mar Cambrollé. “No imagino un mejor equipo para ayudar a que España en Europa sea una referencia de políticas feministas, de defensa de la paz, de políticas antirracistas, ecologistas y antifascistas”, ha resaltado la dirigente de Podemos antes de cargar contra el PSOE y Sumar.
“El proyecto europeo necesita una voz que no se conforme con lo que hay. […] Frente al odio, frente al recorte de derechos de las derechas y también frente al conformismo de los sectores progresistas, también de los verdes, necesitamos fuerzas poderosas, sin miedo, con la voluntad de no callar frente a ninguna injusticia que defienda esa Europa de la raíz, lo que justificó la creación del proyecto europeo”, ha abogado.
“Gentes que no se conforman”
Montero ha recordado unas palabras de la ex primera ministra británica, Margaret Thatcher, cuando afirmó que su mejor creación había sido Tony Blair. “Un laborista que fundó en su momento la tercera vía, que significaba defender desde la izquierda las políticas de derechas. Ella, con mucha razón, quería decir una verdad tan grande como un puño, y que a día de hoy sigue teniendo plena vigencia, que es que si la izquierda hace políticas de derechas, al final las derechas mandan, aunque no gobiernen”, ha lanzado la futura cabeza de lista, que ha ahondado en esa idea. “Esta es la candidatura de las gentes que no se conforman, que no dejan de soñar con otro mundo posible, que saben que siempre hay alternativa, que sí se puede. Aunque implique un alto coste político hacer posible lo que tanto desde las derechas como desde esas terceras vías y esas izquierdas que aplican políticas de las derechas nos dicen que no es posible”, ha incidido, lanzando dardos a sus exsocios de Gobierno.
“Somos unas cuantas miles de personas, vamos a ver cuántas, que quieren que se dé esa pelea”, ha emplazado por su parte Belarra, reconociendo de facto que las europeas serán un buen termómetro para medirse con el resto de fuerzas. Podemos encara esta cita electoral en un momento de debilidad del partido, que tras la debacle de mayo ha visto mermada su estructura territorial y que en diciembre rompió con Sumar en el Congreso y mantiene ahora a sus cinco diputados en el Grupo Mixto. Aunque su candidatura aún se oficializará en los próximos días, la dirección de Podemos (a expensas de materializar una alianza con alguna otra fuerza) ya tiene claro los integrantes de la lista con la que concurrirá a las europeas. Por su parte, Sumar aún no ha elegido su cabeza de lista y aunque ya se han producido conversaciones, su portavoz, Ernest Urtasun, ha afirmado esta misma mañana en rueda de prensa que abordarán las negociaciones para aunar a los partidos de la coalición en una misma papeleta “cuando toque”.