Todo el socialismo madrileño se moviliza a favor de Sánchez
Históricos dirigentes del PSOE de Madrid, entre los que se encuentran ministros con González y Zapatero y consejeros de la Comunidad con Leguina, publican un nuevo manifiesto de apoyo a su candidato a la presidencia del Gobierno
Cada vez son más los referentes de todas las generaciones y sensibilidades del PSOE, del felipismo al zapaterismo, el rubalcabismo e incluso del guerrismo, que han decidido dar un paso adelante y salir en defensa de Pedro Sánchez. Los manifiestos en respaldo del presidente del Gobierno y candidato socialista se suceden. Un nuevo escrito se acaba de poner en circulación en Madrid liderado por Juan Barranco, último alcalde del PSOE en la capital de España, e impulsado por Juan Lobato, el secretario general de la federación madrileña, con el que Sánchez ha compartido este jueves el arranque de la...
Cada vez son más los referentes de todas las generaciones y sensibilidades del PSOE, del felipismo al zapaterismo, el rubalcabismo e incluso del guerrismo, que han decidido dar un paso adelante y salir en defensa de Pedro Sánchez. Los manifiestos en respaldo del presidente del Gobierno y candidato socialista se suceden. Un nuevo escrito se acaba de poner en circulación en Madrid liderado por Juan Barranco, último alcalde del PSOE en la capital de España, e impulsado por Juan Lobato, el secretario general de la federación madrileña, con el que Sánchez ha compartido este jueves el arranque de la campaña. La iniciativa sigue el ejemplo de la que históricos del socialismo andaluz pusieron en marcha la semana pasada y a la que hasta hoy se habían adherido ocho ministros con Felipe González. “¡Pedro, Madrid está contigo!”, ha enfatizado Lobato.
En el caso del documento propulsado en Madrid, que lleva por lema El socialismo más veterano de Madrid, con Pedro Sánchez y con el PSOE, se han sumado por el momento 150 apoyos entre los que sobresalen ministros de los Gobiernos de González como Joaquín Almunia (que además fue secretario general del PSOE entre 1997 y 2000), Javier Moscoso, Enrique Barón, José María Maravall, Ángeles Amador, Juan Manuel Eguiagaray, Julián García y Matilde Fernández (candidata del guerrismo para liderar al PSOE en el proceso en que fue elegido José Luis Rodríguez Zapatero en 2000) y ministros durante la etapa del predecesor de Sánchez en La Moncloa como Magdalena Álvarez y Miguel Sebastián. También cierran filas con Sánchez altos cargos muy simbólicos como Francisco Javier Ledesma, Luis Alejandro Cendrero, Manuel de la Rocha y Eduardo Mangada, que fueron consejeros de la Comunidad de Madrid durante la presidencia de Joaquín Leguina, que en diciembre fue expulsado del PSOE por su apoyo a Isabel Díaz Ayuso. Otros nombres destacados de la federación madrileña, más allá de viceconsejeros y directores generales de la etapa de Leguina, son los de Jaime Lissavetzky, exsecretario general del PSOE de Madrid y muy vinculado a Rubalcaba, o el exdefensor del Pueblo Francisco Fernandez Marugán.
“Desde nuestra experiencia y lealtad con el PSOE, que implica una inequívoca lealtad con España, la idea de Europa y los Derechos Humanos, apelamos a la responsabilidad de la ciudadanía para que vuelva a otorgar su confianza a las siglas políticas con más veteranía de nuestro país. Hoy, esa experiencia y esa lealtad las sigue representando, en nombre del Partido Socialista, su secretario general y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez”, comparten los firmantes en el manifiesto que adelanta EL PAÍS y en el que reivindican su estatus como “militantes del PSOE de Madrid desde hace décadas con distintas responsabilidades orgánicas e institucionales en las diversas administraciones, local, regional o nacional”. “Esos orígenes y esta tarea de la que nos sentimos partícipes nos llena de orgullo socialista, más aún cuando evidenciamos que los mayores avances en España se han llevado a cabo, en los últimos 40 años, bajo los gobiernos de Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez”. Y abundan, en lo que se interpreta una respuesta a las críticas o silencios de algunos dirigentes socialistas hacia Sánchez: “En el PSOE, históricamente han prevalecido el pluralismo, el debate y la conciencia crítica frente a la característica jerarquía monolítica de la derecha, casi siempre vacía de contenidos. Por ello, siempre hemos sabido conjugar y equilibrar la utopía y el pragmatismo sin despreciar a nadie”.
“Un PP desnortado”
Todos los coinciden en que la democracia “de ninguna manera está consolidada en el mundo, ante la inestabilidad alentada por los nuevos aires ultraderechistas, que ya empiezan a arraigar en nuestro país en gobiernos municipales y autonómicos de la mano de un PP desnortado”, remarcan en relación con los pactos de Gobierno autonómicos del partido de Alberto Núñez Feijóo con Vox en la Comunidad Valenciana y Extremadura y en 140 ayuntamientos entre los que se incluyen ciudades como Valladolid, Toledo, Elche, Ciudad Real y Burgos.
Los autores del manifiesto advierten de que “derogar el sanchismo por la conjunción PP-Vox significa, como ya estamos comprobando, retroceder cívicamente en derechos conquistados desde la Transición en 1977″. “Esa derogación supondría borrar de un plumazo acuerdos y leyes consensuadas como la Reforma Laboral –aunque ahora el PP dice que es ‘sustancialmente buena’, contradiciéndose una vez más-, la ley sobre eutanasia, la Ley de Memoria Democrática, los avances en derechos de las mujeres, la revalorización de las pensiones de acuerdo con la inflación, el aumento del salario mínimo, el control del precio del gas y la electricidad, con la peleada ‘excepción ibérica’, y otras muchas decisiones económicas y sociales”, prosiguen.
El manifiesto plantea que “las derechas, más allá de sus permanentes contradicciones, insisten, a través de su poderío mediático, en derogar los grandes logros sociales, civiles y económicos de estos últimos años, que vienen en calificar como ‘sanchismo”. “Sin embargo, España, con un presidente socialista a la cabeza, ha sabido resolver momentos muy difíciles, con resultados que serán valorados positivamente por la historia: una pandemia, la erupción del volcán de La Palma o la invasión de Ucrania por Putin con las consecuencias económicas que ha conllevado”, rebaten destacando la gestión que el Gobierno de coalición ha realizado en una legislatura sin precedentes.
“Derogar el sanchismo”, añade el manifiesto, implicaría “también volver a la inestabilidad del último gobierno del PP en un asunto fundamental como Cataluña”. “Una clave sustancial de este periodo ha sido la estabilidad, la paz social y la seguridad que siente mayoritariamente la ciudadanía en esa parte de España”, hace hincapié, en referencia a cómo se ha reconducido la crisis del procés, que alcanzó su punto álgido con el desafío secesionista de 2017.
La vieja guardia del PSOE de Madrid, con importantísimos vínculos con los Ejecutivos de González y Zapatero, resalta a su vez cómo la región, donde la derecha gobierna desde 1995, “ha sido laboratorio de actitudes que erosionan el sistema democrático”. “En Madrid sabemos desde hace muchos años lo que es el ataque despiadado por las derechas a las candidaturas socialistas, e incluso, con la grave actitud antidemocrática que supuso el apoyo al tamayazo, llegar a la no aceptación de un resultado electoral adverso para la derecha que había dado la presidencia regional a nuestro partido, hace ahora 20 años”, se alerta sobre el escándalo político que evitó la investidura de Rafael Simancas como presidente de Madrid en 2003 y provocó la repetición electoral en que se impuso Esperanza Aguirre. “Esas formas se vienen exportando al resto de España y vemos, no sin preocupación cívica, cómo estos días el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y las políticas que representa, son atacadas de un modo también despiadado”, concluyen el manifiesto socialista en su llamada al voto para evitar las “conocidas prioridades espurias representadas por PP y Vox”.